Si quisiera que me enterraran al morir(que no es el caso) este sería uno de los lugares en los que me gustaría descansar en paz. Este impresionante cementerio islámico es uno de esos que si no es por Unilocal o porque te lo encuentras ¡es imposible llegar! No es que sea complicado, es que nadie te avisa de que existe, el ejemplo es que mi marido(granadino de nacimiento) no lo visitó hasta un día en que lo encontramos en una de nuestras salidas a correr matutinas por la ciudad. Resulta que llegamos hasta La Alhambra, el Cementerio de Granada y… corriendo, corriendo nos encontramos con una construcción sencilla y un cartel en árabe y castellano que decía «Cementerio islámico La Rauda». Como estaba abierto y somos curiositos, nos metimos pispar. ¡Es precioso! Mientas el cementerio de Granada es uno más, un lugar lleno de lápidas, cipreses y panteones dentro de una construcción cerrada, este lugar es un balcón a la Sierra, sin cemento, con mucho verde y sin tumbas. Los musulmanes hacen unos entierros muy sencillos, muchos de ellos se entierran en sudarios(sin ataúd) y no existen reglas a la hora de cavar tumbas. Así que aquí, por ejemplo, apenas hay carteles y montañitas de tierra. Si no es porque hay algunas más obvias, podría pasar por un jardín bonito frente a Sierra Nevada. El primer día que fuimos, había un chico joven en la puerta que nos saludó al entrar y salir, no nos miro mal ni nos preguntó, y la verdad es que entrar con las pintas de correr, sudados y tal, no sé yo si desde fuera parece muy respetable. Pero oye, entramos, estuvimos un rato disfrutando de la tranquilidad y de lass vistas del lugar y salimos por donde habíamos venido. Si por casualidad vas a La Alhambra y te apetece visitar un lugar especial, te lo recomiendo, ahora nosotros vamos siempre que salimos a correr. ¿A un cementerio? bueno pues a este, sí.