La Pródiga

Caímos aquí porque nuestra opción principal estaba hasta arriba de gente, como es habitual en cualquier sitio del centro un sábado noche. El sitio es un bar bien puesto con carta de tapeo y comida argentina. Yo probé el bocadillo de chorizo de pollo que, sinceramente, me recordó a un kebab pequeño y escaso con mucho pan y poco chorizo. Para matar el hambre bien vale, pero resucita al cabo de un rato, cuando ya te has gastado el dinero en ello y no tienes para comprarte otra cosa.
El sitio está muy bien, aunque peca un poco de ser impersonal en una zona en la que casi todos los locales tienen su marca propia de estilo, lo que puede tener un efecto extraño sobre la gente que no se decide a entrar porque no parece que mole. Mi recomendación es que lo hagan si lo que quieren es tomar algo tranquilos; para estar en la cresta de la ola hay otros sitios cercanos más incómodos.

Por el momento ni el propio dueño sabe cómo se llama el bar. Creo que acaba de abrir, pongo el día 2 porque no tengo ni idea si ha sido justo este primer mes del 2012.
Yo lo descubrí el día de reyes y mira que esa calle me la conozco al dedillo porque vivo por la zona.
En cuanto a idea está muy bien, las mesitas son unas cuantas, algunas de cuatro, luego una mesa un poco más comunal y alta con taburetes y luego la barra y junto al ventanal, una mesa super bonita con taburetes. El espacio es amplio y por el momento un poco vacío y frío pero la decoración con velitas y lamparitas son muy monas. Eso sí, los cuadros son espantosos.
Luego tiene una pizarra gigante con la comida y la verdad que todo tiene muy buena pinta. Ahora mismo tiene una oferta, por la cual ya he ido dos días, en la que te ofrecen una copa de vino+ 3 croquetas por persona por el módico precio de 3 euros y aunque no son las mejores que he probado está bastante bien. El vino puedes elegir entre el de la casa o albariño.
Yo el otro día me tomé 4 copitas de vino y aunque no te la sirven en copazo gigante como a mí me gusta estaba bueno.
El camarero es argentino y bastante majo. El precio es medio alto en cuanto a los platos y hay bastante dónde elegir. Por lo visto hay más ofertas, dependiendo del día.
Lo que más me llamó la atención son los desayunos que por 2 euros con algo tienes variedad junto a los cafés que vna incluidos. Asique algún finde caerá una visita.
Me encanta que abran nuevos sitios por el barrio!!! Cada vez más Espíritu Santo ofrece más cosas, y más allá de la esquina de San Andrés, que parece una frontera y divide la calle entre locales petados y locales medio vacíos, excepto la Paloma Blanca que cada vez me da más asquete.