Precioso lugarcito vasco, sin pretensiones decorativas, es elegante y sencillo(cosa que yo mucho agradezco) y se come maravillosamente bien. Tienen zamburiñas(¡¡aaaaahhhhhh!!) un carpaccio de carabineros bien rico, también una pedazo de sopa de pescado de caersele a una la baba, tienen caza… mmmmmmmMMMMMM. Yo tomé el pato azulón y estaba para tomarse otro. No entiendo como pude comer así ese día, pero era pura inspiración los platos. y de postre quesos artesanos. Flipé con el payoyo.
Andrea A.
Classificação do local: 4 Madrid
Un restaurante de decoración pijolis pero que no defrauda y no te hace sentir fuera de lugar, y además no es tan caro como en un principio pueda parecer. Yo fui con mis padres en una de sus innumerables visitas a la capital(siempre que vienen me aprovecho de ellos un poquito y los llevo a este tipo de sitios para que inviten…) y probé el solomillo con espárragos y patata trufada, muy muy rico! como entrante probamos su ensalada de atún con cebolla, soja y tomate, con un toquecito de miel… estaba también riquísima!
Miguel Ángel M.
Classificação do local: 4 Madrid
Es un lugar para disfrutar de una interpretación original de la gastronomía vasca. Esto es, que los productos y las esencias de la cocina vienen dados por la tradición de aquella frondosa región, pero su aplicación sobre los platos y las combinaciones de estas tradiciones con otras están permitidas y promocionadas. De esta manera, no nos encontramos con el típico local aplicado en curtir un entorno rural más cercano a un asador, sino en un emplazamiento con perfil más sofisticado y elegante, uno que en principio parece más adecuado para probar lo diferente. Demasiado fino para nuestro gusto, porque nos dio la impresión de que nos iban a pegar un palo de dimensiones considerables. No fue para tanto, aunque hubo que desembuchar 50 euros de nada. Los chipirones encebollados son un clásico en el local que os recomendamos vivamente.