Classificação do local: 4 Manchester, United Kingdom
Hip little bar serving Vermut — vermouth on tap, which I had never seen before. It’s pretty delicious! They were also serving appetising looking sandwiches and other snacks at midnight, because Madrid is awesome.
David C.
Classificação do local: 4 Madrid
Un bar que tiene muy buen ambiente y está muy animado, con la música bajita pero suficiente para bailar un rato y poder hablar, además tiene buen gusto y te ponen buenos temas. Yo he estado solo de noche, y para tomar algo está muy bien, hay moderneo y cosas así. Las copas creo recordar que son a 7 €. La decoración es muy de abuela, mezcla entre tradicional de una bodega con un bar más actual. Hay poquita luz, que da un abiente mas de fiesta.
Paz R.
Classificação do local: 4 Madrid
De toda la vida… Bodega Lo Máximo lleva en Lavapiés desde que yo conozco Lavapiés. Ha ido adaptándose a los cambios, ajustándose para ser apta para los y las que íbamos cumpliendo años y, a la vez, para abrir sus puertas a las nuevas generaciones, adaptándose a la multiculturalidad, a la diversidad… Y, ahí, en ese altillo… esos maravillosos y disputados sillones orejeros con su transfondo que, a mí, me lleva al salón de mi casa de cuando era pequeña porque el papel de la pared es como el que había en mi casa, solo que el nuestro era verde. Y, en ese escenario. ¿Quién no se ha tomado un chupito de licor de café? ¿Quién no ha pasado horas y horas dándole a la húmeda? Hacía tiempo que no iba y este sábado tocó tomarnos una copa allí y fue un gustazo.
Aitana M.
Classificação do local: 4 Madrid
Después del boom de establecimientos retro-hipster-vintage, bares de viejos reconvertidos, pescaderías reutilizadas, etc. es normal que Lo Máximo no parezca tan original, pero el mérito se lo lleva por ser pionero en estas tendencias madrileñas y por representar muy bien el espíritu Lavapiés, en una mezcla de sillones de abuela, vermú y anuncios de conciertos. Siempre está bastante lleno, pero la comida es buena y el precio también. La última vez probamos el humus y lo cierto es que fue un triunfo. Como fallos, el principal es que, al estar tan lleno, hay que esperar mucho para ser atendido. En mi caso particular desistí y le pasé el testigo a un amigo, porque justo un grupo grande había pedido unas veinticinco cervezas y empecé a sentirme ridícula mientras miraba cómo las servían. Otra cosa es que los baños no estaban muy limpios, además de ser estrechos y de sólo haber uno por género, con lo que la espera está garantizada. De nuevo, esto se debe a la cantidad de clientes que aumenta a medida que avanza la noche y tampoco me he vuelto yo tan fina como que eso sea un inconveniente a la hora de visitar el bar, pero no me pasó desapercibido.
Javier A.
Classificação do local: 4 Madrid
Un lugar con encanto. Un buen descubrimiento entre las calles de Lavapies. Una decoración muy vintage, una música agradable y a buen volumen. Gente interesante y una carta con muchas bebidas. Un sitio recomendable para una tarde de invierno en la capital.
Elena M.
Classificação do local: 4 Madrid
Que divertido es ir a Bodegas Lo Máximo. Bar de viejos reconvertido en punto de encuentro de cañas, copazos y patatuelas. La decoración es como la de tu abuela, esa que tanto odiabas, pero que ahora es lo más. Las consumiciones son baratas y te ponen patatas y panchitos de los buenos, también tienes movidas de comer y mesas para sentarte tranquílamente. Los gintonics cuestan 6 euros. Un sitio estupendo para ir por Lavapies
Ana S.
Classificação do local: 4 Madrid
Típica taberna tradicional reconvertida en bar de copas con algo de comer. En su día debía ser un bar de viejos pero ahora, como está mandado, está llena de modernos tomando gin tonics. Pero el ambiente es muy agradable, no es un sitio de esos pretenciososcon camareros bordes y hipsters relamidos. Este sitio, como su nombre indica, es lo máximo. Tienen buenos precios, variedad de vinos, mesas para sentarse, admiten animales. ¡Ideal para tomar un vino o unas copas! Y fuera del ambiente de modernidad del Triball, da gusto.
Juan D.
Classificação do local: 3 Madrid
Paso por aquí delante todos los días camino de otro sitio, pero claro, a horas en las que no está abierto, y siempre había tenido ganas de conocerlo. Había intentado venir un par de noches anteriormente, esperando encontrarlo lleno de gente, y lo que me encontré fueron las luces apagadas y todo cerrado a cal y canto. Mi gozo en un pozo. Anoche conseguí estrenarme en él con un amigo(por muy mal que suene dicho así), y aunque me gustó bastante el ambiente, he de reseñar que me resultaba bastante incómodo que, cada vez que alguien entraba o salía a fumar, la puerta no se cerrase bien y entrase todo el frío polar del invierno madrileño, teniendo que levantarnos continuamente a desfacer dicho entuerto. El Ribera muy rico, eso sí.
Rocío G.
Classificação do local: 5 Madrid
Coger algo antiguo y customizarlo: Lo Máximo. Grata sopresa fue descubrir este sitio con ese regusto«añestizo» pero a la vez moderno. Desde el primer momento me emamoré del rincón de la tarima: esa mesa y esos sillones bajos, con esa lámpara con mesita y revistero incorporados, esa luz tenue… No podría ser más retro y más acogedor. Es como el salón de casa(de tu abuela). Cada silla de su padre y de su madre(¿cuán original es esto?, mucho, a pesar de ser bien simple), la barra de chapa, los taburetes, el espejo donde se lee«berberechos», ¡las rejas de las ventanas! En fin, tengo que darle más caña a Lavapiés… Pero el comienzo del idilio tuvo lugar aquí.
Zonia Z.
Classificação do local: 4 Madrid
Bueno a ver empezemos, este fue uno de los lugares de la ruta Tapapies y bueno era la oportunidad de visitar bares que haz querido ir pero por una u otra razon no llegas alli. Y bueno esta vez llegamos, nos perdimos un poquito pero valio la pena. Cuando entramos pareceria que estabamos entrando a otra era… nose! habia una cancion muy asi yanqui .nose era en ingles y como que me traslade a otra epoca, elbar estaba medio vacio asi como tipo peli del medio oeste y dos o tres gatos(gente) alli conversando… nos sentamos y pedimos la tapa mas dos cañas y bueno simplemente nose me senti super chill y relax estando en ese lugar que para nada es pretencioso… es todo lo contrario. La tapa estaba lo maximo! era chili de carne .muy bueno. Regresare y espero sentarme en ese sofa por los que otros pelean jajajja
Marcos M.
Classificação do local: 4 Madrid
La de buenos momentos que he vivido en este sitio, la de buenos momentos que viviré
Ana L.
Classificação do local: 4 Madrid
¿Una bodega con barra de chapa que no tiene una capa grasienta de dos centímetros? ¿Cómo es posible? Llamadme prejuiciosa, pero estuve a punto de no entrar, pensé: «Otro bar de modernitos en el barrio». Menos mal que no cometí este tremendo error, porque me di cuenta de que era posible, muy posible mezclar un ambiente moderno, cálido y ténue con el sabor más castizo que aún conserva este local. ¡Qué gustazo!
Lolo R.
Classificação do local: 5 Madrid
Esta bodega hace honor a su nombre, porque ciertamente es lo máximo. Situada en la esquina de la Calle de San Carlos con la Calle de Olivar, es fácil que pase desapercibida si no la conoces, debido a su aspecto antiguo, que muchos asociarían con el de una taberna de las rancias. Y es que es uno de esos lugares con solera, aunque ahora mismo es de las cosas más modernas que te puedes encontrar por Madrid. Según entras, al fondo, verás una mesita y unos sillones orejeros colocados en lo alto, como si estuvieran en un escenario. Esta es probablemente la posición más disputada del local, y se han visto auténticas luchas por conseguir sentarse ahí una tarde cualquiera. Lo bueno es que cuando eres tú el que está sentado, te sientes como el rey del mundo. Lo Máximo sabe que sus clientes se acercan a la bodega por dos motivos: el primero es que quieren hablar, y por eso la música no está a niveles estridentes, sino que es simplemente música de fondo. El segundo es que quieren beber, y para ello tienen una buena selección de vinos y cerveza, pero también alcohol por si te apetece una copichuela. Hay que tener en cuenta, de todos modos, que el mejor momento para visitar este lugar es de domingo a miércoles, a ser posible por la tarde. De lo contrario, siempre estará muy lleno, casi no habrá «lavapiesenses» y el sitio te parecerá menos encantador de lo que realmente es.
Antonio J L.
Classificação do local: 5 Granada
Aquí un día nos dejaron que abriésemos nuestra propia botella de vino que traíamos de fuera, sin ponernos ninguna pega, no se si estarían de buenas o seria las copas que ya habíamos pedido, pues como que vieron que después de la botella de vino seguramente seguiríamos pidiendo. Y así fue… Acompañados de música de saxo bajita y una iluminación acorde a todo el bar de estilo retro, fuimos dando buena cuenta de nuestras bebidas mientras podíamos mantener una conversacion(Los que habían bebido mas no tanto) sin tener que gritarnos los unos a los otros. Un local sin duda digno de visitar, y es que así debería estar siempre la música de todos los locales como esté, a un nivel que te deja mantener una conversacion sin acabar con problemas agudos en las cuerdas vocales, lo cual hace que luego solo puedas hablar en graves al día siguiente.
Ismael B.
Classificação do local: 4 Madrid
Estas bodegas llevan tanto tiempo observando la gente pasar por la calle Olivar que ya nadie recuerda que había antes de las bodegas Lo Máximo… No obstante este bar ha sabido adaptarse a los nuevos tiempo mejor que nadie, eso o se han aprovechado del resurgir de las modas pasadas, pues su decoración setentera actual está totalmente a la moda, en pleno 2011! Su tenue iluminación, música de saxo, cuadros y lámparas antiguas, taburetes desiguales y sillas de madera conforman un espacio ampliamente confortable y familiar, reforzando día tras díà la idea de bar de siempre y bar de referencia de lavapiés. Como recomendación intenta evitar este bar en momentos de excesiva afluencia… El bar te gustará muchísimo más si lo conoces por ejemplo un domingo por la tarde/noche.
Alberto P.
Classificação do local: 5 Madrid
Aquí encontrarás a los Ángeles de Charly de Lavapiés. ¿Dónde? Según entras a la izquierda verás a alguna de las tres socias de este bar que ha sabido mezclar la modernidad con el casticismo de Madrid. No llevan esos cardados imposibles como los que gastaba Farrah Fawcett, pero son igual de modernas que ellas en su época. ¿Y qué hace especial a lo Máximo?(además de la agencia de detectives encubierta). No es la comida casera que está muy buena, podría hacer el chiste fácil y decirte cómo cocinan. No es su patata rellena de queso ni su chile con carne. Tampoco es la música, suena bajita y no es dominante en la escena, la gente no va a lo máximo a escucharla. Dímelo ya, pesado. Pues sin duda es la luz y los toques retros. Ese tono rojizo de las lámparas de la barra, el cristal de la pared que ha conservado las tapas que se servían en el antiguo local, los sillones orejeros con la mesita de noche al fondo del local en un nivel más elevado que el resto. Si entras por primera vez empezarás a mirarlo todo como un giroscopio. Al rato estarás integrado, te sentarás en una de sus rojos taburetes de la barra e imitarás al resto del local. Hablar y pasar un rato agradable