La verdad es que me gusta mucho pasarme por esta tienda del rastro. Cristina la propietaria anda siempre cambiando y poniendo, y cada vez que voy encuentro cosas diferentes. Lo que más me impresiona de la tienda son sus dos carteles de comienzos de siglo… del pasado hehe. Es quizá la tienda del rastro que tiene unos precios más ajustados y más acordes con la realidad. Por suerte casi todo tiene precio puesto, y es que si hay algo que me revienta en algunas tiendas es que los precios varien de entre semana a fin de semana o entre semanas. Supongo que esto es un poco la idiosincrásia del rastro(que a mi no me gusta). Pues eso, que Crisitina, es de las que ha criado en el rastro, y sabe como funciona, y como funcionamos los que vamos a comprar, con el aliciente de que es un encanto.
Maricarmen G.
Classificação do local: 4 Madrid
«Cambalache» donde puedes encontrar de todo y a buenos precios, sobretodo esos objetos que parecen estar hechos para nosotros y que por desavenencias del universo no encontramos o «reencontramos«años después… Contamos en todo momento con el asesoramiento de su encantadora dueña: Cristina
Lolo R.
Classificação do local: 5 Madrid
Yo no puedo dejar de admitirlo: soy un hombre de estereotipos, porque siempre he pensado que la generalización, en parte, corresponde a una realidad, y lo único que hay malo en los estereotipos es creérselos de verdad o no entender que hay(muchas) excepciones que marcan la regla. Y en ese sentido, yo siempre había pensado que almonedas y tiendas de antigüedades son espacios caros. Pues no. Meeeeec. Error. Obviamente, hay antigüedades carísimas, pero es que hay muebles que han sobrevivido guerras, tiempos convulsos y tantas vicisitudes que son únicos en su especie. Que su propia vida vale más que casi la de todos los muebles que has tenido en tu casa. Y hay piezas que merece la pena tener, porque son maravillosas. Cristina dice que en su tienda, a lo que se dedica, es a quitar el polvo a las cosas. Ella no restaura más que lo imprescindible, porque de lo contrario, es como quitarle parte del alma a la pieza, y parte de razón no le falta. Pero lo mejor de Caprichos es que tiene cosas maravillosas por una cantidad irrisoria de dinero. Ayer mismo nos enseñó un juego de sillas de madera, metal y mimbre, bien bonito, que tenía por poco más de cien euros el conjunto. Es entonces cuando esa idea de que las almonedas, tiendas vintage y de antigüedades se te volatiliza en la cabeza: es el precio que, más o menos, pagas por unas sillas medianamente buenas(obviamente, no las de plástico) de la típica marca sueca que todos conocemos. Y estas, sin embargo, puede que no sean únicas en el mundo, pero sí ciertamente bastante exclusivas. Y así más con todo: precios muy ajustados, ideas de lo más interesante(nos explicó que se podía hacer con algunas de las cosas que tenía en la tienda) y un arsenal de cosas varias que dejarían con la boca abierta a más de uno.
Francisco R.
Classificação do local: 5 Madrid
Cristina ha montado con algo más que cariño –con pasión y visión de futuro– este espacio que alberga objetos de todo tipo y épocas. Dispuestos en una explosión controlada de rarezas que comparten un pasado remoto y vidas que pertenecieron a otras estancias, las piezas que selecciona, aquí aparecen y desaparecen de una semana a otra incluso de un día para el siguiente. La enorme ventaja que encuentro en Caprichos, aparte de las piezas, es que los precios son magníficos, nada de sobreprecio por ser«vintage» sino al contrario, me sorprendo cada vez que pregunto por lo que cuesta cada pieza que me interesa. Aquí no cabe buscar una unidad de estilo, esto es más bien como un desván familiar que a lo largo de generaciones ha ido atesorando cosas bonitas que van desde mediados del S XVIII hasta las últimas décadas del S XX. De aquí han salido hacia mi casa, por ejemplo: un par de tulipas de cristal de los 60, un par de candiles –uno de bronce, y otro de cerámica y metal con motivos florales que es una maravilla-, también una jarrita de cerámica de principios del XX. Para mi, Caprichos es una apuesta ganadora y si quiero regalar algo es uno de los sitios donde voy a ver qué me encuentro.