Con todo el tiempo que llevo en esta zona no sé cómo no se me había ocurrido ir antes a tomar algo allí. De momento lo único que he probado han sido las tostadas y los bocadillos y ambas cosas están buenísimas. Es un bar que lleva ahí desde que se empezó a construir en esta zona. por el precio y por la calidad de lo que sirven, está siempre lleno de obreros y peones. Las tostadas son gigantes y el café está rico. Los bocadillos son muy grandes y baratos y te los ponen con aceitunas o te ponen un mini bocadillo(tipo montadito) cuando te pides una bebida, la única pega es que a mi me gusta que el pan de la catalana esté tostadito pero es un sitio bueno, bonito y barato.