Me gusta mucho las papelerías, desde pequeño me encantaba empezar el colegio para empezar con todo el material nuevo, me gustaba empezar las libretas desde el principio, después poco a poco escribía peor, pero el comenzar siempre me encantaba. Esta papelería tiene un estilismo clásico, fue en el primer sitio que vi los Bustos neoclásicos imitados de piedra, y los tinteros con plumas, mas bien decorativos. La librería tiene muchos objetos de escritorio decorativos. Además de hacer publicaciones limitadas artesanales muy bonitas y bien ejecutadas, también venden muchos productos de papelería artesanales, por ejemplo diferentes tipos de papeles, que fabrican ellos mismos. Tienen una gran multitud de papeles variados y bastante diferentes, para forrar, escribir o decorar. También tienen todo tipo de material de papelería y algún que otro recuerdo para los extranjeros porque es una zona muy turística y muy de paso del turismo en Sevilla.
Felipe r.
Classificação do local: 4 Sevilla
Antes que en la calle Zaragoza abriera la tienda Maspapeles y pusiera de moda lo cursi en papeles de regalos y libretas tuneadas ya estaban ellos allí, y casi desconocidos. Una tienda que solo he visto entrar a extranjeros, en verdad ves la tienda y de la forma que esta dispuesta te parece que no estas en Sevilla sino en Londres y que va a entrar Virginia Woolf a comprar papel para seguir escribiendo. Es preciosa, esta súper bien decorada con cosas que a la vez vende, como la dependienta pasa muchas horas dentro de ella la tiene decorada que parece el salón de una casa de señora mayor lo que hace que la tienda te parezca especial. También vende reproducciones en mármol de obras griegas e italianas, obras clásicas, claro. Estas pequeñas esculturas son de mármol o marmolina, se pusieron de moda en París al final del siglo XIX y ellos la siguen vendiendo. De la tienda me gusta hasta el nombre, si no sabes quien era Fernan Caballero escribelo en Google y alucinaras, era una mujer y además sevillana. Se recomienda entrar y ver todo lo que tienen en papeles pintados para escribir dedicatorias, libretas, sobres, papeles de regalos, estilográficas, tinteros y un millón de cosas todas bonitas, además la dependienta-dueña es un encanto.