Nada más entrar al casco antiguo te encuentras con esta carnicería es una bicoca. Accedes a través de un pasillín decorado muy rústicamente. A la izquierda, las carnes. He de reconocer que no les he hecho nada de caso, ya que me he ido directa al mostrador del frente, donde tienen el famoso embutido de Requena, todo muy casero. No dudes en preguntar qué es el perro negro, o el blanco. Emilia te cortará cachines de todo para que los pruebes. Exquisitos. Vamos, que casi nos llevamos de todo un poco: longaniza de pascua, perro negro, sobrasada, longanizas, chorizo a la naranja confitada… Una delicia para tu paladar a muy buen precio.