Este es uno de los lugares que confirman que no hay que fiarse de las rápidas y primeras impresiones. A pesar de su cartelería castiza, detrás de ese nombre español, españolísimo y de esa fachada con pinta de tasca se esconde un restaurante hindú. He tenido dos experiencias en este sitio, y la verdad, las he tenido mejores. La primera vez que fui fue a comer. Odio la comida hindú, no porque piqué ni porque tenga prejuicios, sino porque mi cuerpo desarrolló una extraña intolerancia al cilantro. Pedí expresamente que me dijeran cuáles eran los platos que NO llevaban cilantro y esos fueron los que pedí. Mi sorpresa fue mayúscula cuando los platos que llegaron estaban hasta arriba de cilantro. La segunda vez, fue hace unas semanas, me senté con una amiga en su terraza a tomar una infusión, pero cuál fue nuestra sorpresa cuando nos dijeron que no tenían. Nos sorprendió, pero seguimos nuestro camino en busca de otra terraza en la que nos sirvieran lo que queríamos.
Carlos M.
Classificação do local: 4 Madrid
Representa como ningún otro lugar el mestizaje tan característico de Lavapiés: un restaurante llamado«El Botijo» que ofrece la mejor comida india del barrio. Y eso que en el barrio de Lavapiés hay muchos restaurantes indios, la mayoría con nombres indios. Pero«El BOtijo» es un lugar especial, porque ofrece tanto currys como huevos fritos con patatas, en una perfecta fusión que se da tanto en los platos como en el encantador personal del local. Conviene tener paciencia, porque el camarero indio tiene una curiosa manía: está continuamente hablando por su teléfono móvil. De todos modos, vale la pena esperar, porque tanto los platos indios como los españoles están deliciosos, aunque yo me quedo con los primeros. El local no es muy grande, pero está bien aprovechado y resulta agradable. No obstante, como ocurre con todos los locales de esta calle, lo más codiciado es un lugar en la terraza, si está puesta y el tiempo acompaña.