Tendido 1

Local del que no soy asiduo, no habré ido más de tres veces en mi vida. Desde fuera es un bar más, no destacaría por nada en concreto. No es especialmente grande, con algunas mesitas y una barra normal. Eso sí, trabaja un amigo mío y eso lo hace especial para mí.
Lo mejor del Tendido 1 es su magnífica ubicación, hace esquina entre las calles Adriano y Pastor y Landero, si te sientas en una de las mesas a través de sus ventanales observarás la bulliciosa vida del barrio del Arenal.
Un punto fuerte de este bar es que durante la época de festejos taurinos hace su agosto. Se llena hasta la bandera. Como ha dicho Álvaro B. se come y por lo que me han dicho bastante bien. El menú cuesta 9 euros y es bueno y casero. Pero no lo he probado, eso sí, entre semana a la hora del almuerzo no cabe un alfiler, así que será por algo.
El café está muy bien hecho. El servicio me encanta y el precio es el lógico. Si tienes que hacer una parada para retomar fuerzas, este es tu sitio sin duda.
Buon Appetito.

Es mi local preferido para desayunos, quizá por precio, puede que por costumbre, pero con el tiempo (voy casi todos los días) le he cogido cariño hasta a los camareros… Y mira que yo no soy de darle charla al personal.
Los desayunos son bastante completos, desde tostada con aceite, pasando por la carne mechada, el jamón york o el foie gras. Las medias son bastante apañadas, de hecho a mí me sobra y me basta con media (un bollo pequeño, no media tostada literal).
El café sí que hay que pedírselo templado para que no te lo pongan a temperatura nuclear, pero todo es saberlo y decirlo. El jamón serrano no merece mucho la pena, si eres un gran amante del jamón (like me).
Sé que también trabajan los menús del día, pero eso no he tenido oportunidad de catarlo.

Frente al tendido 11 de la plaza de toros, encontramos el Tendido 1 de los bares situados entre la calle Adriano y Pastor y Landero, todo un hervidero de personas cuando se acercan fechas taurinas a la Maestranza.
Es un bar en el que lo mismo desayunas, que almuerzas, que cenas, así que en ese sentido es un bar completo que pasa prácticamente todo el día abierto. Es una de mis opciones para desayunar cuando cruzo el puente, ponen unas tostadas muy buenas y la oferta que tiene en mantequillas, mantecas y patés es bastante amplia y de buena calidad.
Mientras desayunas puedes como la gente va y viene y como gente peculiar del barrio entra contando historias o algún que otro chascarrillo, me gusta mucho la ambientación del bar, podría decir que tiene un encanto especial y eso es de agradecer, porque a mí me gustan los bares que transmitan o que tengan detalles en los que fijarme para saciar mi dosis diaria de curiosidad.
Si se encuentran por la zona, adelante, su carta de tapas es más que suculenta.