Dicen que todas las cosas tienen alma y realmente lo creí cuando entre a este lugar, tiene un alma propia a pesar de estar rodeada de locales similares, el concepto del café es tan autentico que te enamora, la comodidad de estar como en casa, lo abstracto de la decoración por todos los muebles y lámparas. También la venta de ropa que ofrece el mismo sitio, puede disfrutar de una charla tranquila sin presiones de estar consumiendo a cada rato, o leer un buen libro en cualquier rinconcito del café, hay una persona súper especial que te va atender, Glenda, es la creadora del Café desde que se situaba en el pasaje Gómez. Ahora el café es un poco más pequeño pero aún sigue con esa esencia, si necesitas estar relajado puedes visitar este amable lugar, talvez tengas la suerte de tener una platicada con Glenda, y saborear la calidad del café que te brinda. Nada mejor que un ambiente inspiración para reflexionar o innovar.