La Bendita

Es mi primera vez después de haber oído hablar mucho de este lugar. Ambiente ideal acompañado de música (mejor tranquilita) para tomar un café o cualquier cosa y disfrutar sólo o de la compañía. Volveré seguro…

Sitio fashioneti y modernillo en pleno centro. Es un bar muy chulo y grande.
Hay sillones cómodos para tener una graaaan conversación ;)
La decoración es total, muy vintage.
Los tés fresquitos son muy buenos, y ahora apetecen con el caloret faller.
Los camareros son atentos y simpáticos.
Me he quedado con las ganas de probar los bizcochos, tienen una pintaca…

Es que cuando empiezo no paro. Y lo digo porque esta mañana he estado desayunando con una amiga aquí en La Bendita.
Como siempre hemos estado disfrutando de su tarta de manzana, te y café.
La verdad es que si bien es un lugar muy pintoresco por su mobiliario, te puedes encontrar hasta las butacas del cine al que ibas cuando eras pequeña, hasta la silla de la cocina de tu madre de la misma época.
Es un ambiente luminoso dados sus grandes ventanales, un poco congestionado quizás con tanta silla, sillón, butaca, sofá, que si bien le imprime carácter, en ocasiones te cuesta un poco llegar a tu destino con tus platos, tazas, y demás por ello.
No obstante la tarta –madre que laminera soy– estaba riquísima, recien hecha, con ese caramelo por encima que se deshace en la boca y mucha manzana –como debe de ser una tarta de manzana–
Como podéis ver en las fotos que hay sobre el negocio, tienen una amplia gama de tartas, repostería, bocatines, etc. para tener un desayuno perfecto.
Buen lugar para reponer fuerzas bien a primera hora de la mañana o a media tarde o mañana.

Cafes y tés de la Bendita con una gran porción de las exquisitas tartas que hay a diario es realmente una bendición.
Lugar casi obligado del centro de Zaragoza donde sentarte a disfrutar de tu pedido rodeada de sillas de una clase cada una! Me encanta la decoración!!!

Un lugar donde puedes tomar tanto un buen café como una copa. un lugar peculiar donde te vuelve un poco a la niñez con las sillas de colegio. sillas de anea. una gran variedad que lo hace un lugar atipico. Y una terraza donde poder conversar relajadamente. Buena calidad y precio y un buen servicio.

Una cafetería con mucho encanto en Zaragoza. Destaca por su amplio espacio, con decoración vintage. Ideal para charlar con un grupo de amigos en cualquiera de sus creativas mesas. Ojo a las sillas. Alguna ‘se hunde’ jajaja. Para repetir.

Si quieres tomarte un buen café, en buena compañía y como si estuvieras en el salón de tu casa, pásate por una de las cafeterías más guapas de Zaragoza
La Bendita

Nunca me había fijado en que en esa esquina tan céntrica había una cafetería tan mona y con ese encanto como es La Bendita.
El estilo es moderno y precioso. Además tiene una pequeña terraza dentro del propio bar que es una cucada.
El servicio malo, la verdad, tardaron y pedí sacarina que nunca llegó. Las tartas tenían buena pinta pero un poco caro todo.

mis seguidores en RRSS conocen bien este local y todos se apuntan a visitarlo cuando vengan a Zaragoza.
La Bendita tiene todo lo que yo busco en una cafetería: buen café, buena repostería, variedad de tés, granizados, tés fríos, etc, decoración cuidada, música tranquila y elegida, y camareros agradables (ellos encantadores, ellas no tanto)
Iván es el camarero de la sonrisa permanente, mira que vengo veces y siempre lo veo atender a todo el mundo con mimo y una sonrisa de oreja a oreja. De verdad que sólo por ese recibimiento ya merece la pena venir.
El local es muy amplio, decorado por El Altillo, lo que le da un ambiente cuidado y muy especial. La terraza acristalada es super cuqui y tiene muchos sofás y muy cómodos.
Los precios en la media, 1,50 un café con leche, por ejemplo.
En Coso esquina con Blancas y entrada por las dos calles, las vistas por la noche al teatro Principal son preciosas.
Un sitio al que no me canso de venir

La Bendita es un café muy centrico y acojedor. Bastante grande aunque a tope a las horas puntas. Tiene una bonita decoracion moderna, en mi opinion, hacian falta bares así por el coso!

Café rápido con una amiga de fuera de Zaragoza, tanto a ella como a mí nos ha encantado el lugar.
Sin duda repetiré con más tiempo para poder escribir una reseña en condiciones, pero con esta primera y rápida impresión tanto el local como el trato me han parecido perfectos; volveré.

Situada en pleno centro de la ciudad, la decoración en tonos muy cálidos hace que este incluida en mi lista de cafeterías cuquis de Zaragoza. Tiene además una pequeña zona separada, una especie de invernadero, que le da todavía un aspecto más bonito y acogedor.
He estado en varias ocasiones, y me parece un sitio ideal para tomar un café con alguna pieza de repostería casera. Muy buenos los plum cakes y los bizcochos que ofrecen.
Para los que prefieren lo salado, tienen también una gran variedad de pinchos para el momento aperitivo.
El personal es muy agradable, y como única pega sólo comentaría que no tienen servicio de mesas.

What a shame this place is. I went in for a bite to eat when they were really busy & only had 3 staff. Tables were piled with dirty dishes and staff were struggling to cope with customers. I went to the counter and was greet by a terse lady trying to give me change before I had even ordered. When she realised I wasn’t the right person, she turned away in a bit of a huff… A bad start, but everyone can be forgiven.
After a few minutes of waiting, the same woman came back and asked me something. Because I don’t speak Spanish, I told her I didn’t speak Spanish to which she immediately rolled her eyes and screamed out to her coworker to help. The coworker then turned away and did something else while the original woman also walked away.
So I just stood there. And when it became apparent they were too busy to give a …, I left.
Cakes looked good, but service was LOUSY.

¿Que qué pienso de @labenditazgz? Gracias a la apertura de locales como este, Zaragoza se va a colocar en un lugar destacado en el mundo del cuquismo…
Localizado en uno de los locales mejor situados de Zaragoza, en pleno centro neurálgico de la ciudad, La Bendita abrió sus puertas hace escasos meses y aun con ese poco tiempo de vida, se ha convertido en uno de los referentes de Zaragoza.
El espacio es amplio y agradable, decorado con una mezcla ecléctica de estilos y muebles de diferente formato y condición. También cuentan con una zona externa, tipo invernadero, de lo más solicitada.
El servicio es atento y agradable aunque sólo sale de la barra para recoger las mesas… no les esperes sentado en tu mesa para que te tomen nota… tendrás que mover tu cucu hasta la barra y pedir allí.
En cuanto a la barra, cuenta con un generoso expositor de dulces, entre los que destacan diversos tipos de tartas y plum cakes, a un lado y a otro algunas tapas para los que les apetezca darle más a lo salado.
Además de cafés y tés, también pude observar que sirven todo tipo de licores, alcojoles y bebidas espirituosas, así que la próxima vez, igual voy a tomarme un «güisquito»…

Desayuno domingo.
Gran variedad en dulces como en salado, local agradable y bien decorado.

Un ejemplo perfecto de lo que puede ser un reciclado de una cafetería de toda la vida. Ha ganado muchísimo con la reforma, da gusto sentarte aquí a tomar un café, incluso te incita a consumir algún dulce, todo te sabe mejor ahora.

Uno de los lugares más «kukis» de la ciudad.
Ideal para una charla tranquila entre amig@s o una reunión de trabajo informal.

Uno de los lugares que últimamente más frecuento para quedar con amigas. Y es que es muy kuki y tienen de todo. Desde pasteles y madalenas a croquetas y tapitas ricas. Yo lo que pido es té y esas cosicas. Pero un día de estos me tiro a la piscina y me como algo. Jaja. Decir que la decoración es muy chula. Todo pintado de blanco y con muchas mesitas pequeñas con sillas cada una de un estilo. También hay sofás y un montón de espejos. Lo que más mola es un cuartito que tienen como terraza. En invierno es parte del bar pero en invierno abren las ventanas y se ve súper original. Pues eso, recomendable 100% para tener ratos tranquilos y kukis en el centro de Zaragoza.