Las famosas bravas con la marca patentada desde 1960 hacen que se te haga la boca agua imaginándote la pedazo de salsa que tienen que hacer que para eso la tienen patentada. Pero no señores, no nos llevemos a engaño ya que se trata de un bar más, donde los 6 trozos de patata(uno arriba uno abajo es igual) que te dan te los cobran a precio de caviar! y si realmente mereciera la pena pagarlos por lo disfrutado ningún problema, pero cuando ves que la salsa es otra más del montón que no lleva su esencia(el picante que le da el puntito) pues te sientes defraudado. El lugar está elegido estratégicamente para que los guiris y no tan guiris caigan como moscas, pero repito esto no son bravas, son otra cosa, pero no bravas y no puedo entender como tienen patentada la marca, porque ya les estoy diciendo a los de las auténticas bravas de Meléndez Valdés que patenten su salsa, porque como buena bravera son las mejorcitas de todo Madrid.
Vanessa G.
Classificação do local: 1 Vancouver, Canada
This place was dirty! The sauce tasted like it was soaked in smoked ham. Couldn’t even finish my patatas.
Alfonso L.
Classificação do local: 2 Madrid
Hace un tiempo pasaba por allí y se me antojaron unas bravas, pero ese día el destino no estaba de mi parte y me quedé con las ganas. Pero el otro día volví a pasar y cayeron unas bravas con su correspondiente cerveza. Y la experiencia fue un poco desilusionante: las patatas estaban algo blandas, la salsa aceptable, picante dentro de lo soportable aunque se notaba demasiado un fuerte sabor al pimentón picante que deben usar para hacerla«brava». Quizá podrían haber llegado a la tercera estrella, pero ese afán de los camareros por vaciarte la mesa para que entre otro cliente… no lo soporto, sobre todo cuando en tomarte unas bravas y una caña no has tardado ni 20 minutos.
Carlos S.
Classificação do local: 3 Madrid
No es que sea un gran aficionado a las Bravas, pero el otro día fui con un grupo de amigos a este sitio y la verdad es que estaban buenas. Probamos también los calamares y la tortilla de patatas y estaban bien. Obviamente no hay que ir buscando lujo ni un lugar demasiado ‘pulcro’, pero se puede ir alguna vez.
Araceli O.
Classificação do local: 1 Madrid
Yo le tengo un poco de tirria y el precio y el turisteo no ha hecho más que hacer que aumente. Resulta que su salsa es parecida, pero no igual, ojalá, que mis bravas favoritas de la ciudad de Burgos(del Mesón Burgos), que casualmente son mis preferidas del mundo entero. Hasta ahí, podría permitírselo. Pero estropear esa salsa, no sólo echándoselo incluso a la oreja, que ya tiene delito(la oreja, si acaso es con to-ma-te), sino acompañándola de patatas congeladas merece un castigo. Cuesta encontrar patatas buenas en Madrid, vale, ¡pero es que viven de eso! Lo único que se puede destacar es que en una de sus sucursales conservan los famosos espejos de «el callejón del espejo», que aparecía en la famosa obra«Luces de bohemia».
Iker J.
Classificação do local: 2 Madrid
Me encantan las patatas bravas, y ante un bar que promociona las suyas como las mejores y con receta patentada, no pude pasar de largo. Llegué a dos conclusiones: sí, están patentadas, y no, no son las mejores. Porque sinceramente no tienen nada de especial. Son patatas congeladas con una salsa que deriva –estoy casi seguro– de algún tipo de cocido al que le han añadido picante. Así pues, no os dejéis llevar por el rótulo, entrad, pero no os esperéis las mejores bravas de Madrid.
Rocío G.
Classificação do local: 5 Madrid
Esta pequeña cadena tiene tres restaurantes en la zona centro de Madrid, entre Sol y Huertas, y este es el local más nuevo y el más grande de los tres, por ello el más cómodo, a mi parecer. Además, cuentan con una buena terraza. No sé qué tienen, pero me encantan estas bravas, y de hecho diría que son de las mejores de toda Madrid(parecidas a las de Docamar, otros expertos en las bravas). La ración igual es un pelín cara teniendo en cuenta el tamaño, que no es excesivamente grande, pero está bastante bien para dos personas. Yo no soy muy de comidas picantes, pero estas patatas tienen el toque justo. Excelente también el pincho moruno, muy sabroso y servido también con la famosa y patentada salsa brava(desde 1960). Lo único que no me gusta es que no tengan Trinaranjus y la botella de Lipton da risa de lo pequeña que es… Suele estar fino, pero la gente va y viene, así que, si esperas un poco, podrás sentarte rápido, ya sea dentro o en una de las cotizadas mesas de la terraza.