Azúcar y Sal

I’m in love. And it’s with a pastry that I don’t even know what it is. All I know is it says queso, and it is one of the many things I have tried from Azúcar y Sal in the two days I’ve been in Mexico City. I’ve had two kinds of empanadas and a piece of some sort of cake as well. My Spanish is terrible, so I’m just playing Mexican Bakery Roulette. So far, I keep coming up a winner. Everything here is delicious, and pretty affordable. I can’t see how I don’t end up here every day for the rest of the week I’m in Mexico City!

Lo malo de este lugar, es que no abren los sábados, ni los domingos.
El pan dulce es rico, pero no es cosa fuera del otro mundo, también tienen opciones saladas que son muy sabrosas.

Azúcar y Sal fue uno de los descubrimientos mágicos cerca de la oficina. Me llamó la atención el olor a pan, pero cada compra que hago ahí es una sorpresa.
De entrada el café esta bastante bueno y a un precio menor que cualquier cadena (menos de 20 por un americano bien cargado). En segundo lugar, la variedad de panes hace agua la boca para cualquiera que pase a la hora del desayuno o para el postre de la tarde.
La mejor sorpresa de temporada: El pan de muerto. Tienen unos panes individuales hechos con nuez o agua de azahar que son una verdadera delicia, totalmente diferentes a cualquier otro que he probado este año. Siguiendo con lo dulce, la bolsita de tres alfajores caseros es ideal para compartir durante una tarde cualquiera.
En el caso de los salados, la variedad de panes integrales o aromatizados esta genial para acompañar desde una comida cualquiera hasta para quedar bien en una cena fancy. Mi favorito al momento: el bollo de hierbas finas.
No puedo decir que es una panadería barata, pero tampoco cae en los costos excesivos de varias opciones hipsters de la zona y vale perfecto la pena los pesos extra. Las piezas van de los 9 a los 16 pesos.

Este lugar llama la atención porque está justo en la esquina de Versalles y Lucerna y su diseño es llamativo. Tienen tres secciones muy bien divididas: Panadería, Repostería y Cafetería. Sobre la calla de Versalles entras a la parte de la panadería y por supuesto el aroma es delicioso. Tienen panes salados de todos tipos en charolas para que elijas y tienen otros envueltos en papel celofán por si pasas de rápido a comprar alguna pieza para alguna comida o cena.
En la sección de repostería tienen pasteles de todo tipo y también te venden por rebanas por si deseas comerte un pastelito y acompañarlo con un café, lo cual nos lleva a la tercera sección que es la cafetería, misma que está ya sobre la calle de Lucerna. Hay café de todo tipo: americano, capuchino, expresso, latte, frappé, etc. Todo te lo preparan al momento y los precios me parecieron bastante razonable. 15 pesos por un café americano, nada mal ¿no?
Tienen algunas mesitas por si deseas quedarte ahí a degustar de un pan, un pastel y/​o un café y platicar con amigos o con los compañeros de trabajo, pues hay varias oficinas por ahí y aprovechan la hora de comida para un rato de descanso y esparcimiento en ese lugar.
Me encantó la decoración y un cuadro que tienen con una taza de café con un corazón. El personal está debidamente uniformado de negro y todos son muy amables. Puedes ver cómo preparan el pan porque tanto el horno como el espacio para amasar y acomodar el pan en las charolas está a la vista.
Si están por la colonia Juárez, cerca del teatro Diego Rivera o del Teatro el Milagro, recomiendo ampliamente que visiten este lugar, que para mí es parecido a otros, pero diferente a la vez.