Hace ya un par de semanas que estuve en Plato y Placer, aprovechando una WonderBox de esas, pero la experiencia fue como para no olvidarla, así que lo tengo fresquito. Lo primero que os va a llamar la atención al entrar al local, es la pedazo de virgen o santo o cosa-religiosa-que-da-yuyu que hay en la barra. Sinceramente, me gustó el toque sacrílego; me ganaron desde el principio. Las paredes de esta primera zona de Plato y Placer están plagadas de firmas de clientes, recortes y anuncios de revistas del corazón, recuerdos de tiempos mejores, prendas del famoseo amarilloso español y demás esperpentos que, en mi opinión, conforman un collage de la muerte que no me gustó nada. Ojo, que seguro que hay a quien le guste ver la prenda con la que Rocío Jurado salió en no sé qué gala del año ochenta y pico; a mí, no. Eso sí, original como pocos; y es mucho. Prefiero ver esta clase de decoración que una cabeza de toro y un tricornio. La sala en la que comimos me gustó un poco más ya que no estaba tan recargada. Las mesas y las sillas, aunque muy chulas, no eran muy cómodas y, al no haber perchas por ninguna parte(debe ser que en el mundo del moderno las perchas son sacrilegio) las prendas largas fueron un estorbo durante toda la velada. Nos ponemos a lo güeno, a la comida: muy correcta. elementos tradicionales con presentación moderna y combinaciones fuera de lo común. Fue una grata sorpresa y lo mejor de la noche, que es lo importante a la hora de hablar de un restaurante. Especialmente reseñable fueron las bolas de risotto y el lenguado con langostinos en tempura. Eso sí, lo mejor del menú fue el postre: un coulan de chocolate sobre sopa de café, en el que si bien el coulan no estaba en su punto y se les había pasado de cocción, la sopa de café era impresionante. En cuanto a la atención, he de decir que, a pesar de ser eficiente y rápida, fue un poco seca e impersonal. Sobre todo cuando dijimos, mejor dicho, recordamos, porque ya se había comentado por teléfono a la hora de hacer la reserva, que teníamos un caja de wonderbox. En ese momento hubo un cambio, un pequeño matiz que no nos gustó mucho. De todas formas, no logró oscurecer la, por otra parte, fantástica velada que pasamos en Plato y Placer. Todo un descubrimiento.
Teddy R.
Classificação do local: 5 Chicago, IL
Excellent food. Excellent service. All around great experience. Highly recommend!
Ismael B.
Classificação do local: 4 Madrid
Este moderno y urbabita restaurante de unos 3 años de edad ofrece una comida de diseño enmarcada en un local de muy elegante decoración. Sus amplios ventanales, originales sillas y baños coloridos, al más puro estilo pop art conforman un ambiente exclusivo en una zona encantadora, junto al Viaducto. Su plantilla, encantadora, y su comida una delicia. Quizás un poco caro(como suele pasar en este tipo de sitios.) No obstante suelen sacar ofertas en Internet para que puedas disfrutar de su menú degustación a un precio muy asequible!
Carmen P.
Classificação do local: 4 Madrid
Increíble lo que ha crecido este sitio, o quizá es que lo conocí muy pronto. Pero no me sorprende la buena acogida que ha tenido este local, con un concepto de la gastronomía muy original y rico. La primera vez que fui tomé el menú degustación, fuimos un grupo de 15 personas y a todos nos encantó, además de recibir un trato muy atento en un local colorista y muy bien decorado, pero eso sí, casi vacío. Dos años después he repetido y he encontrado el mismo original estilo pero en un local lleno hasta la bandera. Como lo recordaba bueno, decidí repetir el menú degustación, que para mi sorpresa era 10 euros más caro que la primera vez; 26 euros. Afortunadamente la fama no le ha hecho perder el saber hacer las cosas bien y el menú me estuvo casi más bueno que la primera vez(no descarto el efecto placebo de saber que era más caro) Los camareros más atentos aún, hubo un fallo en la luz y nos lo vinieron a explicar 3 veces, mesa por mesa, eso o hubo tres mesas que se quedaron sin explicación. El caso es que sin ánimo de ser pesetera, lo bueno si es barato… Pero aún así sigue siendo muy recomendable, no os vayáis sin probar el gazpacho con helado de aceite de oliva!!!
Oreste
Classificação do local: 4 Sevilla
Plato y Placer es uno de esos restaurantes de aspecto moderno y de vanguardia, con una decoración muy particular(de inspiración ochentera) y platos poco habituales. Tienen un menú de degustación muy completo y a un precio aceptable. Posiblemente ese menú sea la mejor opción para comer bien sin gastarse demasiado. Hay que mencionar también que el trato es intachable y que es conveniente reservar mesa porque suele llenarse.