Good place to meet with some friends, enjoy some tea and hookah. The atmosphere is really nice and the music is upbeat. It’s filled with comfy chairs too. It is a little pricey though.
Mike P.
Classificação do local: 5 Beach Haven, NJ
Best Tea you will find almost anywhere, very nice shisha as well. English menu and easy to communicate with
Lindsay B.
Classificação do local: 4 San Jose, CA
Good variety of tea, though a bit pricey. I had the Moroccan tea. Really good ambience, beautiful décor. You can also smoke hookah there, so just be warned if you don’t want to be around the smoke.
Óscar H.
Classificação do local: 4 Madrid
Quizá no sea ni la más bonita ni la mejor decorada, ni la que tiene la mejor carta de tes de las teterias de Sevilla. Pero para mí de siempre, esta ha sido una de las teterias más agradables en las que he estado. La carta es pequeña y está compuesta por zumos, batidos naturales, tes e infusiones. No es excesivamente caro, casí todas las consumiciones rondan los 3 euros. Me gusta mucho como preparan el Pakistaní, la infusión de regaliz y uno que llaman Sirio(que es el más caro de la carta 3,6 euros). El café en este sitio no es muy bueno.
Andrea G.
Classificação do local: 4 Sevilla
Para mí no hay nada más reconfortante en invierno que tomarme un aromático té moruno calientito en esta tetería de la Calle San Fernando, en pleno corazón de Sevilla. Es inevitable, sobre todo en diciembre cuando el olor a yerbabuena y esencias florales me obligan siempre a hacer un alto en el camino durante un agotador día de compras navideñas. En realidad es muy relajante entrar en este pequeño rincón árabe con su tradicional decoración de lámparas estilo marroquí, alfombras persas, telares coloridos, mesitas cortas y cojines. No es de sorprender que a diario sea frecuentado por muchos estudiantes con cara de trasnochados que pasan las horas muertas oxigenando las neuronas con un buen sorbo de té y cachimba. Por uno u otro motivo, tiene un ambiente ideal para calmar los ánimos de cualquiera y dar rienda suelta al gusto y al olfato con toda la variedad de tés, infusiones, pastelitos y, por supuesto, sabores de tabaco para cachimba. Entre los tés más recomendables están los que llevan leche como el pakistaní, el de canela o caramelo; o afrutados, como de kiwi, naranja y limón. También ofrecen variedades de café, como el Bagdad o Damasco, batidos naturales, zumos, entre otros productos más. Un buen plan para despejar la mente, sin lugar a dudas…
Berta C.
Classificação do local: 4 Sevilla
Me gustan mucho las teterías, y esta, ubicada en un lugar tan castizo como la calle Pureza, no iba a ser menos. Su decoración está muy cuidada, transportándote nada más cruzar sus puertas a un mundo mágico, donde los sabores exóticos tienen un gran protagonismo. Sé que tienen unos batidos geniales, con unas pintas maravillosas que siempre veo tomar a mis amigos, pero yo soy una incondicional del té moruno con hierbabuena. Me encanta como lo ponen, por más que intento hacerlo yo en casa, nunca me sabe igual. Será que en mi piso no tengo ese ambiente recreado, ese halo de ensueño que allí desprenden hasta las paredes. Y, por supuesto, para acompañar esa rica infusión: un pastelito árabe. ¡Me vuelven loca!, de pistacho, de nueces, esa pasta fina con miel es que ¡no me puedo resistir! Aunque vaya si son caros los puñeteros, no aquí, sino en la mayoría de teterías. Un aviso muy importante, ¡tened cuidado con las mesas! Una de las últimas veces que fuimos un amigo intentó unirla con otra creyendo que se podía mover y casi vamos todos directos al hospital con una fractura importante. Y es que no son mesas, como tal, sino unas enormes piezas de piedra sobre un pie, así que ¡cuidadín cuidado!
Antonio Miguel G.
Classificação do local: 4 Dos Hermanas, Sevilla
Muchas veces, el secreto del éxito es la simpleza. Ese es el caso del café Bagdad, o como se lo conoce popularmente, la tetería de la calle Pureza. La fórmula es bien sencilla: café(o té) y cachimbas. Nada más entrar te das cuenta que se trata de un sitio especial. «¿Dónde están las sillas?», fue lo primero que pensé la primera vez que entré. Porque no hay sillas. Te acomodas en unos amplios cojines en el suelo, alrededor de unas mesitas que parecen hechas para niños: bajitas y pequeñas. La carta de bebidas también sorprende. Tés de todo tipo, batidos, refrescos… nada de alcohol. Algo que en nuestra cultura parece inconcebible, pero que tan habitual es en un café de Marruecos, Argelia o Túnez. Hasta ese detalle está perfectamente cuidado, aunque a veces se eche de menos poder pedir una copa con la que acompañar la cachimba. Hay que tener muy claro a lo que se va. Si eres incapaz de abstraerte y olvidarte durante un par de horas de que esto es España, este no es tu sitio. Y curiosamente, la estrella del sitio, las cachimbas, es lo que menos juego da. Al fin y al cabo, una cachimba es una cachimba. Tienen algo diferente, pero no deja de ser inhalar humo, por muy bonito que sea el recipiente que lo contiene. El ambiente, oscuro, la decoración, el hecho de estar alrededor de una mesita sentado en un cojín, la bebida, la cachimba… todo acompaña en el Bagdad, y te hace sentir como si fueras el protagonista de las historias de las mil y una noches.