Conocí este bar en plena adolescencia, cuando ibamos los viernes y sábados por la tarde a comer pipas a las esquinas de Cánovas(había una tienda de frutos secos, Maguila se llamaba y ahí comprábamos las provisiones). En aquella época, por las tardes y noches, se llenaba de jóvenes que iban a jugar al durito con jarras de cerveza. Hoy en día es más bien un bar de barrio de toda la vida donde la gente, de todas las edades, va a tomar cañas, cafés, bocatas y tapas. También hay un menú bastante completo de comida tipo macarrones, ensaladas, lomo con patatas, pollo en salsa etc. Tiene una terraza bastante apañada y casi siempre llena ¡cómo nos gustan los bares en Valencia! Yo destacaríà la enorme televisión de pantalla plana que tienen y que cuando la ocasión lo merece sacan al mostrador office que da a la calle. Así puedes disfrutar de tu aperitivo viendo el fútbol, cuando hay partido, o viendo alguna otra programación interesante(y mucho más sugestiva, para mi) como son los JJOO o las noticias. La camarera es muy amable y cariñosa, se nota que conoce a su clientela más asidua y el trato es muy familiar. Me encantan las almendras y cacahuetes que te sacan con la bebida, son de las buenas tostadas en el horno, nada de compradillas en el súper. Sin duda volveré a tomar cañas con mis amigos y alguna que otra tapa.
Samuel M.
Classificação do local: 3 Valencia
Un bar OK. El servicio amable y amigable, perfecto para hacerse con la gente del barrio. Los precios acorde a la calidad y los cacahuetes tostados gratis siempre con la cerveza.