La Fontana de Oro

Hahaha so this is an Irish pub… in Madrid. You know when you’re in a new place and really want to go out and have a good time but you’re completely disoriented and don’t even know where to start? That was my entire night. We ended up here drinking Heineken («Mmm…tastes like college.») while 80s-​90s music videos played on all the screens all night long. I kind of loved it? Queen’s «I Want to Break Free» was a personal favorite. Thank god for the 80s, man.
It was fun, it was loud, it had great music, and it’s a bar. All good things.

Bön je me suis retrouvé dans ce pub pour regarder la France se prendre une fessée légendaire contre la Nouvelle Zélande.
Bonne ambiance mais un choix de bières extrêmement pauvre, c’est dommage. On a le choix entre l’équivalent de la Kro, de la Kro, de la Kro et de la Kro. Ah et de la Guinness aussi, of course.
Donc si tu aimes la bière, va ailleurs !

Hay noches que acabo aquí y os voy a contar porque:
La Fontana De Oro es un pub que se caracteriza por la multiculturalidad que se respira en el ambiente. Gente de todas partes del globo terráqueo acude a este templo en altas horas de la noche con intenciones claramente reproductoras.
El sitio es bastante grande, tiene dos plantas y, en la de abajo, muchos sitios donde sentarte. También tiene unos baños bastante amplios en los cuales, en el caso de los chicos, no suele haber nunca gente esperando (cosa que se agradece en un pub)
Durante el día es perfecto para ver partidos de la liga inglesa o, en mi caso, para ver los partidos de rugby. Además tienen teles por todas partes, incluso abajo, donde puedes gritar sin miedo a que los vecinos te esperen a la salida.
Durante la noche la cosa cambia, no sé si es por ahorrar dinero o qué pero quitan la mitad de las luces, ponen la música alta y se convierte eso en Geordie Shore. Fan total.
El precio de las bebidas es el que te encuentras en cualquier pub, unos 4 – 5 € una pinta de la cerveza mas barata y por un poquito mas, cervezas de calidad.
Me encanta acabar en este sitio, pero solo de vez en cuando (uno se hace mayor)
PROS: Mucho ambiente y riqueza cultural.
CONTRAS: Suele haber mucha cola para entrar. Es normal, hay días que merece la pena.

Es como un pub irlandés pero en versión cañí-​galdosiana que lo mismo te vale para ver el fútbol, para comer algo rápido, para las pintas afterwork o para las copas de la noche donde siempre suele estar petado y la música deja basante que desear, la verdad.
Suele haber conciertos, la decoración es curiosa (esa moto mítica colgada del techo de la planta de arriba), no te clavan excesivamente y esta muy bien situado (al ladito de Sol).
Si estás por la zona es una de las opciones menos lamentables.

Es un pub irlandés ideal para tomar unas cervezas con los amigos. En la parte de arriba tiene un pequeño escenario donde a veces hay actuaciones en directo que animan bastante el local sino también suelen poner música comercial. Es bastante amplio y en su mayoría para estar de pie o en taburetes en torno a la barra. La parte baja es un poco oscura, hay mesas para poder sentarse a comer algo o charlar mas tranquilamente y una mesa de billar, también están los baños metidos en una especie de bóveda no recomendada para chicos altos ya que te das con el techo y tienes que hacer malabares para poder usarlo.
En líneas generales el sitio esta muy bien para cervecear (las pintas cuestan entre 4’5 y 6 €, las copas de garrafón puro mejor omitirlas) y pasar un rato agradable por el centro.

Hay claramente un adjetivo que define a la perfección este lugar: peculiar.
Realmente creo que la razón de que haya tantos guiris allí (irlandeses principalmente, obvio) es que esperan encontrarse un pub irlandés como los de su tierra… y no.
A no ser que haya concierto, la música es pachangueo 100%, o música del año de la polca, o una mezcla de ambas. Igual que la gente: joven, madurita y ni la una ni la otra. Pero siempre como el pub… peculiar.
La verdad es que las veces que he acabado allí ha sido porque es un poco el lugar comodín cuando andas por Huertas. Suelo ir con amigas, así que entramos gratis y nos echamos unos bailes y unas risas. No creo que sea el garito de los sueños de nadie… pero merece la pena dejarse caer de vez en cuando.

Fun sports pub with an international students/​expats population. Friendly bartenders and delicious sangrias. Had a good time watching the World Cup here. Not too much sitting upstairs but they have a roomy downstairs. Sangrias are hand-​crafted and a work of art!

Cuando he ido a este bar, ha sido entre semana, de noche y siempre hay gente. Ya sea un miércoles o un jueves, incluso los domingos. Siempre habrá gente. Madrileños de pura cepa, guiris turistas, erasmus, personas mayores, jóvenes perdidos, borrachuzos… Si debería considerarme dentro de algún grupo citado, seria lógicamente, en el último. Todo esto enclavado de demasiado ambiente ruidoso y música comercial de los 40 Principales.
Para mí, la Fontana de Oro es cerveza, amigos y ruido. Para comer, nada más que cacahuetes y patatas fritas. No es un restaurante, es un bar de copas. Y tampoco es para estar toda la noche, salvo un día que no haya nada más abierto. Seguramente, quien salga por Huertas y/​o Sol de noche, sea un sitio idóneo para empezar o acabar, pero rara vez, para estar toda la noche. Y, para quienes tenemos cheques de comida, es un alivio saber que se aceptan.
Por todo esto, cuando he ido, me he pedido mi pinta de Newcastle de barril y tan tranquilo. No pasara al olimpo de la noche madrileña.

«En la Fontana es preciso demarcar dos recintos, dos hemisferios: el correspondiente al café, y el correspondiente a la política. En el primer recinto había unas cuantas mesas destinadas al servicio. Más al fondo, y formando un ángulo, estaba el local en que se celebraban las sesiones. Al principio el orador se ponía en pie sobre una mesa, y hablaba; después el dueño del café se vio en la necesidad de construir una tribuna. El gentío que allí concurría era tan considerable, que fue preciso arreglar el local, poniendo bancos ad hoc;»
«Entre los numerosos defectos de aquel local, no se contaba el de ser excesivamente espacioso: era, por el contrario, estrecho, irregular, bajo, casi subterráneo. Las gruesas vigas que sostenían el techo no guardaban simetría. Para formar el café fue preciso derribar algunos tabiques, dejando en pie aquellas vigas; y una vez obtenido el espacio suficiente, se pensó en decorarlo con arte.»
«Al crearse el club, no tuvo más objeto que discutir en principio las cuestiones políticas; pero poco a poco aquel noble palenque, abierto para esclarecer la inteligencia del pueblo, se bastardeó.»
De lo que fue un café tertulia similar al Café de Oriente, y que describió con detalle obseso el gran Benito Perez Galdos, algunos de los fragmentos dejo arriba como muestra de pedantería, se ha restaurado el nombre este pub que por pura invasión se ha tornado irlandes. Que es aquí lo que encontrarás mucha, muchisima gente, pintas de cerveza a 5 € y habrá quién vaya a copas de dudosa calidad, música comercial y guiris enfervorecidas a todos los niveles. Tiene una planta de arriba impracticable y una planta de abajo similar a una bodeguilla abovedada donde supongo se podrá cenar. Yo solo he ido al delictuoso placer de desgustar birra de la planta de arriba y de ver y observar lo bien que se lo pasan las pechugonas de la perfida albión.
Y esto es lo qué es. Un pub irlandes de fiesta y festivo que ni en el mismismo Dublin. Con todo lo bueno y malo que tiene ello. Ruido mucho. Guiris pasandoselo requete bien y con ganas de arrimar cebolleta y pillar cacho. De como lo describía nuestro ilustre literato, me temo, solo queda el nombre y la ubicación. Eso sí, si vienes y sabes a lo que vienes, pasarás un buen rato.

Long story short, this is where I ended my night (or should I say morning) every time my friends and I have gone out in Madrid. During my study abroad period, this became my «home base» bar where my friends and I got the opportunity to meet great people from all around the world. The promoters are super friendly and outgoing. The environment is incredible with great music via DJs or even live music! The bathrooms definitely got a bit nasty towards the end of the night but you can look past that.

This is by far my favorite place to grab a brew and watch any sporting event. They play all the soccer (futbol) matches and also (more importantly for me) they play the American football games, basketball games, etc. They also have a great selection as far as beer goes. A bit pricey, as it is near Sol, but still worth it. They also serve food and tapas. After the game you can stay for a bit of dancing, they usually have a DJ on weekends. Great local pub.

Ok, un amigo me invito a este lugar para tomar específicamente guinnes… pues bueno… yo no soy fan de cerveza negra… pero como tampoco quise hacerle el feo pues acepte… y ala verdad es que estaba muy buenas!
El lugar muy bien, legamos como a las 9 así que conversamos tranquilamente… pero después me di cuenta que poco a poco se llenaba lo cual no es nada raro en algun bar madrileño…pero de allí se lleno mas de lo que yo pensaba y de alli vi a un DJ!!! y dije que? también en club? wow! pus muy bien, ya con un poco mas de cerveza en nuestro organismo disfrutamos del buen ambiente que se pone.
El bar podría taggearse de ser algo turístico, por la zona digo, pero la verdad no lo senti asi.
Demas esta decir que nos quedamos hasta super demasiado excesivamente tarde pero contentos!
NO soy fan del lugar pero entre 3 y 4 estrellas pues le doy 4 porque el ambiente del lugar me gusto mucho.
AH! lo único que la verdad no mola es que lleven a niños!!! osea por favor padres! contraten a alguna niñera que se quede con sus críos! !!eso de ver niños corriendo en un bar la verdad no esta nada IN
eso es todo

I went here last night to meet some friends from a language school I am attending. May it be noted, it was Tuesday night and I got there around 9.30. There were a few people milling around but not many. After a round of drinks and some chatter with people from my group the place started to fill up.
The lights went down, the disco ball started spinning, and an all-​out party broke out. Music started pumping and the videos for their music videos (most of which I’ve never seen before) played on big-​screen TVs.
There is quite the international crowd here. In the course of one evening… that I remember… I spoke to a German, an Austrian, a Russian, an English girl a Irish guy, a Malaysian, a Belgian and a few Americans. If you want to practice ANY language… this is the place to go to do it.

Uno de los sitios más típicos de Madrid, una mezcla de pub irlandés y un café típico madrileño. Es muy famoso entre otras cosas porque una novela de Galdós lleva su nombre, y porque es donde Alcalá daba sus discursos. Tiene dos plantas, la de abajo tiene una zonita para sentarse en la que es dificilísimo pillar sitio.
Es bastante grande, pero siempre está lleno, muchas veces he cambiado de pla en el último momento al verlo tan lleno porque me dolía pagar para el tiempo que quedaba al cierre y la gente que había dentro. Hacen conciertos en directo y bandas regulares que van repitiendo, suele ser rock.
Atento a las ofertas, porque las últimas veces que he ido tenían una promoción en la que los últimos cinco minutos de cada hora ponían chupitos a un euro.

Este sitio me encanta. Para mí es el mejor pub de la zona centro de nuestra ciudad. Aunque es cierto que siempre que voy me entra morriña porque me recuerda la época en la que viví en tierras escocesas.
Es un pub de los buenos, donde la decoración está muy cuidada. La iluminación es mediante largas farolas de suelo. Lo más llamativo quizá, sea la moto que cuelga del techo.
En una esquina tienen el escenario para las actuaciones en directo, que por cierto las hay todos los jueves, viernes, sábados y algunos domingos.

Detesto La Fontana de Oro. Materializa todo lo que no quiero encontrarme al salir: mucha gente, bebida cuestionable, música comercial y guiris enfervorecidos.
Mis amigos son muy de acabar las noches céntricas aquí, y yo me voy mustiando a medida que se acercan las 4 y veo que cada vez estoy más cerca de La Fontana. Si no he ido cien veces no he ido ninguna y, creedme, muchas de ellas he jurado que seríà la última.
Solo lo recomiendo si has pescado algo y tienes que seguir la fiesta o si tu grupo de amigos lo escoge unánimemente. En cualquier otro caso, lo mejor es comerse unos tallarines de los chinos de Gran Vía e irse a casa a dormir la mona. Por la mañana vuestro bolsillo y vuestra cabeza agradecerán haber obviado a La Fontana de Oro.

Curioso bar cuyas pareces rezuman historia y cuyo nombre homenajea a la novela homónima de Benito Pérez Galdós. A mitad de camino entre una tasca de toda la vida y un pub irlandés, lo cierto es que La Fontana de Oro suele estar siempre llena, y es que aparte de ser un reclamo histórico, también retransmiten todo tipo de deportes. Y no sólo eso, los jueves, viernes y sábados hay conciertos a partir de las 23:00 h. El sitio bien merece una visita, y no sólo para tomarse algo, sino también para darse una vuelta por sus dos plantas de historia viva, pero todo sea dicho: suele estar hasta arriba de guiris y es un poco carete (¿3 € por un refresco???).

Me encantan los irlandeses, los bares irlandeses quiero decir… no sé si es por las Guinness o por la música, pero sé que me encantan. La Fontana de Oro la conocí por casualidad, después de tomar unas cañas en el Museo del Jamón de Sol decidimos ir a un sitio que nos pillara cerca. Tan cerca que está justo al lado.
La primera vez que fui no pagamos entrada y había música en directo y eso siempre hace especial a un sitio, lo pasamos bien porque no había mucha gente y el ambiente estaba bastante tranquilo. Después de esto pensé que la Fontana sería uno de mis irlandeses favoritos.
Pero siendo sincera tengo que reconocer que la última vez que fui no me llamó tanto la atención. Para empezar ese día si cobraban entrada, bueno cobraban entrada a medias porque las chicas entrábamos gratis y los chicos pagaban. Entramos y no había música en directo si no la típica música que se puede escuchar en cualquier garito normal. Y había tanta gente que el calor y agobio nos hizo aguantar el tiempo justo para amortizar la entrada de los chicos, es decir, justo el tiempo que tardamos en bebernos la consumición que daban con la entrada.
A pesar de eso, volveré a ir para ver si me encuentro con la misma opinión de la primera vez.

famosisima en madrid
Una taberna muy popular en la capital, su facjada impone, pero su interior cautiva. Sirven unas cervezas frias estupendas, negras y rubias, todo al gusto del consumidor, como la infinidad de tapas donde elegir el acompañante de la cerveza. El precio un poco alto. Los fines de semana es casi imposible entrar