Sabor

Llevaba tiempo viendo este restaurante, llama la atención por la decoración, muy moderna, pero siempre me había fijado en la carta que me llamaba la atención.
Creo que desde que lo abrieron ha cambiado de dueños o de estilo, no llegué a probar el original.
Estuvimos paseando sin encontrar nada hasta que llegamos, miramos la carta y nos decidimos a entrar.
Nuestra idea inicial era tomar una tosta de anchoas con tumaca peeero no había anchoas, optamos por jamón con tumaca que estaba muy bueno.
Las berenjenas nos apetecían a ambas, con el punto de la miel estaban súper buenas pero si hay que encontrarles fallo estaban muy grasientas, supongo que es difícil dejar unas berenjenas bien crujientes por fuera tiernas por dentro y hacerlo sin usar mucho aceite. Yo es que suelo hacerlas a la plancha o al horno.
Queríamos unas croquetas, tenían de jamón y de pollo y nos decantamos por las de jamón, mi madre no es muy fan del pollo. Problema, no hay muchas croquetas de jamón por lo que nos dan la opción de hacer la ración mitad y mitad. Al ojear la carta cuando llegamos vi que se podía pedir media ración por la mitad del precio +1,5 €, por lo que le dijimos que nos diera media ración, las que tuviese de jamón. Estaban ricas, yo soy muy especial con las croquetas, no me valen de cualquier manera, y estas estaban bien.
Por buscar cosas negativas es que no era el día perfecto para ir, había bastante gente en la barra tomando una copa y estaban más orientados a la fiesta de esa noche (Halloween) que al servicio de cenas, las camareras estaban un poco a su bola con sus disfraces, bailando, y las mesas para picar algo estaban todas llenas, por lo que tuvimos que esperar un poco para que llegase la cuenta.

Un lugar increíble, muy buen ambiente, e ideal para ir con amigos para tomar algo. Precios geniales, teniendo en cuenta que está en el Barrio Salamanca. Gente de muchas edades! 100 por 100 recomendado!

Un sitio bastante moderno y muy bien decorado. Si lo que buscas es sitio para poder comer cuando el resto están todos hasta arriba, seguro que aquí te podrán dar una mesa para poder comer.
La distribución del local es algo angosta, no está muy bien distribuido, pero para comer no anda mal. Los precios, pues como en la mayoría de los locales de la zona, elevado.
En la carta puedes encontrar desde las típicas tapas de toda la vida como los boquerones hasta algún plato que desentona un poco con el resto.
Para picar algo y tomarte una cerveza está bien.

En la calle General Pardiñas se encuentran muchos bares donde la gente va a diario a tomar algo después del trabajo. Sabor es uno de ellos, y también es una buena opción para cenar ya que ofrece tapas, tostas, y ensaladas, entre otras cosas.
Suele estar lleno, porque la gente lo conoce; si vas dos días seguidos, lo normal es que te encuentres a alguna persona del día anterior.
Tiene una televisión de plasma que hace que muchos aficionados vayan a ver el fútbol. Pero no sólo van jóvenes, también personas mayores, madres con sus hijos ¡Toda una variedad! Pero la carta tiene un fallo: te ofrecen, entre otros vinos, Ribera del Duero, algo que no tiene ningún inconveniente si no fuera porque en la carta aparece como RiVera del Duero