Swap Meet Plaza Fundadores

Todavía me tocó conocer ese local cuando era una pista de patinaje. La parte techada con el letrero de un sol era una pista con baldosas y rampas para patines de cuatro llantas (verticales o en cuadro).No sé si el negocio quebró, pero tiene ya un tiempo siendo un Swap meet.
Entre semana el espacio está desierto. Obviamente, pues el servicio es en fin de semana, pero cuando esos días llegan, está a su máxima capacidad. Dividido en ocho pasillos y dos bloques, la parte externa del swap meet ofrece una indecente cantidad de artículos, desde herramienta para construcción, colchones, discos y películas, hasta lavadoras, muñecos de felpa y, aunque no lo crean, mascotas.
En este swap meet puedes pasar de un puesto de ropa a uno de electrodomésticos sin previo aviso. No hay un orden en cuanto al producto que oferte cada pasillo, excepto el final, donde se encuentran los puestos de comida: pizza, pozole, tamales, tostadas de ceviche, cualquier garnacha y un puesto exclusivamente de tejuino, esa extraña bebida de maíz de sabor tan característico.
Hasta aquí todavía no entramos a la parte que era una pista de patinaje. Aún conserva la forma de una pista, sólo que las rampas fueron sustituidas por estantes y vitrinas, que ofertan artículos más específicos: zapatos, vídeo juegos y el servicio de reparación de consolas, artículos esotéricos (piedras, pirámides de cristal, cuarzos y esas cosas), y hasta un estudio de tatuajes y perforaciones.
Es cierto que en Tijuana abundan los negocios de este tipo, pero de los swap meets que conozco, este sin duda es el más variado en cuanto a mercancía, y uno de los más bonitos, por su decoración. Además siempre hay estacionamiento, porque se adueñaron de un espacio vacío que está a un lado. ¡visítalo!