Ay Mi Madre!

El local es vintage y pequeñito pero el menú está muy rico y por sólo 8.90 (incluye dos platos, bebida y pan) por 1 € más te dan postre, café o infusión. Me sorprendió la frescura de los alimentos y lo ricos que estaban! Si pides un té no te olvides de comer las pastas que lo acompañan, deliciosas!

Una opción ideal para comer con calidad a precios económicos. El menú de lunes a viernes esta con un precio muy ajustado a 8,90 €. Es una plan muy bueno para cuando estés por la zona de malasaña. Tienen reparto a domicilio. Si quieres comer en el propio local disponen de poco sitio, pero si tienes suerte de encontrarlo disfrutaras de buen trato y de una decoración original.

Soy un auténtico desastre en la cocina. Bueno, miento, no soy técnicamente un desastre, pero carezco del tiempo que me gustaría tener para dedicárselo a la cocina como está mandado. Generalmente siempre voy a toda prisa y termino haciendo cosas de batalla. Un filete a la plancha, una ensalada, pasta, algo de pescado a la plancha… Y así todas las combinaciones absurdas de estudiante universitario que os podáis imaginar. Incluso habiendo yo dejado la Universidad tiempo ha.
Por suerte, existen sitios como Ay mi madre! donde te hacen menús para llevar. Puedes pedir por teléfono o por Internet y pasar a recogerlo. El local cuenta incluso con una pequeña barra por si te lo quieres comer allí, pero también es ideal para las tardes primaverales /​estivales en los que la plaza del Dos de Mayo está en un apogeo divino.
Como todavía hace fresco, yo opté por llevármelo a casa. El menú ha subido un euro (ahora cuesta 7.50) pero sigue siendo muy completo: primero, segundo, bebida y postre, vamos, que comes bien. Me llevé ensalada de naranja y queso y un burrito de pollo, aunque siempre hay más dos opciones disponibles, que es muy guay. También tienen empanadas, bocadillos y cualquier cosa que se pueda llevar.
La comida está buena, no hay nada que objetar. Quizá al final las patatas del burrito se me quedaron un poco chiclosas, pero el resto era bastante digno, que es lo que cuenta.

Sólo tengo una cosa que decir: Menú riquísimo y casero por 6,50 €. Hay que ir al local a recogerlo, aunque si tienes la suerte de vivir cerca te lo llevan a casa.
El local es como entrar en una historia retro y es muy difícil no quedarse con la boca abierta mirando a todas partes y babeando por el riquísimo olor que desprende cada plato de este lugar.
El trato magnífico y la comida buenísima. Poco más se le puede pedir a este sitio, o quizá sí, un par de mesas para poder quedarte allí a disfrutar de su comida.

En plen calle Palma esta este maravilloso rincón de comida preparada. Este sábado, entre sol y más sol, estaba con unos amigos y nos pillamos unos menús bien baratos y nos fuimos a la plaza de Dos de mayo que está a una calle. Allí nos sentamos a la bartola a disfrutar de nuestro packlunch tan particular.
Es cierto que hay más sitios como este de comida preparada por esa zona pero la razón por la que soy fijo de ¡Ay mi Madre!, además de que son bien majos, es porque su horario nocturno es más aprecido al mío y me ha salvado más de una noche de verdadero despiste! despensa desierta, estomago vacío y casi media noche!

¡Ay mi madre! Había invitado hoy a comer a casa a mi amiga Laura y aún estoy en la cola del paro esperando mi turno. Encima ayer me sobré; que sí soy un mago de los fogones, que sí sólo trabajo los platos elaborados, que si el arroz y la pasta es el recurso de los novatillos de la cocina.
¿Qué hora es? La una y cuarto. ¿Cuánta pasta llevo en la cartera? Catorce euros. ¡Piensa, piensa! ¡El Ay mi madre! Por catorce euros me llevo dos menús con fundamento para casa y quedo como un señor. También puedo preparar una ensaladita especial de las mías, de las que llevan de todo, y comprar unos fingers de queso, unas empanadas argentinas, unas tartaletas de espinaca, unas bombas de patata y unas brochetas de pollo.
Sí, eso haré. Llamo y que me las lleven a casa. Es lo que tiene vivir en el centro. Si vives por el barrio te llevan la comida.
Diré a Laura que la comida no la hice yo. No me gusta empezar una relación con mentiras. Sí que la comentaré que a mí me salen mejor las tartaletas de espinaca