La pareja, dueños de este establecimiento, además de majísimos, te tratan estupendamente. Vale, quizás los precios de los vinos, y perdonadme, pero yo de vinos entiendo poco, son un poco caros, pero por lo que tengo entendido, son lo que valen. Tienen una amplia oferta de vinos y licores. De hecho, todo el local está ocupado por estanterías llenas de botellas, donde creo que hasta los más entendidos en la materia podrían pasarse horas y horas deleitándose con caldos de gran calidad. Pero no sólo vinos y licores tienen. También tiene su pequeño apartado de delicatessen. Si pasas por la Calle San Pedro, no dudes en parar en este local.
Mina P.
Classificação do local: 5 Madrid
Este pequeño local fue todo un descubrimiento. Bodegas Trigo, asentado en una de las calles menos transitadas del Barrio de las Letras, atesora toda una serie de productos de primera calidad donde los buenos vinos y selectas cervezas se agolpan en sus baldas. En los últimos años ha vivido una serie de remodelaciones con el fin de dinamizar el negocio. Y es que Trigo, de ser un ultramarinos de barrio superviviente a la vibrante dinámica de cambios que ha vivido Cortes, se ha transformado en una bodega de productos de primera calidad. Una pareja de jóvenes son los responsables de todo esto. Con una tenacidad propia de quienes tienen proyectos y ganas de hacer las cosas bien, luchan por sacar adelante ese pequeño ‘navio’. Y es que de los pequeños sitios sales las geandes ideas, sin dudarlo. Y es que de su ‘laboratorio’ ha salido su joya de la corona: la cerveza La Osa. Y es que todo aquel que haya rondado por el barrio se habrá encontrado con esta cerveza. Pues ahora ya sabéis de dónde viene. Una cerveza, literalmente, de barrio.
Eduardo D.
Classificação do local: 4 Madrid
Esta bodega tiene la mayor concentración de vinos de calidad por metro cuadrado que he visto en Madrid. Aquí no hay largos y grandes pasillos llenos de mercancía, todo se reduce a dos o tres estanterías en las que está una de las mejores selecciones de bebidas de la capital. Se pueden encontrar vinos de todas las denominaciones de origen, cada uno de ellos con la correspondiente etiqueta que detalla sus características principales; también hay ginebras, rones y una buena variedad de cervezas artesanas. Los precios son correctos y la atención es exquisita. Su propietario le dedica a los clientes el tiempo necesario para explicar cada uno de los productos que ofrece, sus diferencias, similitudes, ventajas y desventajas. En otras palabras, proporciona una asesoría completa en la materia. Posiblemente ese vino ilocalizable o esa novedad irresistible esté en el catálogo de Trigo, por ello me doy una vuelta de cuando en cuando por este lugar. Muy recomendable.