La Vendetta

muy buen lugar para ir a cenar, ademas de disfrutar de un buen trago, la parte de arriba es muy buena, buen clima, bien ambientado, por lo general en dias de semana no hay mucha gente asi que muy recomendable para poder charlar y sentarse tranquilo

Es «El lugar», por atención, variedad, calidad y sobre todo sencillez, a la hora de hacerte sentir como en casa. Además del after Office que son geniales.

La Vendetta es un clásico de la ciudad. Especialmente si estamos buscando pasarla bien con amigos, pareja, familia, etcétera. Tiene varias sucursales distribuidas por Rosario y también cuentan con servicio de Delivery, pero prefiero venir acá.
En la esquina de Presidente Roca y Tucumán la Vendetta tiene la sucursal más grande de todas. La estructura del local tiene dos pisos y una gran cantidad de mesas y sillas. Aire acondicionado, calefacción, televisores, y hasta un sector de juegos para niños.
Es el lugar ideal para venir a ver un partido de fútbol con amigos, para venir a festejar el cumpleaños de una amiga, alguna graduación media informal, o simplemente venir a comer rico y pasarla bien.
La especialidad de La Vendetta son las pizzas. Son terriblemente exquisitas. Una vez que las pruebes seguramente que querrás volver.
También tienen otros platos en el menú, pero sólo he probado –aparte de las pizzas– las rabas. Y también estaban increíbles.
Los precios son accesibles, y más si venimos en grupos. Las porciones son grandes y los platos –especialmente las pizzas– rinden bien.

Las mejores pizzas de la ciudad desde que yo tengo uso de razón (del centro, porque la Santa María es un tema aparte) son siempre de la Vendetta, según ellos mismos: la venganza del sabor. En sus muchas sucursales hay detalles, pero la de calle Tucumán es un mundo aparte, por lo pensado de su decoración y exhibición en el ventanal que siempre va cambiando
Es una esquina más de barrio, aunque por calle Tucumán hay varios bares, distanciados por una o dos cuadras. La pizzería tiene dos pisos y es bastante grande. Ideal para ver partidos de Argentina, NOB o Central con un grupo de amigos. Tiene mesas afuera, pero como está en la curva donde no se estaciona suele tener transito que no permite mucho la desconexión y el relax.
El servicio es relativamente bueno. Aunque depende la hora, hemos llegado a cenar tarde después de alguna obra de teatro y la cara de la moza se desplomó al ver que íbamos cayendo y eramos unas diez personas. El ideal es pizza y porrón aunque hay otras opciones en el menú. Por calle Roca está el delivery pero si sos del barrio siempre te conviene pasarlo a buscar.

Este es otro de los bolichitos que frecuento bastante. Por qué? Porque la comida es buena, la atención también, y además tienen un sector de juegos para niños que suelo aprovechar para poder comer dos bocados seguidos sin que mi hija me interrumpa. En la parte de abajo, –por lo general y para mi gusto-​, siempre hay bastante gente. Sin embargo, arriba el ambiente es mucho más tranquilo, con buen aire acondicionado, (fundamental en verano), y hasta tienen unos plasmas grandes, (dato importante para aquellos que no se quieren perder ningún partido de fútbol).
Con respecto a la carta, la pizza es la especialidad de la casa, pero también ofrecen minutas y otro tipo de platos muy buenos. (mi clásico acá son las rabas… Mmmmmm)
Un gran descubrimiento de este verano fue el patio abierto que inauguraron hace poco, y que particularmente me encanta. Tiene un ambiente muy relajado, una pequeña barra y poquitas mesas, donde el mismo barman te atiende, te prepara los tragos y te musicaliza. (si hay poca gente esto es casi a pedido de cada mesa.
Nosotros hemos llegado a escuchar el hit del sapo Pepe… y bue… sabrán entender. Los precios son razonables, se puede ir con tranquilidad, sin dejar un ojo de la cara.