He presenciado demasiados funerales… Más de las que quisiera. De parte de mi familia tenemos demasiados conocidos y todos ellos con familia propia. Es por eso que si muere alguien, nos mostramos solidarios y los acompañamos en esos momentos difíciles. De inicio este año he ido a por los menos 5 funerales. El más cercano fue hace unas dos semanas, se murió la hija de una amiga de la familia. Esto tuvo lugar en Bretón, la cual es una funeraria con paquetes mortuorios para clase media, media alta. Cuenta con salas para funerales, para dar el último adiós. Entre los salones cuenta con uno principal el cual es el más grande. Ese salón lo conocí cuando hace 7 años murió una amiga de la familia, ya de años, que incluso aún con el tamaño de la sala apenas cupimos porque fuimos como 200 personas al funeral y al entierro. También cuenta con una incineradora en el mismo lugar. En conclusión todos morimos, y la muerte sale muy cara.
Elizabeth T.
Classificação do local: 1 Cancún, México
Soy amante de la vida y por lo mismo se que algún día desgraciadamente debemos despedirnos de este mundo y lo más difícil, aceptarlo, porque el día que me muera, yo no voy a llorar pero si mis seres queridos. Y para no dejarles más tristeza de la que ya es, sufrir la muerte de un ser querido, es mejor en vida pensar en las opciones y la manera en la que deseamos que descansen nuestros restos, aquí en la funeraria te ofrecen paquetes de acuerdo a si deseas ser enterrado o incinerado. Personalmente no quiero que me coman los gusanos. Me es imposible decir que mi visita a esta funeraria haya sido grata o de lo mejor, cuando he ido es porque algún amigo o amiga se me ha adelantado y venimos a pasar unas horas en agradecimiento a las enseñanzas que me haya dejado, ya que siempre todas las personas nos dejan una lección que aprender.
Ricardo A.
Classificação do local: 2 Cancún, México
Hace no mucho tiempo tuve que ir a darle el último adiós a una persona del trabajo a este lugar, y un poco antes, a acompañar a una amiga a darle el último adiós a su padre. Honestamente, las pocas veces antes que había pasado por ahí cerca me parecía un lugar triste, al que no me daban ningunas ganas de entrar. Pero pues ni modo, fallecieron estas dos personas y tuve que ir. Sin duda mis expectativas no se equivocaron. El ambiente era desolador. Desconozco por completo cuál sea el trato que la Funeraria da a los deudas, el cuál probablemente es muy amable, y seguramente mucho más económico que otras funerarias de Cancún, pero al menos en mi experiencia que ha sido la de estar ahí un par de horas acompañando a deudos y familiares, ha sido muy triste, muy oscuro y absolutamente nada acogedor. Me parece que se siente todavía más la tristeza y la soledad que deja en sus seres queridos el fallecido, así que, probablemente podrían mejorar el aspecto de los salones donde se llevan a cabo los funerales. No digo que lo pinten de rosa y amarillo y le pongan luces néón, pero al menos pintar las paredes de blanco en lugar del color marrón que yo recuerdo. No sé, algo que contrarreste un poquito el trago amargo de tener que estar en una funeraria.