Poco a poco, los mercados han dejado de ser un lugar donde sólo se va a comprar para convertirse en sitios donde puedes echar unas cañas y comer algo con amigos. En esta línea se encuentra Bakáliko, un híbrido entre tienda de comestibles y bar de tapas, especializado en productos griegos. Dado su estatus de puesto de mercado, es un local pequeño, pero dispone de algunas mesas donde se pueden degustar las tapas griegas elaboradas por su dueño. Las tapas van desde las más típicas, como el tzatziki(salsa de yogur con pepino, ajo y eneldo) o los dolmades(hojas de parra rellenas de arroz), a otras no tan habituales por nuestros lares, como las empanadas griegas. Eso sí, una pega para mi gusto es que se echan en falta más platos cárnicos. Yo probé el tztaziki con un pan de pita casero riquísimo y una espectacular moussaka(que según me dijo el dueño no está en carta todos los días debido a que la elaboración es muy compleja). Y lo mejor: si algo te gusta mucho puedes llevarte a casa algunos de los ingredientes(en mi caso, una sal con especias de Creta con la que estaba sazonada la moussaka). En definitiva, un sitio perfecto donde iniciarse en la comida griega o probar platos no tan conocidos en formato de tapa.