Desde siempre he tenido predilección por el maravilloso aroma que desprende cualquier tipo de madera. Especialmente si este olor proviene de maderas antigüas o que han sido tratadas con barnices. De hecho a veces no se si es el olor del barniz o de la manera misma el que me atrae más. Aquí compré un pequeño banco que utilizo para alcanzar mejor la comida que pongo en los estantes de la cocina. No es que sea corto de estatura, pero creo que ha todos nos ha pasado que, algún producto que hemos comprado, a veces creemos que ya nos lo hemos comido o que mágicamente ha desparecido, cuando en realidad está ahí atrás, muy lejos de nuestra vista y nuestras manos. Yo he dado por perdidas docenas de cosas pensando que ya no están ahí o hasta que me las he comido. Cuando en realidad esto no es cierto. A veces creo que esto sucede porque todos tenemos una perspectiva diferente de la realidad. En esta casa de la madera se pueden encontrar también muebles de pino y unos bellísmos juguetes para niños(con la posmodernidad estos juguetes se venden menos ante el avance de las consolas de vídeo) pero al parecer todavía tienen un nicho de gente que los compro porque, si no ya, ya hasta los habrían dejado de hacer. Otro artículo que me llamó la atención es una bola de madera que se utiliza para dar masajes. Si no tienes quién te los haga, te los puedes dar tú mismo en la comidad de tu casa; el producto es bastante económico(unos tres euros) y me decíà la dueña que es maravilloso para los pequeños achaques que algunos de nosotros tenemos en la espalda.
Ramón A.
Classificação do local: 4 Valencia
Todas las mañanas los dueños de esta tienda sacan una selección de sus artículos a la calle y a las 14 h los vuelven a meter; la misma acción se repite por la tarde y noche. Así, lleva haciéndose desde siempre, y así debería seguir. Simplemente porque esta bonita tienda de artículos de madera, artesanales, o sea de los buenos, tiene mucha historia sobre sus hombros, historia de trabajo, esfuerzo y constancia. Invito a todo aquel que quiera, a adentrarse en su mundo y descubrir millones de formas, desde sillas hasta un sencillo palo para amasar, pasando por mecedoras o preciosos juguetes de antaño. Con mi pareja suelo ir de vez en cuando, nos gusta el olor de la madera y la atmósfera que se respira en este tipo de tiendecitas laberínticas.
Rodrigo M.
Classificação do local: 5 Valencia
Ubicada en la que se conoce popularmente por la calle de las cestas, La Casa de la Madera es una tienda que me fascina. Definir a qué se dedica es innecesario: tan sólo cabe atender a la denominación del comercio. Son su estilo y su empeño por mantener vivo el trabajo totalmente artesano de la madera para la construcción de todo tipo de muebles, juguetes y elementos decorativos los que lo convierten en un establecimiento con un encanto infinito. Al igual que muchos otros comercios de la zona, es un canto al valor de la tradición y el diseño clásico, a la vez que también a la calidad, que es máxima en todos sus productos. Venden fundamentalmente casi cualquier clase de mobiliario para el hogar, en diferentes colores, de forma que se pueda adaptar a numerosos gustos. Mi predilección, en cambio, son los juguetes infantiles. Hace unos meses me compré un pequeño camión, que me pareció una delicia, no me avergüenza reconocerlo. Me parece que merece realmente la pena echar un vistazo al amplio catálogo de creaciones para niños con el que cuentan, sobre todo, de cara a la Navidad. Todos tienen una gran valía, si no por su limpio y cuidado acabado, porque muchos son educativos, perfectos para tratar de combatir la plaga de los escasamente edificantes juegos actuales.