Últimamente he cogido yo un vicio enorme a los Frapuccinnos de chocolate blanco y aprovecho que este Starbucks me pilla al lado del trabajo para entrar y calmar aquí mis ansias. No voy a entrar a evaluar la cadena ya que todos la conocemos, sino su situación, en plena glorieta de Alonso Martínez y su local, más grande que la mayoría de Starbucks y con un saloncito al fondo en el que se puede estar más que tranquilo. Aunque, a decir verdad, mi relación con este Starbucks es como la que se tiene con un camello: llegas, te compras la droga, y te alejas lo máximo posible.
Sergio C.
Classificação do local: 3 Madrid
Lo mejor, su localización. Bien de sofás y mesas. Algunos rincones no tienen cobertura.