Puestito de Tamales y atole

Creo que a esta señora le he comprado más tortas de tamal que a ningún otro tamalero. Generalmente, los tamales son un antojo que busca cumplirse donde te agarra, y si es temprano, en cualquier ciudad mexicana habrá algún paciente tamalero en una esquina. Pues yo me despertaba, me hacía un café, y salía para cruzar la calle y comprarle a esta señora mi desayuno. Lo hice tantas veces que perdí la cuenta.
Aunque la cercanía tiene todo que ver, no le hubiera comprado tantas si no fueran riquísimas. Es el puestito predilecto de los oficinistas del ayuntamiento, que suelen ser muy tamaleros. De a poco han llegado más vendedores de tamales a esta zona, y no están nada mal, pero yo me quedo con este puesto.

Todos los mexicanos sabemos lo que es desayunar tempranito un tamal y un atole calientito, en un puesto callejero. La experiencia tiene algo especial que me encanta, sobre todo cuando hace mucho frío.
A este puestito iba mucho antes, cuando me quedaba súper cerca de mi casa. Ahora que me cambié, no voy tan seguido pero la verdad lo extraño.
Como en todo puesto de tamales, venden de dulce, verde, rojo, de mole, y la famosa torta de tamal (yo tengo que tener demasiada hambre para querer una torta de tamal!), además del tradicional atole que siempre va de la mano del tamal. La verdad son muy ricos, y la señora que atiende muy amable.
Este puesto está solo en las mañanas y lo puedes encontrar justo frente a la presidencia municipal de San Andrés Cholula.