Presente Perfecto

Mi objetivo era desayunar en este sitio uno de esas estupendas tostadas que muchas mañanas nos ha puesto por aquí el amigo Oscar L. L con el consiguiente babeo… Pero mi gozo en un pozo, ningún pan especial asomaba por la panera de Presente Perfecto. Es más, el pan era hasta malo, precocido y blanco como una aspirina. El jamón con el que la rellené tampoco era de muy buena calidad, jamón blanco de paquete de supermercado… Tampoco había una selección de tés digna de un sitio tan cuqui, me esperaba que tuvieran una docena de sabores… Al menos a mí no me los ofrecieron para desayunar con la cara de sibarita que tengo :-D. Del café no puedo opinar pues no lo quiero ni en pintura.
En fin, que no sé si el negocio tuvo un mal día, o una mala semana, o ha pasado a otras manos. Pero sí alabo su gusto en la decoración agradable y en que las puertas permanecían cerradas a cal y canto con lo cual se estaba muy a gusto y calentita… Quién no se consuela…

Situado entre Nervión y Viapol es un lugar muy cuco para tomar un café, desayunar e incluso tapear.
El local es bastante bonito y cómodo con mesas bajas y altas. Además dispone de una tranquila terraza con mesas bajas.
Yo he acudido a desayunar y cuidado!!! A las 12 ya no ponen desayunos (tostada) aunque te salvarán sus ricas galleras estilo cookies de chocolate o caramelo y sus magdalenas de nocilla (sí, sí, eso: muffins).
El café está rico aunque, para mí gusto, algo frío.
La atención es bastante buena, son agradables y te atienden en mesa.
Volveré para probar sus tostadas o alguna tapita!

No conocía este lugar y está un poco apartado pero merece la pena hacerle una visita. Un sitio que pasa desapercibido por fuera pero que llama mucho la atención por dentro. Una decoración cuidada y acogedora, buena comida y buen servicio resumen el Presente Perfecto.
La única pega que le pondría es que la carta no es muy amplia los platos no son muy grandes, pero todo estaba buenísimo. Buenos quesos y buena carne, con especial mención a la carrillada, su salsa, y el montadito barbacoa. De precio una cosa normal, entre 10 – 15 € la vez que fui con un grupo de gente.
El trato muy agradable, dejaos recomendar ;)

Un sitio de esos que me enamoran, no por su carta, por su calidad o su precio, más bien por la originalidad que presenta en un entorno de barrio donde los bares suelen estar cortados por el mismo patrón.
Presente Perfecto te ofrece una carta muy peculiar, para un picoteo, primando los platos fríos y sin grandes ostentaciones. Los precios son medios, no se sale de madre, pero encontrarás de todo.
Lo mejor es el ambiente, la atención amable, un sitio tranquilo al menos cuando fui y bien decorado, con gusto y con una temática: la del cole. Aunque parece que cae en el mismo rollo de mobiliario modernito que hay últimamente en todos los bares que quieren resultar originales, en el caso de Presente perfecto al menos le dan una temática y te colocan elementos que lo relacionan con el colegio.
Entre los platos que probé, tengo que decir que la foccacia me pareció sabrosa, aunque normalmente me parecen algo secas. Tanto los quesos como el paté de mojama pueden ser una buena opción para picar y acompañarlo con una buena cerveza fría. También interesante y original el mollete.
Lo dicho, un sitio para parar si estás por la zona, aunque sea para una primera tapa. ¡Salud!

Este es el típico caso de uno de esos sitios en los que estás a punto de entrar porque tiene buena pinta y no te acabas de animar pero… Pero lees alguna reseña de confianza en Unilocal (como la de Augusto G.) y al final te animas y te das cuenta de que merecíà la pena hacerlo.
Un local pequeño y «cuqui» (perdón por el adjetivo, pero creo que así nos entendemos mejor) y con una amplia terraza en la calle. Está atendido por dos chicas muy amables y en general reina un ambiente de «slow food» (perdón de nuevo) de lo más atractivo.
Para desayunar (de momento no he probado su faceta de abacería) tienen una interesante variedad de panes, algunas opciones dulces y leches aptas para algunas intolerancias. Además de WiFi, tienen la prensa del día y es un lugar de lo más agradable para un desayuno sin prisas.
No quiero adelantarme, pero podría convertirse en mi sitio de desayuno habitual.

Pequeño local en Nervion que me ha sorprendido gratamente. Desde fuera no llama mucho la atención, pero cuando entras la decoración ya te muestra que no es un sitio común. Tarros fe cristal en baldas de maderas con colores claros que dan sensación de amplitud. Las mesas de madera, y las sillas de colores.
En cuanto a los platos, te sirven tapas y raciones. Como íbamos en grupo picoteamos de todo un poco. Empezamos con una foccacia de salmón, queso y rúcula que te la presentan en cuatro trozos, además de patatas chips (que creo que sobran), y una ensaladilla de gambas (no me gusta, pero la reseño) y que tenía buena pinta.
Más tarde nos animamos con una carne (no recuerdo el nombre) a la sal que estaba delicioso. Bañada en AOVE y con almendras por encima. Recomendado. Otro de los platos que recomiendo es el paté de mojama. Se presenta con panecillos y almendras (como el caso de la carne). Muy rico.
Dejo para el final lo mejor, disfrutamos de una tabla de queso, grande si se comparte para dos, y con hasta 4 tipos de quesos. Y la carrillada, suave, tierna y con una salsa de cuidada elaboración.
La verdad que me gustó mucho y más por la compañía con la que disfruté el lugar (todos Unilocalers). Volveré en el futuro.

Local que conocí el pasado jueves, tras una visita de trabajo. Dejé el coche aparcado en su puerta y a la vuelta de la reunión, me dije, aquí me va a tocar desayunar hoy.
Presente Perfecto está ubicado en una pequeña placita que forman un par de altos edificios. El interior es chiquitín, pero con una decoración en todos pastel muy elegante. Fuera tiene varios veladores, en los que por la mañana se está muy fresquito. Razón por la que el desayuno sabe mucho mejor.
En la foto de la carta se puede observar que también es una abacería donde te sirven un poco de todo. Como no he ido nunca a catar su repertorio, no puedo valorarlo. Pero tiene buena pinta, las cosas como son.
La chica que me atendió fue pura amabilidad y sonrisa. El cortado y la tostada estaban bien. El precio justo. El ambiente agradable. En fin, que si vuelvo por allí, no dudaré en repetir.
Buon Appetito.