Mi Croissanterie

Una Pastelería Argentina.
Nunca había conocido un lugar así, ni me lo imaginaba. No había relacionado antes pastelería con los argentinos, pero tiene mucha lógica, si ellos tienen tanta experiencia y manejo con masas de pizza y pasta, seguramente también lo hacen bien con productos dulces, al fin y al cabo no hay tanta diferencia en la preparación.
Mi Croissanterie está ubicada en una zona muy turística, a pocos metros de la salida de la Plaza Mayor hacia La Latina. El local es muy pequeño, pero llama mucho la atención por el color rosa de su fachada y el original nombre que sin duda funciona como gancho. Imposible pasar por ahí y no asomarse.
Esta pastelería está dedicada a los productos dulces por lo que tiene mayor variedad en este tipo de preparados pero también cuenta con productos salados.
Para los golosos; croissants, cupcakes, muffins, tartas y hojaldres.
Para los que no dejan de relacionar la gastronomía argentina con la carne, pizzas y pastas; empanadas argentinas, calzones y pizzas.
Mi Croissanterie es muy recomendable, productos caseros de gran calidad.

Es como entrar en la mente de un niño goloso, la estética ya te hace querer probar todos los dulces que están a la vista. Yo, inculta de mí, la primera vez que fui me dije: «pues ya que se llama así habrá que probar un criossant», y la verdad que estaba increíble, pero ante tal oferta de dulces me he quedado con ganas de volver y probar algo nuevo.

Con una estética de lo más cuidada, y un escaparate de lo más tentador, Mi Croissanterie es más que una panadería tradicional porque lo combina con productos de hoy.
A la vista están sus muffins adornadas con azúcar glass al más puro estilo de Sexo en Nueva York, pero también ofrecen empanadas argentinas, calzones, panpizzas, dulce de leche… y ¡pasteles! que cuando entras te da la impresión que va a recibirte Ned, el pastelero protagonista de Criando Malvas.