Independance

I appreciate this club because it feels different than the typical Spanish discoteca scene. I enjoy being able to dance to alternative and rock music that I know instead of pop music I’m not as into. Definitely a personal music preference, but if that sounds like you as well, you’ll probably like this place. They don’t have a strict dress code.
I went on a Friday night and it cost 10 euro for cover, but that also included one drink and one shot.
I also went to their New Year’s party which was fairly economical — under 30 euro — especially since each entrance ticket came with two drinks, a shot, favors, and a CD. They also gave out uvas and in the late (or should I call them early?) hours they had churros and chocolate.
The female bartender that is usually at the smaller bar to the right when you come down the stairs of the entrance is nice and efficient.

Independance, Independance…
Lo que fui yo cuando estaba en Barquillo, lo poco que me gustó la vez que fui a una de sus dos ubicaciones en Santa Engracia, y lo que viví en su última ubicación…
Yo le dejé de tener cariño hace muuuuuuuuuchos años, creo que básicamente cuando se fueron de Barquillo, y pasó a ser un sitio que odiaba a muerte, tanto por música como por ambiente, todo muy distinto.
Hace mucho que veo en anuncios de una conocida red social (ahora me pongo tiquismiquis, todos sabemos que hablo de Facebook) sus sesiones que pintan bien, aunque a mí me repelen sólo viendo el flyer.
Experiencia actual: sábado, 12 de la noche más o menos, acaba de terminar el concierto de unos amigos de un amigo, nos plantamos aquí, no hay cola en la puerta, la entrada es libre y tienes la opción de pillar 2 copas por 12 €, hasta ahí bien.
Entramos, no hay casi nadie y el aire acondicionado debe estar como a 10º, el 90% del tiempo que pasé dentro estuve con abrigo, no tenía gracia, no hay nadie, el aire sobra mucho.
Las copas pues lo de siempre en casi todos lados, aunque eso nunca ha sido gran problema para mí, bebo matarratas como si fuese gratis.
Lo peor, que hasta las 2:30 había una especie de sesión rara donde sólo sonaban como mucho 8 grupos y era un auténtico tostón, terrible.
Cruzo los dedos por no tener que volver.

He ido muchas veces al Independance, sobre todo en sus antiguas localizaciones (que recuerde, ahora mismo, tres –aunque creo que ha habido alguna más – : Barquillo y Santa Engracia, donde han estado en dos salas diferentes). Nunca me ha gustado en exceso: la música que ponen me va (no voy a mentir) pero creo que repiten demasiado. En su sala he llegado a escuchar varias veces al mismo grupo en una noche o (aún peor) varias veces la misma canción en una misma noche. Y eso para mí es un gran no.
Resulta que hace poco (relativamente) se mudaron a esta nueva sala en Doctor Cortezo, al lado de mis cines favoritos. La cola sigue siendo espectacular, pero yo no había entrado ninguna noche. Sin embargo, el otro día había un concierto que me interesaba, así que me acerqué.
La sala me gustó, la verdad. Me recuerda a la del Ocho y medio primigenio, con su zona de baile un poco separada de la zona de las barras, y un escenario al fondo donde (probablemente) te puedas subir a bailar a altas horas de la madrugada.
Desconozco cómo está ahora mismo el tema musical, si las sesiones siguen resultando tan monótonas o qué, pero la verdad es que salí gratamente complacido por la sala, como concepto. Los precios, pues un poco lo de siempre: una birra cinco pavos. Un robo, sí, pero un robo tan común en Madrid que ya ni te sorprende.

Tengo que decir que disfruté mucho muchísimo del concierto de McEnroe en esta sala que fue lo que me llevó hasta allí. Eso, y un amigo que me invitó al concierto :)
Hacía mil años (quizá alguno menos ;P) que no pasaba por aquí y no soy buena dando valoraciones sobre la acústica etc. salvo que sea desastroso y para mi, fue perfecto.
Seguro que algún entendido que haya estado en alguno de sus conciertos puede aportar algo más.
Nos tomamos unas cervezas… ya no recuerdo cuántas ups! ;) pero el tercio sale a 4 €, ese día que era sábado y no sé si entre semana varía mucho.
A mi esta sala me gusta, tanto cómo está distribuida, el ambiente y que siempre que he ido me lo he pasado fenomenal.

Tengo que hacer justicia a este lugar… Que sinceramente es una pena leer los comentarios anteriores con la realidad actual.
No sé si habrá cambiado de dueño, pero al menos ahora es una pasada. Pasada por varios motivos… A ver qué tal los enlisto:
1) La música: ¿qué te apetece? ¿Salsa o bachata? Los lunes son tu día! Que hay clase de 10 a 11, luego fiesta y seguida por el Fucking monday que se pone de lujo. ¿Entrado en años y con ganas de un homenaje a tu banda de los 90’s u 80’s? Pues los jueves es el día de homenajes! Desde nirvana, U2, Pink Floyd o incluso los míticos Rolling Stones…
Pero que es que además el dj tiene 2 dedos de frente y sabe cuándo es momento de variar… Así que eso: música 5 estrellas.
2) Las bebidas: 5 € por unas copas generosas? Es que donde te encientras eso? Los findes sí suben a la enorme cantidad de 7 €… Boohh!!! (Being ironic, of course!!)
3) El sitio en sí: muy bien! No esperes un lugar espectacular, pero sí funcional y bien pensado. 3 barras, y con servicio eficaz… Y bueno (if you know what I mean ;)!!!)
4) La gente: Tal vez eso es lo mejor. Un lugar lleno de extranjeros, y por ello con ganas de vivir y pasarlo bien. Voulez vous parler français? C’est les place! Ti piace la bella Italia? Allora questo è il tuo posto! Willst du doch mal a bissel Deutsch reden? Komm einfach her! English… British, even Scottish: enjoy practicing your different accents! Erasmus en todo su esplendor… Madrid, como capital europea muy bien representada!
Que por que no las 5 estrellas? El servicio de ropero deja mucho que desear y un poco más de aire acondicionado caería estupendo.
Pues eso! De verdad es un lugar al que desgraso con gusto… Y espero que
su reputación empiece a mejorar.

Mmm… ña.
Desde Valencia veía las fiestas que anunciaban en las redes sociales de Independance y me moría de ganas por ir a ellas. La música que me gusta en versión discoteca, ¡bien! Y llegó la mudanza casi forzosa, mi cumple y el tan esperado momento de ir, encima muy bien acompañada.
Pero eeep, llegamos y lo que vimos fue un subsuelo muy muy lleno de gente, muy muy caluroso y muy muy asfixiante. La música ya sabíamos, genial, aunque es verdad que para que te pongan las canciones tal y como vienen en el disco, pues me pongo el Spotify o el iTunes y bailo a mis anchas en casa. Nada, una canción detrás de otra sin la más mínima intención de disimular el corte entre canción y canción.
Los baños están escondidos donde Cristo perdió la sandalia, y si tienes la suerte de llegar y no habértelo hecho encima, encontrarás que casi hubiera sido mejor. Apenas 3 baños para toda la discoteca, sucios desde primerísima hora de la noche y con tanto vaho en las paredes que hacer pis ahí era misión resbaladiza imposible (las chicas me entienden…)
Por último, las copas. La verdad es que no recuerdo qué precio tenían, lo que sí sé es que me acordé muy mucho de ellas a las 8.30 de la mañana cuando mi estómago pedía a gritos que las sacara de él. En fin, un show.
Volveré, seguro, porque me gusta la música, porque si entras apuntada en lista antes de la 1 es gratis y porque es un buen plan para cuando todavía no se ha llenado. Eso sí, estando en Madrid, estoy segura de que hay mil lugares mejores en los que poder escuchar música indie en los que además, el Dj, se lo curre un poco más.

Mucha gente, poco aire acondicionado y un subsuelo… mala combinación…estando Ocho y Medio en esta ciudad y ofreciendo la misma oferta tanto en música como en tipo de gente… no hay duda que prefiero Ocho y Medio. Aqui la música parecia la lista de Spotify que tengo en mi casa… ni DJ ni nada parecido…

No lo veo tan terrible como lo ponen, sinceramente, las sesiones siguen molando y el nuevo local entre Sol y Tirso es mucho más cómodo.
Los que añoran tiempos en los que no se llenaba, se estarán remontando a hace más de 3 años, que es cuando se popularizó y ya en Santa Engracia llegué a ver colas de más de 50 metros.
Eso sí, las últimas veces que he ido he visto gente a la que le robaban el móvil, no 1 ni 2, sino de forma masiva. De ir un grupo de 10 personas y que rajen el bolso a 3 chicas del grupo y ver llorando fuera a un montón más.
La última vez se lo robaron a mi novia y la gente del local pasó completamente, así que se merecen que se quede vacío por pasar así de la seguridad.

De acuerdo con lo que dicen más abajo, el local ha ido decayendo de manera directamente proporcional al aumento de la gente que va, cada vez que se quiere ir al baño, ropero o a por tabaco es una odisea.
¿Como se les ocurre poner esas 3 cosas al final de local, en un pasillo enano con la cantidad de gente que cabe ahí?

Recientemente se han mudado a la acera de enfrente, liretalmente.
Inicialmente me llamó la atención por la música, la zona (al lado de Tribunal y cerca de varias líneas de metro y buho), la posibilidad de entrar gratis por lista y también, por la hora de cierre. Pero ahí se acaba la bueno.
Lo malo: colas absurdas cuando el antro está vacio y se acerca la hora del fin de la entrada libres por lista.
En el local antiguo, cuando se podía fumar, te ahogabas de la cantidad de humo que había. Cuando se prohibió fumar en los locales, te ahogaban los guarros que dejaban el paso por la ducha y el jabón para otros que lo necesitaban más (yaaaaaaaaaaa, eso creían ellos). Vamos, que la ventilación era una joya de las de la abuela. En el nuevo local, siempre que he ido no he notado el olor a sobaquera maratoniana, cierto es que he ido en invierno… temo el verano ahí. :S
Pero lo peor, y es algo que he comprabado no se lo olvidaron en el local antiguo es la garrafa. PEROHIJOSDEMIVIDAAAAA!!! que ofrecer alcohol decente no es tan caro. Aunque lo parece, porque te clavan 8 eurazos (convierto: 1300 pelas) por una copa de la más burda garrafa. En fin, siempre queda nuestro fiel amigo el tercio de Mahou a 5 euros (esto no lo convierto).
En fin, si te gusta bailar el llamado Indie es una opción. Pero, si no quieres donar prematuramente tu hígado y los riñones a un banco de estudio de enfermedades provocadas por el alcohol, deberías evitarlo como otros muchos sitios.
Comentario patrocinado por GARRAFONE XD

bueno para la penultima esta muy bien

Me gusta mucho la musica aqui en algunos dias en otros en una cosa totalmente diferente como 60 e 70’s. La bebida es un poco cara entonces es recomendable a bibir en otro lugar antes de ir al club.

la tematica de sus fiestas me parece la peor idea del mundo. Una noche entera poniendo música The Strokes y Artic Monkeys alternando una con otra. Además las copas son caras para el garrafón que ponen.
La última vez que me arrastraron hasta allí se me cayó al suelo una copa delante de la camarera y no me quiso poner otra… Decía que se la pagase (prometo que no iba borracho) así que con las mismas me fui, y nunca más me van a volver por allí.

Ha sido un lugar que me ha llegado a encantar, era un habitual, pero ha ido decayendo hasta llegar a un punto de no retorno en el que me estoy planteando si volver.
Su primera ubicación fue en la calle Barquillo, tenía dos plantas de las que sólo llegué a ver una abierta. Era un poco agobiante, pero la música era increíble y el ambiente, ídem de ídem.
Tras esta experiencia pasó a la calle Santa Engracia, a un local mucho más grande y se supone que mejor. Para mí nunca recuperó el encanto que tenía antes del cambio de sede. En la nueva hace más calor y la distribución es un poco claustrofóbica. Sin embargo, siguen manteniendo la buena música y, de vez en cuando, invitan a algún miembro de un grupo de moda (indie la mayoría) para que pinche sus temas favoritos. La última vez que fui pinchó We Are Standard y la verdad es que me lo pasé bastante bien.
El mayor problema de Independance, desde mi punto de vista, es la masificación. SI quieres entrar por lista y por consiguiente gratis has de ir a hacer fila no más tarde de las 00:30, por lo que si tienes una cena, estás bebiendo algo en algún local o en una casa, más te vale darte prisa. Aún así, llegarás pronto y tendrás que esperar un buen rato de cola. Lo que te espera dentro no es mejor, muchísima gente amontonada. Ir al baño se convierte en una odisea, pues cada vez que lo necesites tendrás que atravesar una pista de obstáculos.
La idea es buena y tiene todas las condiciones para ser una gran alternativa para pasar una noche para recordar, pero hay siempre demasiada gente y alguna noche es insufrible estar allí.

Siempre he dicho que me vale cualquier sitio si estoy allí con mis amigos. Claro, lo decía antes de conocer el Independance. Y me jode mucho faltar a mi palabra, pero al Independance no vuelvo ni aunque estén mis amigos.
Razones. La temperatura allí debe rozar los 250 millones de grados. Antes la tóxica nube de tabaco te impedía ver y respirar, pero te libraba del olor a sobaco que se puede apreciar ahora. No es su culpa, dirá alguno. Sí, lo es. Que pongan algún tipo de ventilación, o que al menos apaguen los altos hornos con los que funden el cristal para luego hacer las copas…
Razones. La música está desagradablemente alta. Durante algún tiempo fui operario de pista en un aeropuerto deficitario que no tenía para pagarnos los cascos para proteger nuestros tímpanos. Pues bien, el ruido de los motores de los Boeing no alcanzaba el nivel del de la música en el Independance. Bueno, no trabajé en ningún aeropuerto, pero supongo que de haber sido así esta crítica no estaría muy alejada…
Razones. Hay momentos de la noche en la que si tiras un papel no cae al suelo porque no queda espacio material para que llegue hasta allí de la cantidad de gente que hay. Mirado por el lado bueno, cuando intentas ir al baño te vas aplastando contra la gente y si esa noche no has pillado al menos te vas con la sensación de haberte restregado contra un par de cientos de personas.
Razones. La cola. Ni Nacho Vidal…
Razones. Las copas. Valen 8 € y será casualidad, pero después de mis muchas noches en el Independance (mis amigos viven encima y siempre acabamos allí) siempre tengo resaca mala.
Razones. La música es buena sí, pero cuando te empiezan a sangrar los tímpanos pierde calidad. Además, ponen las listas en el Spotify, así que puedes escuchar las mismas canciones en la comodidad de tu alcoba.
Razones. Una buena. La gente que va a allí. Parece una competición para ver quién es más moderno-​indie. Si tienes un poquito de espíritu crítico y mala leche, te lo pasas pirata viendo los especímenes.

Fui porque me lo recomendaron. Tenía grandes expectativas puestas en este sitio. Nos apuntamos en lista a través de Internet para entrar gratis pero había tanta gente que cuando llegamos a la puerta ya eran más de las dos y finalmente tuvimos que pagar.
Cuando entramos lo que vi no tenía mucho que ver con las expectativas que me había creado. La distribución del garito o la gente con la que no me sentía identificada fueron cosas que no me llenaron en un principio.
A pesar de esto, la música era buena, el dj sabía bien lo que ponía y lo que le podía dar un poco de ambiente a la noche. Además lo bueno de la Independance, que así es como se llama el local, es que lleva a grupos famosos para que pinchen sus canciones favoritas.
No sé si fue por el lugar o porque yo tenía una mala noche… por eso tendré que volver para sacar nuevas conclusiones sobre este garito.