Viejo Barrio

Es quizás uno de los restaurantes que más he visitado Benimaclet porque durante un tiempo un grupo de amigos lo frecuentamos con cierta asiduidad.
Como bien podemos observar nada más trapasar la puerta del local y sentarnos a la mesa, Viejo Barrio se trata de un asador argentino poco común en Valencia, donde la distinción, el servicio exquisito y la calidad de sus propuestas gastronómica son bandera.
La selección de carnes que se ofrece es excelente, destacando sobremanera el tradicional bife argentino, cocinado con excelencia y con unos sabores espectaculares. Otros de los platos que destacan es el provolone funghi porcini, realmente delicioso, y las empanadas criollas, ricas ricas. Recomendable también, sin lugar a dudas, una de esas propuestas cárnicas en el que en un pequeño asador que nos colocan en la mesa, podemos terminar de cocinar una selección de exquisitas carnes y embutidos.
Cabe mencionar también la interesante carta de vinos, con propuestas para todos los bolsillos, y el cuidado con el que está decorado y organizado el local; muy cómodo está uno allí. El ambiente, además, es tranquilo y nada ruidoso.
Por último, el precio va acorde con la calidad y la atención que se presta en el local, por lo que no es barato.

Local muy bonito, buena carta de vinos, mención especial a men de Mencía, y el bife, simplemente espectacular. Y de precio con respecto a la calidad, muy bien. No me parece caro.

De los restaurantes de Benimaclet es, sin duda, al que más he ido. Creo haber probado todos sus platos, entre los que destaco:
— Provolone funghi porcini. Muy bueno, viene con el queso provolone, una salsa a base de boletus y con un toque de orégano si no recuerdo mal.
— Empanadas criollas: Todas las empanadas están buenísimas, pero la criolla es algo especial. Son pequeñas; si se quiere solo empanada como entrante aconsejaría pedir un variado.
— Bife: Es un corte poco corriente aquí en España. Inicialmente la carne era Patagónica y tenía un sabor ESPECTACULAR, impresionante, de verdad. Las últimas veces, pese a que la carne seguía siendo de buena calidad, me dio la impresión de que ya no teníà la misma procedencia, no era ese sabor taaan espectacular.
— Brocheta de carne: Realmente son como solomillos en brocheta. Es una ración muy generosa, difícil de acabar si has pedido buena cosa de entrantes. La brocheta tiene también cebolla y pimientos rojos y verdes. Muy recomendable.
En cuanto al servicio de vinos, reconozco que me gusta muy mucho el vino y quizás soy un poco exigente, es muy de andar por casa, tanto la carta como el servicio y las copas. Pese a ello siempre tienen algún buen vino argentino, chileno o español, como el Luís Cañas (crianza y reserva).
En cuanto al precio, si pides un vino medio, un par de entrantes y carne/​pescado más postre, el precio suele rondar los 60 o 65 euros por pareja.
Un lugar muy recomendable. Lugar acogedor, personal atento y amable. El mejor de los restaurantes que forman los 4vents.

Es un asador argentino bastante bueno, está justo al lado del Bajo Flores, ya que pertenecen al mismo grupo, así que si no hay sitio en uno, suelen ofrecerte ir al otro si está disponible. Son destacables las parrilladas, te las sirven con carbones encendidos para que te hagas la carne como tu quieras y suele ser una seleccion de lomo alto, lomo bajo, chorizo, panceta, diferentes embutidos… hay varios tipos, para diferente número de personas y siempre sales satisfecho, de verdad. Aquí también hay empanadas argentinas de carne y están buenísimas, aunque también hay de pollo y valen mucho la pena si te gusta algo más suave el sabor. Los entrantes también buenos, las ensaladas, los provolone, los quesos… en cuanto a vinos también están bastante bien surtidos, no es una carta muy extensa pero tienen una buena variedad de tipos y siempre aciertan en recomendarte. Los postres vuelvo a destacar los crepes de dulce de leche (se nota que me gusta el dulce de leche…)…Lo único malo es el precio, que está algo subido, pero para ir de vez en cuando es una opción muy recomendable.

La semana pasada nos apetecia mucho ir a un asador y pedí consejo a unos amigos mios muy puestos en el tema (a los que he recomendado encarecidamente que se unan a Unilocal para hacernos partícipes de su cultura gastronómica) y me aconsejaron este asador.
Yo personalmente, salí bastante contenta. La comida es muy buena y para nada escasa y el precio me pareció bastante razonable, puesto que con una entrada, la parrillada viejo barrio (q ahora os comentare en q consiste) y vino, salimos a 26 euros por persona.
De entrante nos pedimos un provolone que estaba de muerte, y nos trajeros el pan tostadito y en abundancia (no fué de estas cestas de pan que te sacan en algunos lugares que tienes que estar pidiendo que te la rellenen constantemente). Luego nos pedimos una «Parrillada Viejo Barrio» que es para un mínimo de dos personas y consta de varios tipos de carne que te sacan en una parrilla para q no se te enfrie.
De vino nos dejamos aconsejar por la camarera y nos trajo un muy buen vino y ademas barato (que ya que te dejas aconsejar, agradeces que no se aprovechen para meterte el vino mas caro de la carta).
Para terminar, deciros que yo fuí un dia entre semana, por lo que habia solo una mesa más y la tranquilidad era absoluta, pero por lo que me han comentado, no suele ser así en fin de semana.
Espero que disfruteis tanto como yo de este sitio!

Ya he hablado de alguno de los otros colegas de este grupo de restauración, como el Uma Crêpes y el restaurante Dadú. Pues ahora me dispongo a hacerlo del Viejo Barrio, el último que he visitado y al que podríamos considerarlo como el «primo» pijo argentino del grupo 4 vents.
Fui un día a cenar con mis padres. La elección fue mía porque sabía que este sitio era de lo más sobrio de la zona y consideré que a ellos les pegaba más este rollo. El local, al igual que los del resto, no defrauda. Moderno, pero cálido y agradable. Con una decoración cuidada al milímetro que refleja su interés por hacer las cosas bien hechas. Me gustó, y a ellos también.
Respecto a la comida, como la especialidad son las carnes a la brasa pues nos decantamos por ellas. Pedimos una Parrillada del Sur para dos que tenía, entre otras cosas, morcilla, chorizo y pollo deshuesado. La acompañamos con un par de brochetas de pollo, piña y bacon, que a mi me gustarón bastante más que la parrillada. Todo ello para compartir. También pedimos una ensalada y unas verduras a la brasa como entrantes. De postre optamos por algo «ligerito» como un mousse de maracuyá y una tarta de yogurt, también perfectos, porque nos vinieron ideales para desempalagarnos del festín cárnico que nos acabábamos de dar.
Salimos a unos 20 € por cabeza. La relación calidad precio me pareció fabulosa, porque comimos bien, estuvimos muy a gusto, muy bien atendidos y, sobre todo, porque no era yo la que tenía que pagar la cuenta :)

Se trata de un restaurante que pertenece al grupo gastronómico 4vientos, que se ha instalado en el barrio abriendo varios negocios de diferentes nombres y especialidades, como son los uma crepes, montaditos, lomos y fajitas y el restaurante dadú.

Este es el restaurante más formal, y tal vez caro, claro eso depende de loq ue pidas pero yo te recomiendo que no mires el precio y pidas el entrecot de ternera de 350 gr. que ya te vale unos 15 €. A parte tienen menús ya definidos para dos personas. También organizan cenas de empresa y comidas. Tienen muy buenas esnsaladas y algo de pasta. La carta de vinos es bastante extensa y los postres son caseros, yo probé el crep de chocolate con helado de vainilla, y estaba exquisito pero me pareció un poco excesivo en el precio.

Viejo Barrio es, del pequeño cártel de restaurantes que forman 4vientos, quizá el más caro y sofisticado. Ideal para parejitas (yo fui con un amigo…).
Es un asador argentino con una decoración y una iluminación muy exquisita. Además te atienden muy bien (o quizá debido a que ese día no había mucha gente) y te aconsejan, ya que es posible que la mitad de las cosas de la carta no sepas lo que son: P
Dejadme decir rápidamente que tienen una carta de vinos que abarca varios precios, que se adapta a varios tipos de economía, vamos. Y ahora sí, pasamos a la comida, que es lo que interesa.
Si pedís sugerencia al camarero, os sugerirá, y yo creo que también lo haré, una especie de entrecot gigante (parecido al Don Solomillón que se come Homer Simpson en un capítulo) con una salsa y unas patatas fritas. El servicio fue lo suficientemente rápido como para que no perdieses la paciencia, pero lo suficiéntemente lento como para que no te diese la impresión de que no era recién hecho. Añadid unos cafés al asunto y nos costó unos 50 € (entre los dos, eh?).
Como vivencia, decir que a mi amigo se les olvidó ponerle las patatas y cuando lo comentó, le trajeron al rato un bol enorme de patatas en plan y, como mi propio amigo dijo «no vols caldo? Doncs dos tasses» (No quieres caldo? toma dos tazas). Eso sí, un poco demasiado hechas.
En fin, no está mal pero creo que por ese precio se pueden encontrar cosas mejores.

Un buen restaurante argentino. De precio desde luego, no barato (una cena de dos personas, con entrante, dos carnes, postre y vino, sobre los 65 euros, más o menos), sí ofrece unas buenas carnes, y unas raciones razonables.
Excelentes los provolones, con tomate y cebolla o al funghi porcini. Respecto a las carnes, sinceramente, cada vez que voy, me sabe mal, pedir porque siempre me quedo con la pena, de pedir sólo uno. El bifé es sabroso, pero tanto el cuadril, como el secreto, son jugosísimos.
El servicio es agradable. Gente joven, y no es que sean los más rápidos del barrio, pero no tienes que echarte una siesta entre plato y plato. las mesas, excesívamente juntas. Unos centímetros más de separación entre diferentes comensales, se agradecerían.
No es desde luego barato, pero, sales satisfecho del pago, por la calidad de la cena.