El Cateto

Estupendo el pavía de bacalao, magnífico el mantecaito (bocadillo de solomillo con salsa y patatas [la carne se deshace en la boca]), buenas ensaladilla y carrillada. Su tapa estrella: Los caracoles. Muy recomendable para el tapeo.

No sólo de caracoles vive el hombre.
También es un sítio para disfrutar el solecito matinal que da en sus mesas de fuera como en ningún otro sitio de la calle, tomando sus buenísimas tostadas de jamón y aceite. Mi desayuno obligatorio de los domingos!

Solo voy a valorar este sitio por sus caracoles.
Muchos lo consideran uno de los mejores sitios para comer caracoles en Sevilla. Yo no coincido con esa opinión, ya que eran bastante pequeños y estaban algo secos. Eso sí, de sabor sí están bastante buenos, picantones. Por supuesto, pedid un vasito de caldo que puede ser de lo mejor.

#LunesDeReseña
Vuelve el mes de abril, vuelve la época de caracoles. Y cuando llega este momento, El Cateto se convierte en uno de los bares de referencia en Sevilla, tanto para probar esta especialidad in situ como para llevarte una buena tarrina a casa.
Y es que, como digo, el bar El Cateto se ha ganado a pulso un puesto entre los mejores establecimientos de la ciudad a la hora de disfrutar tanto de caracoles como de cabrillas, si bien los primeros, por ser un producto de temporada, lo hacen quizás incluso más famoso.
Eso sí, no hay que confundirse pensando que es lo único bueno que encontraremos aquí. El pescaíto frito también suele venir bien servido y tienen un pequeño surtido de tapas caseras que no están nada mal. Aunque también hay que decirlo… si no fuera por los caracoles sería un bar más de los muchos en la media de Sevilla: aceptables y bien de precio.
Mencionar también que el establecimiento, aunque es pequeño, tiene mesas en velador, que suelen ser las más solicitadas sobre todo con el buen tiempo. La atención es buena y el servicio, normalmente, rápido. Eso sí, si vienes en coche ve armándote de paciencia para aparcar, o tendrás que optar por la alternativa de muchos: segunda fila y mucho ojo por si molesta.

El Cateto no es sólo un bar para tomar caracoles cuando llega la temporada. Es el bar.
Tras un arduo estudio realizado por un grupo de amigos muy caracoleros y estudiosos apócrifos del tema, en el que analizaron los establecimientos más emblemáticos de Sevilla en el buen arte del caracolear, llegaron a la conclusión de que la combinación que ofrece El Cateto de buenos, buenísimos caracoles, más cerveza bien tirada, más placer primaveral sentado en la terraza, era más que perfecta para otorgarle tan alta distinción.
Hay muchos otros bares que te ponen muy buenos caracoles. Y cada barrio, tiene el suyo. Y dentro de cada barrio, cada calle. Y cada sevillano tiene, porque sí, su bar preferido para los caracoles. Mi paladar, los buenos ratos que yo he echado allí, mi porque sí, se queda con el Cateto.
Otro día, hablaremos de las cabrillas.

Cuando llega la temporada de caracoles, es uno de esos bares sevillanos que no dudo en visitar. Durante el resto del año me parece un bar bastante normalito.
Sea la época que sea, siempre hay gente sentada en la terraza. Tiene una gran variedad de tapas, pero su especialidad en caracoles y cabrillas es lo que le hace especial. Cuando llega la primavera y el buen tiempo a Sevilla se hace casi imposible coger mesa, pero vale la pena esperar. Otro problema: es una zona un poco difícil para aparcar pero con un poco de paciencia se consigue sitio.
Ya estoy deseando que llegue la temporada de caracoles para disfrutar una buena tapita de caracoles acompañado de un apetitoso plato de tomate aliñado. ¡La combinación perfecta!

Sin lugar a dudas, uno de los mejores bares sevillanos para comer las tradicionales tapas de caracoles y cabrillas en primavera.
Durante más de 40 años, este pequeño local familiar y su terraza alegran todos los días la calle Sinaí, así como los paladares de vecinos y turistas. Es tal el éxito, que ya han abierto otros locales en el parque Alcosa y Luis Montoto.
Sin embargo, es este primer local, que ha pasado de generación en generación, el más conocido en Sevilla. Bastante recomendable también por las costillas al horno, el «pescaíto» frito y los guisos caseros a unos precios bastante módicos.
Cabe recordar que la temporada de caracoles es de mayo a julio, principalmente, mientras las cabrillas en salsa se mantienen en la carta del Cateto durante todo el año.
Un consejo: Aunque el servicio es por lo general rápido, paciencia con las mesas en temporada alta, sobre todo a medio día y en la noche. La espera merece la pena!