Ambar

Really friendly waitstaff. Went for breakfast and wasn’t impressed. Hoping to go back and try some other things off the menu when the kitchen is open!

Nuestro centro neurálgico familiar de reuniones para desayunar antes de ir de compras. Se desayuna muy bien, las tostadas son grandes y casi siempre da el solito en la terraza sea la época del año que sea. Además no está nada mal de precio y no te cobran suplemento en el precio del desayuno por pedir batido o zumo de naranja en lugar de café, a todos nos cobraron lo mismo.
Otro punto a su favor es que son rápidos, factor importante cuando tienes una madre que es un culo de mal asiento y a los dos minutos de sentarse a tomar un café ya está mirando a su alrededor a ver si las tiendas ya han abierto, está haciendo mentalmente la lista de lo que se quiere comprar y del dinero que le sobrará. Santa paciencia que tienen los camareros porque cuando se cansa de que le digamos que ya vienen las tostadas se levanta a preguntar ella. Lo bueno es que, como decía, te ponen las tostadas rápido para la salud mental de todos.
Tengo ganas de acercarme un día a tapear pero no sé si lo conseguiré porque me pasa con determinados establecimientos que los vinculo a algo en concreto y si me gustan para eso me cuesta salirme del guión. El ser humano, que es un animal de costumbres. Pero si todavía no lo conoces, no dudes en ir a cualquier hora del día.

Un desayuno contra el «tiesismo» reinante.
Se desayuna como un rey y se paga como uno que está tieso. Lo que está difícil es decantarse por la cantidad de variedad de salado o por el sota, caballo y rey del dulce.
Yo os lo pongo ya aquí para que vayan eligiendo:
Tostada de:
Jamón ibérico o york, pavo, mantequilla y mermelada, carne mechada, aceite, tomate, aceite y tomate, salchichón o chorizo. O bien con cremas de queso, sobrasada, lomo, york o ibérica. Ahí es «ná»
Bollería (ésta es peupérrima al lado de las tostadas):
Donuts, xuxo, croissant o napolitana.
Sea tostada o sea bollería vienen con café y con zumo natural por 3 euros.
Yo preferí la tostada (una señora tostada) con aceite y tomate en la terracita al solecito.

Descubrí este sitio cuando le pregunté a mi amigo Kiko si conocía algún local donde celebrar una fiesta para 20 ó 25 personas. Casualmente él estaba preparando otra para reunir a un montón de amigos que hacían mucho tiempo que no se veían. Ellos querían comerse una paella a medio día. Nosotros muuuuchos cubatas por la noche.
Me pasó el teléfono del dueño y lo llamé. Me contestó un tío muy simpático que sólo sabía darme facilidades. ¡Qué puntazo! Había encontrado el local para hacer mi pedazo de fiesta.
Esa fiesta fue para recordar. ¡Qué bien nos lo pasamos! ¡Cómo nos reímos! Estuvimos súper cómodos porque el dueño lo organizó todo para que nos sintiéramos como en casa. Acordé con él un precio por botella muy barato (refrescos incluidos) y otro precio por barra libre de cerveza. Pero no sé si ganó mucho dinero… la limpiadora de debió costar la mitad de lo que me cobró… qué desfase.
Esta fue la razón de que nos hiciéramos, oficialmente, clientes del Ámbar. Desde entonces no hemos parado de ir a tomar cafelito con tartita por las tardes; cubatitas por la noche, etc, etc.
Yo la verdad es que no he ido nunca a desayunar, ni a picar, pero me consta que se pueden hacer las dos cosas.
Un sitio muy completito y particular.