Antes de nada, para que sepáis desde qué perspectiva escribo esta opinión tengo que decir que no soy una loca del fitness. No me machaco, hay a veces que estoy un par de semanas sin ir, y mi ritmo habitual es ir 2 veces por semana, 1 hora cada vez. Bueno, es lo que me propongo… Dicho esto, empiezo con mi reseña: ELPRECIO: Aquí está la clave de por qué me apunté. Es baratíiiiiisimo. 19 €/mes sin oferta, con oferta 9 €/mes. Sí que es verdad que cuando te apuntas tienes que pagar algo más por la pulsera, y luego si quieres que un monitor esté contigo y te haga una tabla, son otros 20 €, pero vamos, barato sobre todo. HORARIO: 24h /7 días a la semana. Otro punto genial para gente como yo, que no tiene horarios fijos. INSTALACIONES: Aunque recientemente han hecho una pequeña ampliación, la verdad es que el gimnasio se queda pequeño, sobre todo en horas puntas donde es casi imposible hacer una tabla entera sin tener que estar esperando. A mi, personalmente, no me importa mucho. Si un día no puedo hacer triceps, pues mira, no pasa nada, pero entiendo que esto puede ser un punto muy negativo para gente que se tome el gimnasio más en serio que yo. CLASES: Las clases son«virtuales» es decir, tú te montas en la bici y hay una TV que cada hora comienza con un vídeo nuevo. Sólo necesitas los auriculares para escucharla. A mi me gusta mucho este modelo, pero entiendo que no es para todos los gustos. También hay otra sala, donde puedes entrar y elegir un vídeo de diferentes clases(yoga, zumba…) y haces la clase sola. Sinceramente, nunca lo he probado, así que no puedo dar mi opinión. Además, el gimnasio dentro, tiene otra sala«Get Active» donde pagas por cada clase(aquí sí con monitores de toda la vida). Y los precios son bastante asequibles. LIMPIEZA: Correcto, nunca he visto nada sucio, pero tampoco es un palacete. Yo no utilizo las duchas porque vivo muy cerca, pero los vestuarios se ven limpios. En definitiva, es un buen gimnasio, y excelente en calidad-precio. Pero igual, con gente con más necesidades que yo, puede quedarse un poco corto.
Rafael L.
Classificação do local: 4 Madrid
Esta franquicia de gimnasios se une a la creciente corriente de los Low Cost, que en los tiempos que corren no deja de ser un gran acierto. Bajo esa premisa, ofrecen instalaciones nada ostententosas y servicios contados, para que sólo pagues lo que vayas a usar. Todos los extras, si los quieres, los pagas aparte. Voy a listar los pros y contras para organizar un poco la crítica PROs 1. La primera característica importante de este gimnasio es que abre las 24 horas del día, los 365 días del año. El personal sólo atiende con un horario determinado, pero el acceso es libre a través de unos tornos con una pulsera electrónica y lectura de huella digital, así que vas cuando te da la gana, lo que es bastante útil ya que si tu horario te lo permite, puedes ir a horas cuando no hay nadie o muy poca gente. 2. El precio. Es baratísimo. 18 euros al mes(IVA incluido) si pagas de mes en mes domiciliando el recibo y 12 euros al mes si pagas todo el año junto, aunque ya sabemos lo peligroso que es esto… Publicitan que no es una promoción de apertura, sino que son sus precios oficiales. 3. Actualmente(a mayo de 2014) está todo nuevecito porque abrieron hace 3 meses. 4. Tienen lista de espera. Esto en principio es una desventaja, pero aparentemente lo hacen para que el gimnasio no se pete y empiecen a perder clientes porque esté demasiado masificado y toque esperar mucho para hacer los distintos aparatos. En cualquier caso, a mí me hablaron de un mes de espera y me llamaron en una semana. 5. Pese a no tener clases en directo, sí que hay suficientes bicis y elípticas para poder asistir a clases virtuales conectado tus auriculares a la clase que da un monitor por una tele. También hay una sala de zumba, yoga, etc. 6. No reluce, pero se ve medio limpio. CONTRAs 1. El personal te atiende relativamente, es decir, que si les pides algo te ayudan o te explican, pero no te ponen tabla ni te hacen seguimiento ni nada parecido. Si quieres atención especial, pagas 1 hora de entrenador personal a 20 euros. 2. El sistema de acceso. Las pulseras funcionan un poco cuando les da la gana, y si vas a una hora sin personal y resulta que ese día le da por no funcionar o no leerte la huella dactilar, pues te vuelves a tu casa, o te tiras 10 minutos haciendo malabarismos hasta que consigas que te reconozca. Por otro lado, ya de primeras te clavan 19 euritos por la mierda de pulsera, que tiene pinta de durar un mes antes de romperse, y que además van a fondo perdido. En otros gimnasios, sistemas parecidos te permiten dejar un dinero en depósito que se te devuelve cuando devuelves el objeto. Aquí no, aquí te la guardas para volver cuando quieras volviendo a apuntarte, pero el dinero ya no te lo devuelven. Y más te vale no perderla, claro. 3. Hay bastantes máquinas, pero se echan de menos algunas, como femoral tumbado o contractora de pecho. No obstante, van a ampliar las instalaciones, así que con un poco de suerte meterán alguna más. Tampoco he encontrado ninguna máquina para estiramientos. 4. Los vestuarios son mínimos y bastante cutres. Dos duchas y unas cuantas taquillas pequeñitas a las que tienes que poner tu propio candado y cargar con tu llave(si no es de contraseña). Olvídate de llevar camisa porque no la vas a poder colgar. Traje ni hablamos, claro. 5. Las máquinas son modestas, nada de teles incorporadas en las cintas de correr ni nada de eso, pero aún así no están nada mal. 6. Como el precio es tan tirado, hay bastantes pandillitas de jovencitos y tal que tienen toda la pinta de pasarse el día metidos allí con los colegas echando el rato. En conjunto, sin ser la perfección, y a la espera de ver cómo evolucionan los próximos meses, creo que es una buena opción.