Picapedro

Las pizzas están muy bien. Gran variedad y muy ricas. La gente que te atiende es buena onda. El lugar deja mucho que dejar en cuanto a la presentación. Los baños son lo peor, impresentables. Aprueba por el sabor y la cerveza helada.

Muy sabrosas pizzas. Excelente atención en la sección restaurante parrilla muy variado. Sobresale con la familiaridad que te reciben. Es como mes tar en tu hogar.

Muy rica comida. Todas las semanas vamos en familia y comemos cosas ricas y a un precio bastante bueno. Podes comer afuera o sino adentro.

En una esquina relativamente importante de la zona, en Sabattini y Sargento Cabral, lo primero que llama la atención de PicaPedro es lo ecléctico de su imagen exterior. El frente está dividido en tercios masomenos, en el primero la temática es ALUMINIO, grandes ventanales (o portales?) de aluminio, con el logo arenado MUY DELICADOS, que dejan ver mucho el luminoso interior.
En el segundo, el theme es «casita de heidi» al estilo alpino, mucho pared de tronco lustrado y techito a dos aguas con tejas en el recibidor.
El tercero, la piece de resistànce el tema es Feng Shui. Un triangulito de césped con UN PINO y una CASCADA de piedras lajas quesunacosa de locos.
Lo segundo que llama la atención es lo mala que es la pizza para un lugar que se autodenomina pizzería, me da toda la impresión de estar hecha con prepizza de supermercado, bastante pobre en salsa, en queso y en el resto de los ingredientes.
Ya a esta altura, no llama la atención que usen adentro mesas y sillas de exteriores, las clásicas de lona de Quilmes con sus mesitas de caño y plástico haciendo juego.
Complicado estacionar por la zona, pero la verdad mucho no vale la pena tampoco.