Entre el ambiente obscurecido que ronda el cruce de López Mateos y las vías de Avenida Inglaterra, una luz verde baña los ventanales de este local. Con tres o cuatro lugares de aparcamiento y un aforo como para 20 personas, es un restaurante que bien podría estar en cualquier calle de medio oriente. El menú es engañosamente amplio, larga historia corta. Todo es lo mismo, solo que puedes cambiar la carne y la salsa(en lugar de hummus jocoque) de ahí en fuera no te partas la cabeza pensando en las posibilidades que ofrece cada platillo detrás de los nombres«mediterraneo» y demás. Es lo mismo. En sabor es bueno… a medias. He de confesar que he probado mejores y con mayor calidad. Eso sí, recomiendo más el Gyro, que es el que tiene jocoque. El lugar a mí siempre me ha parecido medio sucio. Las paredes dan la sensación de estar recubiertas por grasa centenaria. En el baño(solo hay uno) la carencia de jabón y toallas para secarse te asaltan mientras buscas por todos lados con las manos mojadas, para acabar secándote con tus piernas. La atención es un tanto… cómica, ante mis papás(un par de adultos mayores) el mesero entabló este diálogo: –De refrescos esos sí tengo un chingo. –Pero entonces aguas ya no tienes –aclaró mi mamá. –No, es que se me echaron a perder todas, se descompuso el refrigerador y como que no confío mucho que estén buenas, también tenía un chingo, pero mejor no las servimos. –Ah… bueno, entonces una coca. ¿Lo sirves en vaso? — Pues vasos sí tengo, si quiere se los traigo, pero si no, pues no. — ¿Y hielo tienes? –Preguntó mi papá. — Pues en el oxxo, podría ir por una bolsa, pero acá no. O sease, no es malo el servicio, pero está chistosón, también para entender que todo era lo mismo y le cambiaban el nombre por nomás, pues fue un brete. Por lo demás bien, cierran tarde al parecer y pues tranquis todo. Algo chido: las órdenes tienen dos tacos, así que se puede compartir si no hay tanta hambre o pedir otra cosa. Mal: el tabule está como que muy aceitoso, personalmente como que me dio asquillo y de las hojas de parra como que algunas ya estaban medio marchitas. Sí para una noche después de la fiesta. No para cena formal hahaha… nunca.
Carla G.
Classificação do local: 4 Zapopan, México
Cuando me dijeron que íbamos a un restaurante árabe, la verdad me esperaba algo muy distinto. Nunca había comido nada, ni había visitado algún lugar de procedencia árabe. Cuando llegamos me sorprendió que estaba en una avenida, en un punto de la ciudad que paso casi todos los días y jamás lo había visto. Está a unas cuadras de la Minerva, del lado derecho de López Mateos, yendo hacia Plaza del Sol. Es un restaurante modesto(Deberían de existir tipos de nombre para el tamaño del restaurante) No parece en absoluto un restaurante internacional. En cuanto a la comida solo probé los famosos Kebabs. Me acuerdo que el sabor se me hizo extraño, pero bastante rico. Con el tiempo probé más lugares con este tipo de menú, y Al Malek es de los mejores definitivamente. Tienen un sazón muy rico. Aunque soy un poco exceptiva con la comida nueva, me gustó mucho.
Fabiola N.
Classificação do local: 4 Zapopan, México
¡Y el premio a la mejor comida árabe de Guadalajara va para este restaurante! Mis amigos y yo somos fans de la comida, consideramos muy serio el arte de «gordear» y habíamos ido a varios lugares de Kebabs y tacos árabes, y aun que estaban muy ricos, no habíamos encontrado ELLUGAR… hasta que nos hablaron de este sitio… y con la frase«ahí si le ponen cordero a sus platillos» nos convencieron. Es un lugar pequeño y modesto, muy cerca de la Minerva, en la fachada cuelga una lona con el nombre del lugar; había pasado muchas veces por ahí, pero nunca lo había visto(supongo que cuando te dicen que es un restaurant árabe te imaginas toda la decoración y esperas que casi casi esté Aladdin sentado afuera). Al Malek ofrece mucha variedad de platillos, tienen Kebabs, Shawarma, Hummus, Kibbes y un montón de cosas más. Eso para empezar ya le da un plus contra otros lugares que se especializan solo en un platillo. Nosotros pedimos los platillos que ya mencioné y los compartimos entre todos. La verdad es la comida árabe más rica que he probado en Guadalajara. No es muy caro, pero tampoco es barato, vale la pena eso sí. Así que ya saben, si quieren probar una buena comida árabe, con carne de cordero, esta es una muy buena opción.