Café Libertad

Un clasico en la colonia chapultepec .Si te gusta pasar hrs platicando sentado sin quedarte desnalgado y en un entorno artsy fartsy este es tu lugar. Pedi chilaquiles Libertad, al horno, salsa picosa, huevo estrellado muy cocido, frijoles y bolillo tapatio el cual no ha podido ser clonado por los chilangos.
Café negro de prensa tiene refil

Vine a este lugar por qué me habían comentado que aquí eran los mejores chilaquiles de Guadalajara, cosa que no es verdad, y como pasaban de las 2 pm ya no acompañe mis chilaquiles con bolillo o birote puesto que a esa hora ya no te lo pueden dar. En general un lugar agradable pero nada fuera de este mundo.

Su mayor virtud es la ubicación, antes era una casa enorme abandonada que adaptaron para crear 2 restaurants, a solo una cuadra de chapultepec puedes venir aqui el dia que sea incluido sabado y encontraras un ambiente bastante tranquilo .
Tienen desde cafes hasta comidas ligeras o botanas ligeras para acompañar tu cerveza, no he probado muchas cosas de comida pero los chilaquiles estan muy buenos .
El precio esta bastante accesible y si cuentas con suerte puedes encontrar estacionamiento justo en frente del negocio, eso si, por la noche ya que en el dia esta usado por los gandallas del consulado americano.
No encontre wifi en el establecimiento, buen provecho!

En el corazón de la zona de Chapu este café es muy buena opción para comer. Me encantan las tostadas de panela que están muy bien surtidas y las acompaña una deliciosa salsa verde picosita.
Los precios son muy buenos y el servicio rápido. Tienen una galería en la parte de adentro.

Buen lugar para comer por esta zona, tienen un menú amplio con desayunos, comidas y postres.
Los precios son justos.
La comida tiene muy buen sabor, recomiendo el molcajete de arrachera con queso panela y nopalitos, esta uff buenisimo.
Lo único que no me gusta tanto es el servicio, son medio lentos y si te sientas en la terraza nadie te ve cuando levantas la mano.

The service here was not very great… At all. We were not greeted when we came to the entrance, in fact we had to basically ask to be greeted and seated. The server brought the wrong order, and stared at the person in my party that brought it up to her with out any response. I ordered a hot sand which which was actually really good. Aside from the service, the food was actually good. Cute ambiance, with dim lights, jazzy music, and also great location walking distance to tons of bars and water fall fountains.

Este lugar desde el momento en que lo visite, me enamore, es lo mejor en cafes de esta ciudad en una tardecita lluviosa, asoleada, a cualquier hora del dia, este lugar te llena el alma, con los olores de los alimentos que preparan con mucho cariño, te trasportas a muchos lugares con el simple olor de un cafecito por la mañana, el alma se enamora al disfrutar de este lugar, desde sus esquistos chilaquiles, hasta el pan mas chiquitito y delicioso en este lugar. no se van a arrepentir

Excelente ambiente a todas horas, buenos precios y atención muy amable. Un clásico de la zona de Chapultepec.

La comida esta comestible, no mala pero no buena. El servicio es pésimo, extremadamente lento. Desde que entramos la hostess hizo una mueca extraña no supe si entrar y elegir donde sentarnos nosotros mismos o que ella nos guiara. Después de ver nuestras caras nos dijo que nos podíamos sentar en la galería o en el salón, supuse el salón era lo de adentro. En fin elegimos nuestra propia mesa. De ahí el resto del servicio fue igual de lento, los meseros platicando tomándose todo su tiempo en todo. Nunca nos llegó un segundo café que pedimos. Nada groseros, pero extremadamente ineficientes. No nos trajeron la cuenta (después de pedirla unas 4 veces) hasta que vieron que nos paramos para salir.
Cuando tu conversación en la mesa durante tu desayuno gira en torno al servicio es porque es pésimo y obviamente no disfrutas tu estancia.

¡No pedí chilaquiles! Olvidé las reseñas y probé unas entomatadas, estaban muy bonitas y el sabor… estaba bien aunque no destacó. El personal es muy amable.
Recomiendo el jugo verde.
Al llegar, indicamos que era nuestra primer visita y nos recomendaron comer en la galería, está lindo aunque creo que comer afuera en la terraza es mejor idea, se siente más agradable el ambiente.
¡Cuidado con las bicicletas! Si es domingo por la mañana, recuerda que cierran una de las avenidas principales, así que podrías demorarte un poco para llegar.

Something is weird in Guadalajara, the restaurants that are cheap with really bad food are getting good ratings on Unilocal,i’m assuming because they are cheap,
this restaurant isn’t super cheap, but it’s actually yummy with a nice atmosphere, it seems like a nice place for a date, serves breakfast all day, just don’t sit near the windows or you’ll be bothered by vendors and beggars about 1 every 2 to 3 minutes, selling the most useless items, or the street singer who shouts the same horrible wanna be punk rock music with his acoustic guitar in spanish… you can hear him up and down the block, jut sit a table or 2 from the street ;)

Desayunos todo el día, simplemente maravilloso.
Mi fantasía y la de muchas personas es poder comer por la tarde o por la noche chilaquiles, en Café Libertad es posible. Verdes, rojos o gratinados son riquísimos. Yo recomiendo los divorciados (no están en la carta, pero si los sirven): mitad salsa roja, mitad salsa verde y gratinados, vienen acompañados de frijoles y totopos.
Hay muchas opciones para probar en este espacio con carne y sin carne, lo que lo convierte en una buena opción para vegetarianos, hay: molcajetes, huevos al gusto, malteadas, sandwiches calientes, hamburguesas, botanas, ensaladas, enchiladas, enfrijoladas, machaca, fruta, entre muchas delicias más.
Los precios son muy accesibles, el pan es hecho por ellos mismos, el café puede ser hecho al momento también y es delicioso.
Café Libertad es una excelente opción para desayunar, comer, cenar o simplemente para ir por una botana y una cerveza o un postre con bebida dulce.
Al llegar te recibirá una terraza llena de equipales, yo no soy amiga de estos asientos artesanales incluso me parecen incómodos, pero te recomiendo la sala de adentro, es un viaje en el pasado, es como estar comiendo en un café de los cincuenta, esa zona es muy encantadora.
Te recomiendo el café de máquina, preparado al momento, el muffin de zanahoria y de natas.
TIP: Al lado está ubicado un restaurante de Pizzas, puedes pedir algo de la carta de ese lugar ya que son socios e incluso ambos espacios se comunican.
Los viernes hay trova y el volumen es muy alto, por lo que no te recomiendo ir en este día. Cualquier otro día de la semana te puede tocar la suerte de que llegue un músico sorpresa a presentar su proyecto.
El servicio es muy bueno, rápido y eficiente, hay wi-​fi, aceptan tarjetas y puedes visitar la galería de arte al final de tu visita.

Tengo una amiga que es fan de este café, ella fue la que me habló de este lugar por primera vez y siempre que puedo regreso ahí con ella, y es que en este lugar no sólo conviene ir a tomarse un cafecito, sino darse un buen atascón (jejeje…) De verdad, tienen unos «Chilaquiles libertad» muy ricos, picosos y MUCHO, pero valen la pena porque están acompañados de frijolitos refritos y gratinados con un queso delicioso.
Otro de mis platillos favoritos son los molcajetes que pueden ser de queso panela o de carne, la gente que no los conoce pensaría que son para compartir, y se puede, pero son tan buenos que te pedirías uno para ti solito.
El ambiente es muy artístico y tranquilo, ideal para echar andar la imaginación y crear algo nuevo. Ahora, si eres amante de las mascotas y te cuesta dejarlas en casa, en este lugar también las aman por eso son «petfriend» así que las mascotas son bienvenidas.
Algo también bueno en este lugar, por cierto, es la atención, en eso sí que se vuelan la barda.
Pdt. Acuérdate de llevar para la propina.

Café Libertad es una buena opción para desayunar, ubicada en frente del consulado americano, el café Libertad se encuentra abierto desde muy temprano y ofrece desayunos a muy buen precio, los chilaquiles son ricos al igual que su pan. Las mesas se encuentran al aire libre y el lugar está lleno de plantas por lo que el ambiente es un fresco muy rico para el calor de la mañana en Guadalajara.
El establecimiento está abierto todo el día, pero sus horas fuertes son el desayuno y la cena, mucha gente acude tomarse un café en la tarde noche y platicar, las plantas dan la sensación de tranquilidad y frescura.
El servicio es bueno, la comida también, es una buena opción para empezar la jornada. El menú no es muy variado pero sus platillos están bien elegidos y se ajusta a lo que quieres desayunar, comer y cenar. Tomar un café en la tarde es delicioso. Es bueno darse una vuelta y probar su comida.

Llegué a este lugar un día que estaba cerca de Chapultepec con mi mamá y buscábamos un lugar donde desayunar rico y platicar a nuestras anchas, yo ya había pasado muchas veces por ahí y siempre se me había antojado entrar, así que ese fue el lugar que elegimos.
Era un domingo así que el lugar estaba llenísimo, pero en cuestión de 10 minutos nos asignaron mesa. Todo el personal es muy amable y desde el inicio nos advirtieron que el desayuno podría tardar un poco más de lo habitual, aunque no termino siendo así.
Yo pedí chocolate caliente y los chilaquiles Libertad, creo que no pude haber hecho mejores elecciones, ambos estaban buenísimos, aunque si eres malo para el picante los chilaquiles podría no ser una buena opción para ti. Lo que más me gusto del lugar es que apoyan mucho el arte y tienen una galería en el lugar, también el día que fui estaban cantando ópera dos chavos que pidieron permiso para entrar a hacerlo. El ambiente es súper agradable y por supuesto que volvería.

Uno de mis lugares favoritos de la zona, las razones son muchas, la primera quizás sea que venden desayunos todo el día, sí, puedes llegar a las 8 de la noche y pedir unos chilaquiles (yo lo recomiendo).
De la comida hay mucho que decir, las opciones son suficientes para satisfacer casi cualquier antojo y estilo de alimentación, los vegetarianos cuentan con opciones y los más carnívoros puedes entrarle a una carne en su punto, pero lo mejor de este lugar son los desayunos y en especial sus chilaquiles, yo los recomiendo gratinados, tronadores y con pollo o porción de huevo, también tienen unos chilaquiles cuya salsa está hecha con puro chile de tomatillo, especial para los valientes, son deliciosos pero muy picantes.
Dos cosas muy destacables de este lugar son:
1. Los jugos son hechos al momento, no están refigerados como en otros cafetines, siempre saben frescos y son deliciosos, yo te recomiendo el jugo verde.
2. Ellos hacen su propio pan, así que los sandwich, hamburguesas y más son preparados al momento con pan de sus hornos, te recomiendo pedir el panqué de natas, es pequeño y delicioso.
Algo que no me gusta mucho del lugar es que los fines de semana se presentan cantantes de trova y románticos que siento que no van por el tipo de público y que además hacen difícil la conversación.
También tienen una galería de arte que puedes visitar después de tu comida, aceptan tarjetas de crédito, tienen wi-​fi, los meseros son muy amables y el café es de muy buena calidad.

Dicen que los chilaquiles más ricos, son de este lugar, yo como amante de los chilaquiles tuve que ir a comprobarlo. Realmente no sé si son los más ricos, pero su sabor era exquisito. Debo decir que estaban deliciosos !!!
Su terraza es muy agradable, ya sea para desayunar, comer, o simplemente tomarte unas cervezas con tus amigos, este lugar es perfecto.
La atención es buena y las instalaciones son muy agradables, con las tradicionales mesas y equipales hacen este lugar único.
Una recomendación que puedo darle a este lugar, solo sería que mejoren un poco la red de internet, ya que se pierde en muchas ocasiones.

Conocí este café porque una vez me mandaron del trabajo y para suerte mía me dieron de desayunar.
Debo decir que los chilaquiles son buenísimos y la atención también, además es un lugar muy bonito que, a su vez, cuenta con una galería, entonces te puedes echar tu buen plato de chilaquiles, o sólo un cafecito o algún otro platillo de los que aquí venden, mientras contemplas los cuadros, fotografías o esculturas que se exponen.
De acuerdo a la opinión popular, es mejor para ir a desayunar, pero pueden experimentarle yendo a otra hora, pues para eso está. El punto es probar y conocer.

Hace pocos meses conocí este lugar por mi mejor amigo, me juraba que ahí preparaban unos chilaquiles buenísimos y siempre que pasaba por ahí lo veía pero nunca entraba, hasta un día que me quedé de ver con una amiga para desayunar en Chapultepec (por cierto, no invité a mi mejor amigo y se ofendió jajaja).
Cuando nos encontramos no nos poníamos de acuerdo a qué lugar ir y recordé ese lugar, pensé que era un buen momento para averiguar el alboroto que ocasionaban esos famosos chilaquiles.
Y que me arrepiento… de no haber ido antes, ¡Eran deliciosos!, si no fuera porque estaban muy bien servidos y me llené, hubiera comido otros estoy segura jajaja. En serio esos chilaquiles no sé cómo los preparen, estoy enamorada de ellos, ojalá pudiera ir por unos ahorita pero son las dos de la mañana, tendré que esperar unas horas más.

Lo que más rescato de este lugar es el ambiente y el bajo costo de la comida. Es un lugar al que me gusta ir en pareja, sólo a tomar algo un rato, pues siempre me gusta cómo luce todo. Sentada en equipales, al aire libre y con buen servicio.
He probado cafés y más bebidas que en lo general se me hacen ricas. Las hamburguesas las recomiendo. Venden un molcajete que trae mucho nopal, eso me agrada (porque amo los nopales). El menú tiene gran variedad.
La decoración, reitero, es lo que más me gusta; la comida y bebidas, aunque están ricos, siento que no es nada extraordinario, simplemente para quitar el hambre y pasar un buen rato.

Oigo las palabras mágicas «Café Libertad» y comienzo a sentir hambre y antojo. Sí, este lugar es ideal para venir a desayunar. En su menú hay varias cosas que uno debe probar, pero algo que sin duda resulta imperdible son los famosos «Chilaquiles Libertad»… ¡Son simplemente deliciosos! Y que mejor que acompañarlos con una malteada de vainilla o una limonada si hace calor. También las «Enchiladas libertad» con frijolitos refritos están de 10.
Llegar es muy fácil, está muy cerca de Avenida Chapultepec, a un costado del Consulado de los Estados Unidos. Aquí no sólo se viene a disfrutar de la comida, sino del ambiente, y es que es un lugar muy relax. A mi me fascina venir a desayunar aquí, es muy relajante y sabroso, te atienden bien, está limpio y además no es caro ¿Qué más se puede pedir?
Siempre conocerás gente de varias partes del mundo que vienen a conocer Guadalajara y por recomendación desayunan o comen aquí.
Ideal para venir sólo acompañado y despejar la mente un rato. Ah, además son petfrendly y puedes estacionar tu bici sin problemas.

¿Qué cosa mala se puede decir de un restaurante que tiene desayunos todo el día? A mí por lo menos no se me ocurre nada. Café Libertad es un suspiro de autenticidad en la Colonia Americana, donde muchos de los lugares tienen su dosis de hipster.
Como he empezado mi reseña mi parte favorita de la carta son sus desayunos. Los chilaquiles están espectaculares, en especial los Chilaquiles Libertad (cuidado porque están picosos) y las enfrijoladas. Ahora que si el hambre es más, hay molcajetes de distintas carnes, con salsita verde y su nopal. Con todo lo buena que está la comida, su servicio se gana una mención especial. La mesera y el mesero que nos atendieron el día que fuimos son un encanto de atentos y muy chistosos.
Conclusión: un lugar para comer rico (y barato) en un lugar precioso y hacer sobremesa sin prisas sentado en un cómodo equipal.