Moharaj

Entre tanta opción de restaurantes de comida india que hay en Lavapiés creo que Moharaj destaca.
Como casi todos los de la zona dispone de una carta inmensa en la cual me «chirrió» un poco ver que tenían platos de ternera (un animal sagrado servido en un indio???)
Pero tras esta primera impresión la verdad es que todo lo demás me sorprendió gratamente.
Las samosas sabrosas y nada grasientas, el pollo con especias ligeramente frito y nada pesado.
En cuanto a los platos de curry, cremosos y sabrosos. El pollo madrás pica, como advierte la carta, pero se pueden apreciar todo el conjunto de especias que forma el plato, no es un picante que te mate los sabores.
Hay varias opciones de naan, el de cebolla está bueno y también probé el de queso, aunque este me decepcionó un poco.
Y el precio bastante económico, como todos los restaurantes de la zona.
Desde luego que hay restaurantes indios mejores en Madrid, pero en cuanto a calidad/​precio me parece un sitio muy a tener en cuenta

Fui para cenar un viernes con algunos amigos. Pedimos nan, algunos platos de pollos, y dos de cordero. Los de plato fueron super ricos, sobre todo el plato que nos llevó el camarero Bangla cuando le pedimos algo que se cocinaría en casa. Todo salió muy barato — 20 euros por persona incluyendo dos bebidas. — y salimos llenísimos. Y, para terminar, nos regalaron unos gin & tonics gratis (y muy muy fuertes) porque una de mis colegas había trabajo en Bangladesh!

Es curioso que este restaurante indio no tenga comentarios en español y apenas sólo uno en inglés. Yo lo conocí por el boca a oreja y mis experiencias siempre han sido gratificantes. Bien es cierto que mi conocimiento de la cocina india es tan limitado como el de física cuántica, pero mi intuición y mi olfato me dicen que son un digno representante de la gastronomía india, al menos para lo que se puede aspirar en Madrid.
Un termómetro importante es que tardan un poco en traer la comida, signo de que no se limitan a abrir un bote de salsa y a recalentarlo en el microondas; de hecho te compensan por la espera trayendo algún aperitivo y, detalle nunca visto por estas latitudes, a los niños les obsequian con un vaso de zumo de mango que por cierto, estaba muy bueno. Mi impresión realmente es que las cosas están bien cocinadas.
El detalle de los niños es importante para los que crean que ir a un restaurante indio es como hacer un curso intensivo de escupe-​fuegos. No todo pica, las especias abundan pero hay platos muy suaves como por ejemplo unas verduras en salsa de coco que estaban para dejar la cazuela bien rebañada. Incluso el pollo Tandoori con su aspecto rojo guindilla infernal es bastante amigable. Luego están los nan, un invento fantástico que no me explico como no están más extendidos, porque esta torta de pan para salsear, frecuentemente rellena de otros ingredientes como queso o especias debería ser tan famosa como la pizza, el kebab o las hamburguesas.
Otro motivo de peso, aunque ajeno a la comida, es la tele ambiental, con una impagable sucesión de vídeos musicales o películas de la poderosa y llamativa industria Bollywoodiense; mirar la pantalla se vuelve adictivo, toda una experiencia.
Vayan a descubrir este sitio y Unilocaleenlo a diestro y siniestro. Yo salgo siempre muy satisfecho.

Hace ya años que en esta casa se pide Moharaj para las comidas y las cenas, aunque el local lo he visitado más bien poco y puedo decir que no es demasiado grande (tienen más espacio de terraza que dentro) y que tiene un aspecto ligeramente cutre, especialmente cuando recogen las mesas y sillas de fuera y las apilan en la estancia del fondo de cualquier manera.
Sin embargo, su comida es de las mejores dentro del espectro indio de Lavapiés, que es muy abundante como bien sabéis; quiero destacar 2 cosas en particular: su Korma es, probablemente, el mejor de todos los de la zona, con su punto justo de coco como a mí me gusta, y una textura densa, sin caer en el pastiche de otros sitios o en la liquidez de algún otro que es más caro y no sé por qué; y el Peshwari Nan (pan de frutos secos) que, en vez de ser pan con pasas como en otros sitios, viene relleno de calabaza y pasta de almendras (creo), consiguiendo un sabor dulce que hace las delicias de niños y niñas.
El resto de sus platos están bastante bien también; el Tikka Masala está muy rico (aunque me gusta más el de otros con menos ghee), el Pilao es muy similar al de todas partes, el Nan de queso sabe a queso (cosa importante), y anoche probamos el Bhalti y me pareció cosa buena aunque tampoco pasará a mi podio.
En definitiva, es una buena opción para cenar indio entre toda la oferta de esta zona (me vienen por lo menos 8 restaurantes a la cabeza entre 3 calles que salen de la plaza) y tiene el aliciente de que sirven a casa y no tardan demasiado. Para Korma y Peshwari Nan, probablemente sea el mejor.

The best Indian restaurant in Madrid, hands down. The Chicken Fal is perfect if you’re craving spicy. The Vindaloo is good, as well. We usually order 3 dishes to share between ¾, 2 spicy and one sweet, along with rice and garlic naan. Within four months, I have been there 6 times. Never disappointed. Highly recommended.

Uno de los mejores ‘indios’ de Madrid (y lo pongo entre comillas porque creo que son de Bangla-​Desh, pero eso es lo de menos) Recomiendo el Chiken Tikka Masala, Las samosas de Verdura, el Korma y también el arroz con especias y huevo que está SENSACIONAL!
Ayer estuve y salimos a unos 15 euros por cabeza (sobrando algo de comida). Lo que sale más caro es la cerveza india, así que recomiendo jarras de Mahou en su defecto.