El Carro de Mario

Un lugar familiar, tranquilo y excelente para comer algo rápido. El menú no es para nada extenso, es conciso pero muy bueno. Minutos, hamburguesas y mis preferidas, las rabas! A animarse y pedirlas con papas!

Si tenés ganas de comer rabas ricas, andá al carro de Mario. Si bien los lomitos son buenazos, las rabas son la especialidad de la casa.
Atendido por la familia, es un lugar tranquilo en donde se come rico. Bueno, la verdad que después de ir toda la vida, no recuerdo haber pedido otra cosa que no sean rabas y lomitos… lo que seguro que no hay es parrilla, leí otras reviews que no se a qué carro fueron!
Lo único que los precios suelen estar sobre la par, siempre un poco más arriba que otros lugares con ofertas similares.

Este es uno de los lugares de comida más tipo del norte de la ciudad. Lo que lo caracteriza son los años que llevan dedicados a preparar uno de los mejores lomitos y las riquísimas pizzas. No solamente por su inigualable sabor sino también porque la comida es muy abundante. El lomito equivale a dos de los que sirven en cualquier otro lugar.
Creería que los clientes más asiduos son los grupos de amigos que van ahí después de jugar un partido de fútbol o de juntarse a hacer una tocata. A lo que voy es que, siempre que paso puedo ver los grupos grandes de chicos vestidos con ropa deportiva y disfrutando de los manjares (porque aunque la comida es simple, es una delicia) del lugar, acompañados de coca y cerveza.
En la puerta del negocio hay unas sillas y unas mesitas que invitan a sentarse, sobre todo en esta época el año donde empiezan las noches ideales para tomar una cervecita con amigos.
Otro de los puntos a destacar son los buenos precios del lugar. Y un dato a tener en cuenta, los fines de semana, hay que ir muy temprano porque se llena de gente muy rápido y no hay lugar.

El carro de Mario lleva mucho muchos años en la zona, fue una de las primeras parrilladas lomiterias en la zona norte, Arguello.
Antes estaba en una esquina de ladrillos y al cambiarse no dejaron de lado la calidad de su comida, es excelente, los lomitos son únicos, están abiertos hasta tarde por lo que se puede tranquilamente hacer una previa antes de salir.
La atención es muy buena, clásica de mozos de muchos años, y te ayudan a elegir, si vas a salir pediré un lomito si tenes tiempo pedirte la parrillada porque es bastante abundante y las papas a caballo son riquísimas.
Seria un lugar promedio en atención, calidad y cantidad sino fuera por el sabor especial de los lomitos.
La zona es cómoda para estacionar, cerca esta el CPC y la Shell y siempre hay algún naranjito tratando de birlarte unos pesos, más allá de eso es súper recomendable.

El carro de Mario, si queres comer unos buenos lomos, veni al carro de Mario, porque los preparan súper druper ricos, si, así como suena, súper druper. Desde el corte de carne que utilizan, hasta el tomate que le ponen son deliciosos, una exquisitez, tal vez no sean los mejores lomos que he probado, pero por poco y quedan en primer lugar o por lo menos a la par. El carro de Mario no solo se dedica a la venta de lomos obviamente, en su amplio menú, nos ofrecen una gran variedad de platos para elegir, como ser pizzas, empanadas, hamburguesas o la clásica parrillada de don Mario que es un manjar también, no pueden dejar de probarla. En cuanto a precios… normales, dentro de todo, para la calidad que nos ofrecen creo que está bastante bien, tal vez un poquito más elevado que en otros lugares, pero personalmente pagaría esa mínima diferencia solo por probar esos riquísimos lomos, además la atención es bastante buena por lo que te da ganas de volver. Las mozas siempre atentas, nunca te dejan esperando más tiempo necesario y siempre pendiente por si necesitas algo más luego de realizar tú pedido, bastante linda la atención.

El carro de Mario me hace acordar a mi niñez. Si, desde que tengo uso de memoria que El carro de Mario estuvo ahí, es más tengo historias de mis padres contando como de novios iban a comer a este lugar.
Y que quieren que les diga, a mí me encanta. Y a quien no le gusta ir a comer de una buena parrilla recomendada por tantos años de trayectoria. Todo lo que hacen lo hacen bien.
Su principal comida son los lomos y las parrillas (recomendadisimos los dos!!!) pero recuerdo esas madrugadas luego de salir de bailar cuando íbamos a comprar las papas! Por Dios, las papas del carro de Mario son las mejores.
El lugar es precioso, la ubicación ya es buena, no es en pleno cerro si no casi llegando, por lo cual es mucho más tranquilo. Mesitas y sillas de madera al mejor estilo parrillero en el salón de dentro, y fuera un gran patio al frente con un montón de mesas también.
La atención es muy buena, los mozos siempre atentos y rápidos. Tambien tiene delivery para la zona.

Este negocio estaba antes en una esquina, en un local más grande, y luego se mudó a donde está ahora, que es un lugar mediano, pero bien armado.
Por dentro, la decoración no se destaca, pero es cálida. Tiene unas mesas, una barra, y los baños.
En tanto afuera, hay una galería amplia a donde entra también una importante cantidad de mesas, ideal para un día de verano.
En cuanto a la comida, hacen lomos, pizzas, hamburguesas, milanesas y rabas, siempre acompañadas de unas papas o ensalada.
Yo probé el lomo que está muy bueno, la carne es muy tierna, y la milanesa que también es muy rica. La única crítica que tengo para hacer es que las papas fritas me parecieron muy grasosas, como si se hubieran hecho con aceite usado.
La atención es buena, las mozas son amables y están siempre atentas a que no falte nada.
Respecto al baño, no son muy lindos pero se mantienen limpios.