Ya se sabe lo que hay en ginos, una carta italiana repetitiva. En cualquier caso cada poco tiempo una apetencia irrefrenable de pasta se hace dueña de ti. Piensas en ir a un italiano«de los buenos» pero tu cartera te mira tiritando. Siempre nos quedará París, quiero decir, el Ginos. Quedarás saciado con una comida de pasta«normal“‘ a un precio«asequible». El ambiente es normal y el servicio rápido. Recomiendo para pasar una velada agradable con la pareja y una botella de lambrusco. Y si es con amigos tres o cuatro(botellas, claro).