El Palacio de la Fruta

Ayer por la mañana, me pasé por esta frutería para comprar manzanas. Había pasado unas pocas de veces por aquí, y todavía no había entrado y ayer me decidí y fui a hacer mis recados allí.
Pero vamos… que si lo llego a saber no voy… Ahora me arrepiento de haber comprado allí, pero bueno así ya sé que no tengo que ir más!
Es una frutería muy pequeñita, muy típica de barrio. El dueño trabaja sólo y nunca suele haber mucha gente dentro. Lo que me parece que ahora sé por qué… Y no es porque el dueño sea antipático ni nada… sino todo lo contrario. Es agradable y tiene un buen trato con su clientela. El problema es que compré dos kilos de manzanas, que se veían con muy buena pinta… y me cobró 3 euros! En la vida había pagado tanto por dos kilos de manzanas… me quedé muerta… Pero lo peor estaba por llegar: Al llegar a mi casa saqué las dichosas manzanitas «de oro» de la bolsa y al tocarlas estaban algunas blanduchas! No me lo podía creer! con la pinta que tenían allí puestas en la frutería…
Ahora sé que no es la frutería adecuada a la que debo ir, al menos, a por manzanas… :P