Que no. No te lleves a engaño que esta ferretería no está cerca del campo del Betis. Que lo de Heliópolis no sé por qué será pero definitivamente no es por el barrio donde está ubicada. Buena estrategia de publicidad, te hace pensar en el nombre, que parece no tener sentido, y ya no se te olvida. Es pequeña, está todo muy concentrado. Te recuerda a veces al orden caótico que guardan los establecimientos regentados por chinos. Todo bastante agolpado, pero aún así, en su sitio. Así es esta ferretería, que está a la espalda de la Avenida de las Ciencias, escondida en los bajos de unos soportales, frente a un pequeño parque. El dependiente es, a la vez, una persona resolutiva y amable. De esos que nada más mirarles sabes que te van a ayudar en lo que necesites. Transmite seguridad aunque estés balbuceando tus necesidades. Ya sean cables, tornillos, enchufes… Todo lo necesario para la electricidad y las pequeñas necesidades metálicas lo vas a encontrar aquí. Yo he ido buscando dos cosas en concreto: por un lado, para hacer copias de llaves. Las hace al instante y suele costar alrededor de un euro cada uno, aunque va a depender del tipo que sea. El otro motivo para el que he estado allí es porque he necesitado candados de diferentes tipos. Tiene un surtido interesante de ellos. En concreto, a mí me hacía falta uno típico para taquillas. No es más que una ferretería clásica de barrio. Pero tampoco es menos.