Patio de la Alameda

Últimamente frecuento este hotel por su azotea, donde hay un buen bar de copas con unas vistas muy agradables al sur y donde los atardeceres con las Columnas de la Alameda, la Torre de Don Fadrique y la Torre Sevilla (aka Torre Pelli) al fondo son realmente bonitos, especialmente en otoño.
La terraza es amplia y cabrán alrededor de 60 personas aproximadamente. Las copas están bien servidas y correctas de precio para la zona, en torno a los 7 euros de precio base. Ponen música techno y suele estar bastante ocupado debido a su excelente localización.
El hotel tiene una decoración moderna, aprovechando la arquitectura de un antiguo patio sevillano y adaptándolo a la moda actual, con detalles en las paredes, el suelo o la escalera que sube a la azotea (también hay ascensor).
Siempre que vengo suele ser con amigos y solemos echar una tarde la mar de agradable :)

Tenía ganas de ver cómo era la terraza-​bar de este hotel situado en pleno centro de la Alameda, en estas noches fresquitas de verano se agradecen lugares como éste.
Al sitio se puede acceder o bien por ascensor o por escaleras, está decorado en plan minimalista, con algunas guirnaldas de luces y una zona de mesas bajas con sofás y sillones de plástico y otra con mesas y taburetes altos.
En cuanto a las copas, pues no me fijé si tenían cócteles, pedí un gin tonic y me lo trajeron con todas las moñaditas que se llevan ahora (que si una fresita, un poco de enebro…) Los precios son como los de cualquier bar sin ofertas, dependiendo por supuesto de lo que pidas, las copas rondan los 7 € u 8 €. También tienen en carta un montón de cafés y una especie de batidos con muchos sabores por 4,50 €
El personal es agradable y el ambiente es un poco mezcla entre los propios clientes del hotel y gente totalmente ajena.

Terraza-​bar en la azotea del hotel patio de la alameda, quizá eso hace que mucha gente no lo conozca, porque creerá que no puedes entrar sino tienes habitación… Pero para nada, entrada libre, vistas inmejorables, precio de copas dentro de lo normal.

No te crees que siendo de Sevilla capital me alojara en un hotel que además esta a 10 minutos de mi casa… Pues es cierto.
Vino un amigo de Barcelona y se alojo en este hotel, tenia habitación doble y como venia solo y la habitación se la pagaba la empresa para la que el trabaja, pues me eche a la cara dura y estuve una semana alojado en el hotel completamente gratis.
Las habitaciones eran pequeños apartamentos, muy limpios y bien decorados, me gusto mucho, el servicio del hotel y las camareras de piso todos muy simpáticos. Como en la recepción trabaja un amigo mio me daba vergüenza que me viera entrar y salir y entonces lo hacia con mucho disimulo y nunca pude aprovechar y quedarme a desayunar en el pequeño bar que tenían.
El hotel tiene forma de corral de vecinos, todas las puertas de las habitaciones alrededor de un patio tradicional sevillano lleno de plantas y palmeritas, entre ellas algunas mesas con sillas para descansar y pararse a leer un rato sin tener que estar metido en la habitación.

Hace unos meses vino la familia de mi amiga a visitarla y como no cabían en su piso eligieron este hotel para quedarse ya que quedaba cerca de su casa y estaba en pleno centro.
Una noche fui con ella a recogerlos para irnos a cenar y entramos a esperarlos dentro mientras bajaban.
Pasando la recepción que es lo primero que encuentras, hay un precioso patio de estilo andaluz (que imagino que es lo que le da el nombre al lugar) que está lleno de sillas de mimbre. Me gusto muchísimo la decoración porque a veces también nos cansamos de la decoración minimalista imperante en estos días.
El chico de la recepción nos escucho y nos explicó el el hotel entero había sido reformado el año anterior.
También nos contó que su clientela va desde jóvenes que viene a determinados eventos en la cuidad (tales como conciertos, etc), hasta grupos de extranjeros más mayores que vienen a ver la cuidad.
En el rato que estuvimos allí pudimos comprobar como era verdad lo que nos había dicho ya que el trasiego era continuo y se veían gente de todas las edades y tipos.
No vi las habitaciones porque tampoco tengo confianza con la familia de mi amiga, pero ellos estaban encantados. De precio no puedo hablaros porque no me pareció correcto preguntarles, pero el sitio a mi parecer si vienes a visitar la ciudad es inmejorable, porque a pesar de estar en el centro no está en un sitio puramente turístico, y así puedes ver como vive la gente del barrio y comer a los mismos precios por los que comemos nosotros.