Casa Ruiz

Casa Ruíz se ha convertido indiscutiblemente en mi bar de cabecera y a veces me da hasta miedo aparecer por allí y casi sin haberme sentado en la mesa, Manolo, uno de sus camareros, nos haya puesto ya encima de esta lo que solemos pedir. Nos conocen demasiado bien y el trato es agradable y familiar.
Este sitio bien podría ser la típica y rancia taberna sevillana, tanto en apariencia como en forma, conserva casi la misma esencia desde que fue abierta por el padre de quién ahora la regenta, alguna mejora, un pequeño y casi inapreciable lavado de cara, pero la misma idea que atrapó a millones de clientes, el ibérico de calidad.
Su carta no es muy extensa, tampoco muy complicada (hay que tener en cuenta que hasta hace poco ni siquiera tenían cocina), se nutre de montaditos de prácticamente lo que quieras, conservas de calidad, guisos caseros y por supuesto todo lo que tenga que ver con el cerdo. Aunque bien es cierto que es mejor preguntar pues siempre tienen cosas fuera de carta.
No puedes venir aquí y no pedirte un buen plato de jamón, porque es maravilloso, o de lomo, o simplemente su salchichón en taquitos, porque os aseguro que no probaréis otro mejor aunque lo busquéis, se deshace en la boca… Su espectacular queso de oveja, o un montadito de melva canutera con pimientos del piquillo, u otro de lomo en manteca, o de prueba de matanza ibérica… las combinaciones son infinitas, pero como veis, aquí lo verde brilla por su ausencia, y a veces se hecha de menos.
Todo esto además acompañado con un buen vino y por supuesto con una de sus famosas aceitunas manzanilla, casi más buenas que el jamón, adictivas.
Tienen también gran variedad en ginebras y demás bebidas espirituosas y si me apuráis hasta algo de postre, pero aquí no os calentéis mucho la cabeza, aquí se viene a lo que se viene, a comer jamón, y jamón del bueno, jamones que ellos mismos crían y curan consiguiendo de esa manera un producto de calidad.

Que suerte tener Casa Ruiz al lado de mi trabajo.
Lo descubrí un día mentre que buscaba un sito para tapear con mis amigos, y en verdad hemos tenido suerte porque creo que he comido unos de los mejor jamón de mi vida así como la presa y el secreto. Desde el dia no puedo pasar adelante sin pararme.
Y mas el dueño del local así como todos lo que trabajan son personas muy gentil y siempre mirando la satisfacción de los clientes. Casi me siento en mi casa. Si mas os gusta el vino, hay solo que elegir, todos muy buenos.
Che fortuna avere Casa Ruiz al lato del mio ufficio.
L’ho scoperto per caso mentre che cercavo un posto per tapeare con i miei amici, e realmente abbiamo avuto fortuna perche’ credo di aver mangiato uno dei migliori prosciutti. Anche la presa e il secreto sono deliziosi. Dal giorno non posso passare di fronte senza fermarmi.
Il proprietario del locale cosi’ come tutti quelli che ci lavorano sono persone molto gentili e sempre guardano la soddisfazione del cliente. quasi mi sento a casa. Se poi vi piace il vino avete solo da scegliere. Tutto molto buono.

Tradición de Sevilla. Pocos sitios como este para degustar jamón y otras delicatessen ibéricas. No es barato, pero la calidad es muy buena. Guisos caseros, quesos, etc. Ojo al salchichón ibérico en taquitos. Amplia carta de vinos y licores.

Es casi tradicional que, de vez en cuando, después de casi cuatro horas de AVE Zaragoza-​Sevilla, mis padres me ofrezcan ir a tomar algo a Casa Ruiz.
Pocas tapas calientes en carta y mucha chacina pero… qué chacina.
Los taquitos de salchichón están para comerse un plato entero y el jamón…
Los camareros son muy atentos y se preocupan constantemente de que no falte nada.
Seguiré viniendo porque cada vez que voy me gusta más este sitio.

Un bar «típico» o «tradicional», con un buen surtido de montaditos (¡atención a los quesos!) y buenos guisos, como la carrillada, que gana mucho acompañada de un buen vermú de la casa.

Este es un bar de los de toda la vida. Ya lo han comentado otros, uno de sus fuertes son los desayunos. Yo voy a hablar de otros aspectos. Cuentan con tres establecimientos en Sevilla –hasta donde yo sé– pero este fue el primero en abrir hace ya un porrón de años. Más de treinta seguro. Tienen otro en la plaza Ruiz de Alda y otro en la calle Francos. El ambiente no es de los que invita a entrar, al menos a los que somos o nos consideramos jóvenes, porque es un sitio que oscila entre el bar de barrio y el rancio señorío.
Pero os invito a olvidar los prejuicios. ¿Os gusta el jamón y la chacina? ¿El lomo en manteca y los productos ibéricos? ¿La torta del casar? ¿La melva canutera con tomate? ¿Anchoas del cantábrico del tamaño del bigote de Nietzsche? ¿Montaditos de presa ibérica con su poquito de tocino por lo alto? Si es que sí, ya estáis tardando en visitarlos. Todos estos productos son de primerísima categoría y desde luego yo en mi vida he probado jamón como el de Ruiz. Y no es sólo que sea extraordinario, es que estos tíos son unos virtuosos del corte. Y con la de jamón que cortan, este está siempre está jugoso, con esa pátina de grasilla brillante y ese tocinito entreverado. Un espectáculo.
Además de eso, el salchichón, hecho con presa ibérica es un monumento. Lo recomiendo a taquitos, sin duda. Y preguntad por el montadito de prueba de salchichón –el mismo salchichón de antes, pero sin embutir y curar– al que denomino McRuiz porque parece una pequeña hamburguesa. Pero no pidáis un McRuiz, que no van a saber de qué les habláis. Advierto de que no siempre lo tienen porque depende de las épocas de matanza y todas esas cosas, pero madre mía, ¡MADRE MÍA!
Aparte de todas estas cosas, hace un par de años ampliaron y pusieron cocina –antes había una plancha y listo– y cuentan con una carta de tapas tradicionales muy surtidas. Por seguir con los productos del cochino, recomiendo los callos, con chacina de primera. De los mejores que he tomado en Sevilla.
Para rematar, tiran la cerveza estupendamente y tienen una buena y amplia selección de vinos, sobre todo de tintos. Y las aceitunas, recomiendo las gordales: bien gordas y bien aliñadas.
Soy muy aficionado a la ensaladilla, pero aquí nunca la he pedido; ¿para qué?

Desde pequeño conozco este bar, cuando salia con mi padre por la mañana desayunábamos en Casa Ruiz, una tostada con aceite, tomate y jamón.
Quizás sea de los mejores desayunos de la zona, y el jamón tostado esta buenisimo. para el desayuno al igual que a la hora de tapear el bar esta lleno. El bar tiene una estructura clásica con muchas mesas aprovechando el espacio.
Es uno de los bares mas populares de la zona, tiene fama de tener de las mejores chacinas, y la caña de lomo y el jamón están buenisimos. La marca es de ellos y es verdad que hacen una selección magnifica.
También esta muy bien para tapear, es un bar de toda la vida, nada de tapas modernas, aparte de la chacina, tiene pescaito frito, menudo, tortilla, solomillo y carrilla.
Me encanta el trato de los empleados y lo que mas me gusta son los precios, relación calidad precio es buenisima.

Este bar esta frente a mi trabajo y es uno de mis favoritos para desayunar o tomarme la tapa al medio día. Los desayunos son los mejores de la zona sin duda alguna, tienen unas tostadas buenisimas y si te la pides con jamón serrano mejor que mejor.
La decoración del bar es típica sevillana, alicatados de azulejos sevillanos a media altura, barra, mesas y sillas de madera color oscuro, cuadros de imágenes de Semana Santa y Maria Auxiliadora de la Trinidad. A la vez que bar funciona de tienda, tiene una gran vitrina llena de productos gourmet que también puedes comer en el bar, latas de conservas de pescados y patés. En el otro extremo tiene una gran nevera llena de productos ibéricos: chorizos, salchichones, morcones, cañas de lomo y sus famosos jamones. En el barrio están proliferando los bares tipo franquicia, mucho mas baratos pero con apenas calidad.
Cuando has entrado tres veces seguidas los camareros ya te conocen y te dan un trato personalizado, son buena gente. Los domingos cuando en la zona esta todo cerrado el esta allí con la tostadora echando humo.