El Mandil

Nice tapas or regular restaurant with New York style decoration. One waitress was not really nice and was pressuring us to order but we spent a good moment moment anyway. Apparently it is better to book.

Otra buena opción de menú en la zona. Hoy entramos a probarlo y realmente bien. Además sin mucho problema de sitio pero con bastante gente.
Probé el arroz con verdura y la merluza y muy ricas. El flan la pena que no era casero!

Pretty good little tapas bar in a hoppin’ part of Madrid! Food was good — a bit pricey for what it was, but decent enough.

Bar de barrio y algo sucio casi siempre. Quién defina este bar como ‘cool’, o no ha estado nunca, o no sabe qué viene a significar ‘cool’. Caro para la calidad de comida (torreznos a 9 €) y vinos (2,50 € bastante regulares). Creo que lo mejor que tiene es el menú, al menos lo más equilibrado.

Mañometro: Bueno para una día alparcero.
Tengo sensaciones encontradas con este local, por un lado y pensándolo fríamente, el sitio esta bastante bien, buena comida, trato correcto y un local muy agradable, sin embargo, y como he comentado en muchas ocasiones, la hostelería madrileña es voraz, y cuando pones según que precios el cliente tiende a pedirte la excelencia como «base» y ese quizás es el talón de aquiles a mi juicio de éste último.
Como dijo Jack el destripador, vamos por partes:
Bebidas: Una caña y un tinto, bien tirada la primera, muy suave el segundo, muy correctos, minipunto para El Mandil
Tapita: Gambels with gabardina: muy muy ricas, siempre es de agradecer bares donde no tiendan a la típica patata frita de sobre sacada con cazuela de una bolsa de 5 kilos, por nombre — «Patatas Industriales el pequeño Cebatin».
Croqueta: Muy correcta también, aunque he de decir que soy mas de taquito de jamón que de carne deshilachada, para gusto colores, claro está, ni que decir tiene que estaba bien rica a pesar de esta circunstancia.
Jamon con Padrón: De esta doy cuenta por voz de Merche M, sabrosa y muy bien presentada, para volver.
Huevos Rotos: Y aquí viene cuando la matan, cuando pides unos huevos rotos, y sobretodo si rondan los 9,5 euros, esperas unos huevos TOP, la realidad es que tardaron un verano,
los huevos tenían demasiada «babilla» la patata era demasiado grande y el jamón salado en exceso, ¿Esto que provoca? Que esten buenos, repito, buenos, pero que tambien tengas la sensación de que no valen lo que estas pagando por ellos.
La realidad, es que seguramente volveré, el sitio es correcto, esta rico y se está agustico, lo de los huevos rotos … me lo pensaré.

Stumbled in looking for someplace for dinner. So great! Cost effective and friendly, we had two bottles of wine and several rounds of tapas.

Me sorprende un poco que este restaurante tenga 4 estrellas. Si bien el servicio fue muy amable y el local está bastante bien decorado, la comida (o al menos lo que yo probé) no destaca en absoluto.
Pedimos unas croquetas que eran muy mejorables, una ensalada que no era nada especial y yo tomé un entrecot sin mucho sabor y no especialmente tierno. La experiencia fue agradable por el entorno y el trato pero en lo culinario, hay sitios mil veces mejores.

La verdad es que a mí, hay veces, que se me gana con un servicio simpático. Llegué a El Mandil pelado de frío, con ganas de meterme algo calentito para el cuerpo. Me senté en una de las mesas altas, y vinieron a tomarme nota. Me hice con una sopa de cocido (muy rica, y muy sabrosa) y luego tiré por el entrecôte, que la verdad es que no estaba tan bueno, pero se dejaba comer.
El menú del día está muy bien, porque por 9 € sales comido y bebido (refrescos de 350ml, OH YEAH!). Y además tienen wifi, así que si eres –como yo– de los que aprovechan un ratito entre reuniones para comer y trabajar, te va a venir de perlas.
El servicio es simpatiquísimo. Me atendieron dos chicas (una en la barra, y otra que me traía los platos) y hasta me hicieron reír en un par de ocasiones, porque entre ellas se lanzaban puyas. «¿Cómo es que no le has puesto tenedor al chico, cómo quieres que se coma la carne?». «Pero si el cubierto se lo has puesto tú». En fin, que yo las oía de fondo, y la verdad es que eran muy simpáticas, de esas personas que te atienden diciéndote cosas cariñosas tipo «Ay corazón» pero no resulta forzado ni nada.
Eso sí, su simpatía no estaba reñida con su celeridad ni con su eficiencia. Un 10.
Por otro lado, el local es mono, con su pared de ladrillo visto, sus detalles en madera, etc. Las señoras que estaban comiendo detrás de mí elogiaron el vino (tanto que le preguntaron a la camarera el nombre) pero yo, como estaba «de servicio» no lo caté. Habrá que volver a hacerlo entonces…

Como el bar del barrio de toda la vida: válido tanto para desayunar (increíbles sus croissants de mantequilla), almorzar (menú del día de alto nivel, a 9 €), tomar el café, unos pintxos o cenar a base de raciones (tradicionales, pero de presentación actualizada). La carta cada vez tiene más opciones, pero me quedo con la parrillada de verduras y la (muy original) ensalada El Mandil. Aún no he probado las copas, pero tienen pintaza, y precios muy por debajo de la media… Cada vez más asiduo!

Buena decoración, buena atención, la comida muy buena (recomiendo la parrillada de frutas y verduras). En buena localización. El precio un poco alto pero la calidad de la comida muy buena. Lo único que no recomendaría es la tortilla de patatas (sosa y un pelín cara).

Diseño muy cool fue todo un descubrimiento iba de camino al evento #miercolesglorioso y descubri este bar, tome una caña en una barra que tiene frente a un cristal que da a la calle y hace que la caña sea de lo mas entretenida, ya que estas viendo la gente pasar.
Buena decoracion y la caña a 2 euros!
Repetiré
PD: Nos vemos en otro check in!