Toni

Va mucha gente tanto del hospital como de las oficinas de corts valencianes. sitio perfecto para el almuerzo o el aperitivo. Las combinaciones de los bocatas son infinitas… siempre hay gente, y con terraza exterior

Este local es una de las alternativas más interesantes a tener en cuenta a la hora de almorzar o comer de menú en la zona cercana al hospital Arnau de Vilanova. Tienen una terraza cerrada con carpa para los fumadores. Lo cual les viene muy bien cuando empieza el frio. En el interior, aunque parezca pequeño tiene varias salas que se van metiendo y es mucho más amplio de lo que parece. Eso sí, la última sala no tiene ventanas, pero está más o menos bien ventilada. Abstenerse claustrofóbicos.
El menú diario es de comida casera con 4 – 5 platos de primero y otros tantos de segundo. Nada que destacar. Menús que puedes encontrar en cualquier restaurante de comidas caseras y sencillas. Parece más bien sacado de un Polígono Industrial. El servicio es uno de los más rápidos que he visto. Si vas con prisa te vendrá muy bien. Además el coste es parejo al de todos los cercanos (alrededor de 3,5 €). Los almuerzos también se sirven rápidos y están bien. De tamaño estándar y destacar el bocadillo de «pide que te lo pongo». De verdad. Te lo preparan en nada.
Durante más de dos años fue uno de los bares a los que iba diariamente para el sagrado almuerzo. Lo recuerdo con un cariño especial. Acabas asociando el almuerzo y un local determinado con la compañía y los agradables momentos que pasas hablando de futbol, política, mujeres, vacaciones, locales de moda, y un largo etcétera.
Destacar el servicio de nuevo. He comentado ya varias veces que son rápidos. Pero es verdad, lo son. Tengo una anécdota del camarero que teníamos asignado (creo que se llama Juan, pero de verdad que lo mío con los nombres me empieza a preocupar). Si, si, al final tienes tu propio camarero. Cuando te encuentras un profesional como este, la verdad es que disfrutas. Y es que Juan es un profesional como la copa de un pino. Un día no sabía que pedirme en el bocata ese especial que os he comentado antes. Como tarde más de 3 segundos en elegir (no te daba más margen) me comento… ¿me dejas que elija por ti… espectacular, obviamente sabia ya cuáles eran mis gustos y desde entonces se convirtió en mi almuerzo de los viernes. Así que los viernes conforme entraba por la puerta solo tenía que guiñarle el ojo, y el ya venía con mi bocata de lomo, pimiento y huevo frito.

Durante varios años trabajé muy cerca de este bar. El primer día que entré me llevó hasta allí el tabaquismo. Estaba en el trabajo y me quedé sin cigarros y salí en busca del vicio. Era la hora de comer y entré a aquel bar que estaba a tope de gente. Compré mi tabaco y salí pensando lo deben de hacer bien porque al lado hay otro bar que está vacio y el hospital Arnau de Vilanova que está enfrente debe tener cafetería, si algún día me tengo que quedar a comer en el trabajo me vendré aquí.
Y ese día llegó y resultó ser justo lo que me había imaginado tampoco es un lugar para las sorpresas. Es un restaurante de menú de mediodía de batalla como trasladado de un polígono industrial. Comida espartana pero casera, servicio muy rápido y muy barato. Si estás por la zona y quieres comer bien sin gastarte mucho dinero es un buen sitio.