Fotomatón Bar – Sala De Conciertos

El Fotomatón es un local pequeño situado a pocos metros de Plaza de España, en el que puedes escuchar buena música indie de todos los tiempos y huir de las grandes masas que se aglutinan en otras salas de Madrid. Lleva abierto unos siete años, en la actualidad han cambiado de dueños pero siguen manteniendo la esencia de sus dueños iniciales. Así como curiosidad apunto que los nuevos dueños saben lo que hacen ya que llevan años en el sector de la música independiente, uno de ellos es Joanra de Love Of Lesbian, un tipo muy majete. Cuentan con una amplia programación de conciertos, clases de guitarra, catas concierto organizadas por I´m The Mocker, sesiones de dj´s y fiestas post conciertos. Suelen organizar también fiestas de presentación de festivales amenizadas por divertidas sesiones de dj´s .
Para enterarse de todo tienen una página en Facebook muy actualizada. Me gusta este sitio porque puedo disfrutar de una copa y mientras escuchar buena música, bailar con espacio y ver un precioso cartel de la gira que de los Planetas ‘Una semana en el motor de un autobús’. Ah! Otra cosa… Muchas veces me encuentro con músicos y cantantes de la escena underground madrileña y española en este local, por algo será.
En cuanto a precios, los normales de todos los garitos, copas a 7 – 8 euros, tercios a 3 euros antes de las 00:00, las catas concierto a 12 y los conciertos dependiendo del artista, pero vamos nunca he llegado a pagar 20 euros por asistir a un concierto en el Fotomató

Uno de mis garitos favoritos para salir en Madrid desde hace mucho tiempo. Por su selección musical es de los pocos sitios que de verdad pueden llamarse alternativos, a diferencia de otros bares de corte popero o indie donde la música es siempre sota, caballo y rey, en el Fotomatón pueden escucharse grupos diferentes cada noche, con una selección variada y siempre de calidad, programando DJs diferentes a los que se permite pinchar con absoluta libertad.
Otra cosa que me gusta del Fotomatón es que no es en absoluto un sitio de posturero, hay muy buen ambiente y es uno de esos sitios donde puedes terminar hablando con cualquiera y se llegan a pasar noches muy divertidas.
Su principal problema es lo pequeño que es y lo mucho que se peta a partir de la una más o menos. Dependiendo de la noche llega a ser demasiado y te puede llegar a hacer irte a otro sitio. Una pega menor que se le puede poner es su decoración, demasiado fría e impersonal, no pega demasiado con el tipo de bar que es.

Ternelo a dos pasos de casa es un lujo total. Al igual que el Siroco. La verdad que es de los pocos lugares que se arriesgan a planificar conciertos de música independiente cuando somos cuatro gatos los que vamos. Lleva apostando por el pop patrio mucho tiempo y de allí han salido grupos que ahora son de los más importantes. Eso sí, los precios cada vez están más carillos, cosas de la capital pero las entradas de conciertos siguen siendo baratas.

Hay muy pocas salas en Madrid que sigan, regularmente, programando conciertos de bandas nacionales con la regularidad que lo hace el Fotomatón, que poco a poco se ha ido convirtiendo en una de las referencias del indie patrio capitalino, porque por suerte siguen mostrando su apoyo a la música que se hace en nuestro país, desde un escenario más que modesto.
La cosa está en que la educación musical en nuestro país es tan pobre que es bien difícil que la cosa mejore. Los únicos directos que lo petan son los de bandas reconocidas universalmente, y tenemos (especialmente en Madrid) una oferta de salas en vivo de lo más exiguo. En otros países es más o menos normal ir a tomar una copa y que una banda se suba al escenario y toque tres o cuatro canciones, en un formato cortísimo, casi inapreciable. La gente, normalmente lo trata con respecto, que es todo un triunfo, y se callan durante los quince minutos de rigor para escuchar algo que igual no les gusta, pero que no está de más prestarle atención: ¡los grupos que más me gustan casi que los he oído por casualidad!
Es por eso que creo que la acción del Fotomatón es tan loable y tan necesaria. ¡Que hay que impulsar un poco la escena en la capital! No es una cuestión patriótica ni nada que se le asemeje: es el hecho de que hay mucha gente y muchas ideas, pero muy pocos espacios donde llevarlas a cabo.

Un local en pleno centro de Madrid que en los últimos años ha dado una gran ampliación a la gama de conciertos. Sobre todo cuando cada vez más salas pequeñas se ven obligados a cerrar, ellos siguen ahí. Recomendable tanto para ir a ver el concierto de algún colega como simplemente a entrar a ver qué esta pasando. Perfecto para noches improvisadas.

En Plaza España y en la desconocida plaza del conde de Toreno. Nos encontramos con un local un poco loco, pero muy bueno. Es una sala multiusos y es bastante probable y facil que durante la semana se celebren conciertos, generalmente muy eclecticos y alternativos. En cuanto a sonido para este tipo de actos pues diria que aprueba con un bien, justito pero no me puedo quejar demasiado sobre eso. Lo que si añadiria es que tiene mejor sonido que otras pavoneadas salas y mucho mas famosa que esta.
En cuanto a decoración no destaca en nada, no es un lugar que nos vaya a maravillar y tampoco se encuentra totalmente lleno. Asi que se puede ir con la tranquilidad de que no nos van a estar saludando a codazos durante toda la noche. Eso si esta decorado con unas bellas ilustraciones, que en cuanto a decoración es lo mas bonito del local.
Lo mejor sin duda alguna el trato que tiene el local, el dueño, si es que lo era majisimo, en unas horas que estuvimos nos invito a chupitos y a una copa. Increible que en Madrid te tengan en cuenta en algun sitio, solo por sentirte tan bien tratado, merece las 5 estrellas, sin duda merecido, tendra sus fallos pero las noches en este lugar son emblematicas.
Lo mejor: trato y las copas gratis.
Lo peor: decoración del local
Por cierto como pub es muy del tipo malasañero, asi que ya sabeis que podeis encontrar y la musica es de calidad.