Le Petit Prince

La mejor sopa de cebolla que me comido en España! Los quesos exquisitos al mejor estilo francés… I love it

El sitio engaña por fuera, es pequeñito y se confunde entre otros sitios de alrededor, pero es uno de mis sitios preferidos para comer en Madrid (por suerte lo tengo al lado de la oficina).
Sobre comer a la carta, no puedo opinar, así que me centraré en el menú, que es en lo que soy experta.
MENÚ: Desde hace ya un tiempo, tienen un menú fijo la mes, con unos 6 platos a elegir de primero, 6 de segundo y unos 4 postres. Esto, si eres como yo, que vas esporádicamente está genial, aunque si eres de comer fuera todos los días, tal vez resulte repetitivo. Además, en su página de Facebook puedes consultar el menú (aunque no siempre lo publican… algo que deberían mejorar que no cuesta nada), pero si eres tan glotón /​glotona como yo, te encantará saber lo que te espera antes de llegar…
PRECIO /​CALIDAD: El precio es algo más caro que otros menús de la zona (13,50 €), pero la calidad es muuuucho mayor que otros locales, de hecho es de esos sitios, que no me importa pagar un poco más, por la diferencia que hay.
COMIDA: Todos los platos del menú suelen ser franceses (que eso se supone, pero nunca se sabe). Y la calidad es EXCELENTE. De verdad, pocos restaurantes me encuentro que tengan todavía ese sabor de comida casera. Sobre todo el pescado al horno, o el steak tartar (que lo ponen en menú, sí!!) o las croquetas… en general, hay muy pocas cosas que no haya encontrado excelentes aquí!!
PERSONAL: Lo primero que ves, es que son todo franceses (que siempre da la impresión que van a saber más sobre comida francesa …) y son muy simpáticos y atentos… hasta que te sirven. Para pedir la cuenta siempre he tenido que esperar muchísimo, así que mejor ir con tranquilidad. Eso sí, nunca falta una sonrisa en los camareros.
DECORACIÓN: Aquí regular. No es feo, pero tampoco es precioso. Para lo pequeño que es lo tienen bastante mono puesto… Aunque podría mejorarse el local. Tal vez sea este punto por el que no le pongo 5 estrellas. Aunque hay que decir, que con la última reforma ha quedado mucho mejor.

Buscando algún sitio nuevo para comer cerca de casa de mi madre, caímos en este local que solía ser un sitio poco recomendable y que, gracias al lavado de cara que le han dado estos jóvenes franceses, ha mejorado la oferta gastronómica de la zona (que no solo de marisco vive el hombre).
Tienen una terraza en la calle (que es peatonal a esta altura), pero nosotros elegimos el frescor de los saloncitos interiores, que son muy agradables a pesar de llenarse rápido. De primero pedimos unas croquetas de brandada de bacalao y una ensalada César; las croquetas estaban buenas pero tenían demasiado bacalao y poca bechamel, y la ensalada tenía un sabor magnífico. De segundo pedimos magret de pato con manzana asada y un sandwich de rosbif con salsa tártara; el pato fue magnífico, aunque confieso que tengo que dejarlo porque me da pena, y el sandwich de rosbif estaba muy bueno, aunque hay que tener en cuenta que viene en pan de verdad y no de molde. De postre pedimos una crème bruleé (una crema catalana) que estaba bastante rica.
Sumando la calidad de la comida a la buenísima atención (aunque aún se les escapan algunos conceptos del castellano), puedo decir que el sitio es muy recomendable. También que no es para todos los días porque las cantidades no son excesivas y el precio es abultado, pero para ir de vez en cuando me pareció maravilloso.

Un restaurante francés sin pretensiones de ser un sitio de gran lujo, con franceses tanto como responsables de sala como camareros, que hablan francés entre ellos, y que te ponen steak tartar y ratatouille en su menú del día. ¿En serio se puede pedir algo más para sentirte como en la mismísima París? Me he enamorado de Le Petit Prince, y sobre todo porque encima tuvimos la suerte de que en la mesa de al lado se sentaron unos franceses, por lo que TODO el ambiente era 100% galo.
La comida estaba muy rica, con canciones no muy grandes pero bien ajustadas para no salir con hambre. Los postres no eran franceses (mousse de chocolate — megariquísima-​, panacotta…) y el menú costó 13,50 €. Espero poder repetir pronto.

Buenísima comida francesa. Menú del día con variedad y calidad y a un precio razonable. Volveremos!!!

La comida muy bien. Calidad precio correcta, y sobretodo un excelente servicio. Nos ayudaron con la elección de entrantes, consultado nuestros gustos y ayudándonos con la carta. Muy atentos y cordiales. Grata experiencia. ;)