Bodega de los Reyes

Una bonita tienda, gran cantidad y variedad de vinos, una interesante y entretenida cata, y un evento bien organizado. Esa ha sido mi experiencia en la bodega de los reyes. Una empresa nos organizo un evento en el que, además de explicarnos conceptos técnicos, nos prepararon una divertida cata. Aprendí muchos conceptos de como apreciar un buen vino, y aprender a saborearlo. Los cincos sentidos son importantes.
Dispone de una tienda en la parte superior, dónde poder realizar tus compras de vino. En la parte inferior, bajando una estrecha escalera, encontrarás una pequeña bodeguita dónde realizar catas y disfrutar de una agradable cena. No es un restaurante como tal, pero ante un evento privado, sí puede prepararte un catering de calidad.
La tienda la lleva una familia, y todos ellos son encantadores. La explicación de la cata fue un 10. Sabíais que a partir de 1863 hubo en todo el mundo una plaga de filoxera que destruyó todas las viñas conocidas. Sólo se salvaron alguna cepa en Canarias, una región de Francia y Chile. Así que si alguna vez os dicen que tiene un vino de más de 200 años…Imposible!
Bebe, aprende y disfruta.

Yo no sé nada de vino. Bueno, perdón se algo: me encanta bebérmelo. Pero no tengo ni idea de qué va con qué ni nada por el estilo. Así que me gusta dejarme aconsejar, a menos en la medida de lo posible.
Pero sobre todo me gusta la gente que verdaderamente sabe lo que vende, y que sabe perfectamente lo que vas buscando. Así es como acabé comprando un día en la Bodega de los Reyes y llevándome dos vinos estupendos que me han sabido a gloria. Además, el tipo me dijo exactamente qué hacer con cada uno en cada momento, cómo de fríos tenían que estar, etc.
Un servicio al cliente de lo más adecuado y muy competente, la verdad. ¡Volveré seguro, porque tienen tantos vinos que estoy lejos de probarlos todos!

I was an idiot — I freely admit it. However, I don’t think the victim should have to shoulder all the blame. I made the two big classic tourist mistakes: I was honest and I trusted the employees to help me rather than exploit me. If anyone needs a lesson, here are a few of the specific things I did wrong:
1. I announced right away that I wanted something special to bring back to the US with me
2. I mentioned a relatively rare and expensive variety of wine when asked what I was interested in
3. I stayed in the store even when they immediately steered me off the variety I had expressed interest in
4. I took the bait when asked if I was interested in something «really special»
5. I stood by and watched as they brought down bottles from the very tippy-​top shelf
6. I barely pressed on the prices they mentioned, so they lowered one by 10 euros (I later discovered that it was still well above the going price for that wine)
7. I accepted a «deal» to throw in an extra bottle of something I didn’t want «for free»
8. I didn’t verify the exact prices of each bottle and just paid what I was told I owed
The whole idea of this excursion was to get a better deal by buying in Spain and bringing back home, but I wound up paying more than if I had just bought similar bottles locally or on the internet. So, if you’re a good negotiator, ideally not a tourist, and especially if you know the values of specific Spanish wines, this is probably a fine shop. But if you’re at all like me, buyer beware.

Me ha salvado más de una vez de no ir a una cena con las manos vacías. Es un local con un verdadero encanto especial donde además hacen catas y cursos.
La variedad de sus vinos sólo es comparable con la profesionalidad de los dependientes. No hace mucho lleé a un amigo que es un verdadero entendido de los vinos y se quedó fascinado. Así que como el me lo recomendó a mí no pisar otro sitio yo ahora lo hago ocn vostros.

Siempre que no sé que regalarle a mi padre, busco algún local especializado en vino y le regalo una buena botellita de vino.
No es un gran experto, pero tiene su pequeña colección y cada vez se va poniendo más difícil encontrar algo que satisfaga su paladar.
Por casualidad encontré este negocio, y entré pensando que sería una tahona antigua y que acabaría saliendo con las manos vacías.
Sin embargo encontré un local con encanto con unos dependientes encantadores y con gran experiencia y sabiduría en el mundo del vino.
Quedé encantada con la atención y con la decoración y estilo del local.
Además de la tienda, cuentan con un reservado para realizar catas y ofrecen distintos servicios a empresas como cursos, degustaciones,…